☕︎ Capítulo 14 ☕︎

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La semana había comenzado nuevamente y ambos protagonistas se encontraban trabajando. 

Se mantenían uno al lado del otro preparando algunos alimentos para los clientes y organizando los artículos de cafetería. Aún así, estando tan cerca y después de todo lo que había sucedido, no se dirigían palabra alguna, pero un inquieto azabache decidió terminar con el silencio.

–¿Por qué no hablas? A esta hora ya estarías colapsandome con tus preguntas –curioseó mientras dejaba de trabajar y miraba al castaño.

–Nada, supongo que estoy cansado…–masculló y luego miró al pelinegro de reojo. 

–Mientes. 

El azabache se mantenía expectante.

–Ahh, está bien –exclamó de manera rezongona e hizo una pausa.–Estoy pensando en nosotros, ¿qué va a pasar con nosotros?

–Emm, supongo que vamos a morir en algún momento, ¿no? –respondió confundido.

–Pff, no hablo de eso –respondió divertido.–Hablo de nosotros en si (...) ¿Qué tipo de relación tenemos? 

El azabache se sorprendió ante la pregunta, pero de igual manera respondió.

–Tú…¿Qué te gustaría que fuéramos? –curioseó algo nervioso. 

El castaño se quedó en silencio por un momento y exclamó seguro.

–Quiero ser tu pareja, Levi. Yo...–hizo una pausa y habló nuevamente mientras tomaba las manos del azabache.–quiero salir contigo. Quizás vamos muy rápido y no estamos del todo seguros de lo que sentimos. Pero, quiero pasar más tiempo contigo, quiero tocarte y sentir tu calidez, quiero convertirme en alguien importante para ti.

El azabache quedó perplejo ante las palabras del castaño. ¿Cómo podía negarse? ¿Cómo podía hacerlo? ¿Cómo podía hacer eso cuando él también quería lo mismo? Ansiaba poder sentir nuevamente la calidez del castaño. Lo deseaba de todo corazón.

Pero las palabras apenas salían. Así que asintió dulcemente y rodeó la cintura del moreno con sus brazos.

–Yo también.

El azabache dijo ésto en un volumen muy bajo, mientras escondía su rostro en el pecho del castaño. Pero fue suficiente para que este lo escuchara y correspondiera el abrazo.

–Chicos, no quiero arruinar su momento pero hay que atender a los clientes –exclamó Erwin desde su oficina.

–Voy –exclamó el castaño y se separó suavemente del azabache.

–Tsk.


𝑪𝒐𝒏𝒕𝒊𝒏𝒖𝒂𝒓𝒂́

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𝑪𝒐𝒏𝒕𝒊𝒏𝒖𝒂𝒓𝒂́...✍︎

Cántame al oído ﹙𝐄𝐫𝐞𝐫𝐢﹚ ִֶָ︕Donde viven las historias. Descúbrelo ahora