XII.

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『ℂ𝕣𝕠𝕨𝕟

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『ℂ𝕣𝕠𝕨𝕟. ℙ𝕒𝕣𝕥𝕖 𝟙』

Camina en la acera. El piso de la calle esta mojado, por ella pasan escasos coches levantando pequeñas gotas que van a parar a la orilla de la banqueta y tal vez un poco más allá. Tiene sus manos metidas en las bolsas de la chaqueta, la capucha puesta y suspira con frío intentando calentarse mientras siente el aire fresco bajar de su nariz a su pecho. Una vez escuchó que si calientas tú pecho primero el resto de tu cuerpo se irá calentando gradualmente, pero tiene un conflicto con eso, ¿no se supone que las partes de tu cuerpo que primero sufren daño por el frío son los dedos, las extremidades más lejanas? ¿Entonces no deberías primero comenzar a calentar esas partes? Intenta concentrase, pero no puede. Por qué habría de concentrarse en ese problema, ya debería saber que no tiene caso resolver algo antes de que aparezca, además, el problema ya ni siquiera es problema. Tiene 100 dólares en el bolsillo del pantalón, constantemente toca por encima de la tela para sentir el volumen del billete, tiene miedo de que se pueda caer por cualquier cosa estúpida y eso sí sería un problema. No tomó un taxi porque no traía más dinero, y la estación estaba a una distancia relativamente prudente, pero el clima le jugo en contra e hizo que se cansara más de la cuenta. Eso fue un golpe a su orgullo de deportista, se suponía que debería haber aguantado bastante bien, pero cualquier persona se agotaría si estuviera caminando a las cuatro de la madrugada por una calle bastante fría y habiendo dormido tan poco.

Por fin llega al lugar esperado, después de tantas cavilaciones y reflexiones. Sus manos tiemblan un poco, pero lo mantiene bajo control lo mejor que puede. Respira antes de entrar, empuja la puerta y da un paso dentro. Pronto su primera preocupación es tener las suelas de los zapatos sucias y manchar el suelo de azulejo blanco con sus huellas de lodo. Su segunda preocupación es que todos lo miran al entrar. Se quita la capucha para demostrar que no tiene ningún propósito malintencionado, que sólo es un chico que necesita sacar a su amigo. Necesita... Amigo... ¿por qué su amigo se había ido?

Camina hacia el hombre con cara más afable, seducido por un bigote amigable y arrugas alrededor de los ojos por sonreír tanto. Se acerca indeciso, no sabe cómo comenzar a hablar, para su suerte el hombre lo hace primero.

― ¿Qué ocurre, chico? ― el hombre reconoce la pesadumbre que cubre la cara de Steve, pero no sabe a qué se debe. El rubio mira el nombre de su placa.

Oficial Stacy

―Buenas noches, oficial ― aprieta sus manos en forma de puño. Y las coloca a sus costados ―. Un amigo mío fue arrestado y he venido a pagar su multa. Se llama Tony Stark ―. Dice luego de pensar las palabras con detenimiento, casi rumiando.

―Debe ser el chico que estaba ebrio, es el único que hemos arrestado hasta ahora ― comenta levantándose ―. Oye, Donovan, han venido por _el millonario_―. Le dice a un compañero con sarcasmo. Steve supone que no saben que en realidad sí es millonario y que el otro estuvo alardeando de ello esperando no terminar encerrado. El oficial le señala con una mano para guiarse el camino. Rogers camina siguiendo sus pasos. Llegan a un pasillo angosto bloqueado por una reja, la cual el gendarme abre con unas llaves que trae en la cintura y le cuesta trabajo sacar al principio. Caminan por ese pasillo constituido por celdas pegadas unas con otras, demasiado reducidas y no muy limpias. Hay un hombre, el cual parece vagabundo, recostado en el suelo de una de ellas cómodamente mirando al techo. Al final del estrecho pasillo se encuentra la celda que Steve esperaba encontrar.

𝑴𝒆𝒍𝒕    |    𝘠𝘰𝘶𝘯𝘨!𝘚𝘵𝘰𝘯𝘺Donde viven las historias. Descúbrelo ahora