YoonGi es un alfa y JiMin un omega que se conocen desde niños, ambos son cercanos, sin embargo con el paso del tiempo YoonGi es un tanto indiferente con JiMin y JiMin sigue siendo un amor con él.
Desde niños hasta la universidad, JiMin estuvo enamor...
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—Hola, mi amor...—Cuando JiMin abrió los ojos, se encontró a YoonGi, observandolo con mucha dulzura.
JiMin sonrió, ocultando sus ojos detrás de dos arcos, YoonGi acaricio la cabeza del Omega y después dejó un beso en su mejilla.
Se sentía una calma profunda en la habitación, por medio del lazo podían sentir vivas emociones de ambos, JiMin extrañamente se sentía calmado y era muy placentera la euforia, por aquel vínculo, YoonGi estaba embriagando a JiMin de amor.
—¿Qué quieres desayunar?—preguntó YoonGi.
—No tengo hambre aún.—Y era verdad, JiMin solo quería seguir viendo a YoonGi, sentía que con tenerle al lado era suficiente, no tenía la necesidad de comer.
—¿Cuando iniciarán los antojos? Me e preparado física y mentalmente para cumplir tus caprichos, así que siéntete libre de hacerlo.—dijo y JiMin rio bajito.—Parece que alguien se a levantado también, dijo al oir que alguien tocaba la puerta.
YoonGi se levantó de la cama, yendo hacia la puerta, abriéndola y dejando entrar a un pequeño que corría con un conejo de peluche hasta la cama de su papá.
—Papi, tengo hambre.—dijo, acostándose al lado de JiMin y ocultando su carita en su estómago, JiMin solo acarició sus negros cabellos, amaba mucho su pequeño hijo.
—Mi pobre JiHoon ya a pasado ocho horas sin comer.—dijo YoonGi fingiendo tristeza y acercándose al cachorro y cargandolo entre sus brazos.—Hoy serás el almuerzo, te vamos a comer a besos.—dijo YoonGi, besando las mejillas del pequeño, mientras este reía.
—¿Ocho horas?—Y JiMin preguntó aquello preocupado, asi que volteó a ver el reloj en su celular y se percató de que ya eran las nueve de la Mañana.—Dejé a Jungkook con muchas cosas por hacer...
Dijo, poniendose de pie, pero tuvo que volverse a sentar a sobar su cabeza, se había mareado, pero no había sido por su estado, no era exacta su explicación, pero sabía que YoonGi le había transmitido aquello, así que volteó a ver al alfa, parpadeando confundido.
—JiHoon, ve a ponerte zapatos, corre cachorro.
JiHoon asintió y corrió a pasos torpes a su habitación, YoonGi sabía que su pequeño tardaba mucho tiempo en ponerse sus zapatos, pues JiHoon tenía una lucha interminable por intentar abrochar sus agujetas, cosa que nunca lograba.
—JiMin... Eh pensado en que... Deberías descansar, estoy algo preocupado... Y ahora, tenemos un lazo sólido...—YoonGi se sentó al lado de JiMin, acariciando la fresca marca, oculta tras un parche, había sido curada en la noche para que está no se infecta se mientras cicatrizaba.
—Pensaba descansar en el quinto mes... Es el mes en que se les recomienda a los omegas gestantes el descansar... Ahora sería muy pronto...—JiMin puso su mano encima de la de YoonGi.
