Capítulo 8

602 19 0
                                    

Narra Claire:

Ya era de noche y estaba con las chicas en nuestro cuarto. Siento como un nudo por dentro que no me dejará estar tranquila si no les cuento lo que pasó hace apenas unas horas en la habitación de Mattheo. 

- Claire, ¿estás bien? Llevamos un rato notándote distraída. -Hermione me sacó de mis pensamientos.

- Oh... Hmm... Sí... Sí todo está bien chicas, solo estaba pensando en que esta semana estaré ocupada y apenas podremos estar todo el grupo juntos. -Mentí. 

Estaba claro que si les contaba que Mattheo casi me besa en su habitación se iban a poner algo histéricas ya que a ellas él no les cae muy bien y digamos que sería un mal momento que pasaría con mis amigos.

- Bueno, estábamos hablando de que en unos meses se celebrará el Torneo de los tres magos y vendrán personas de otros colegios, entre ellos de tu antigua escuela, Claire.

- Ay, sinceramente no sé si alegrarme o no. No hice muchos amigas allí, que digamos. Antes que a vosotros solo tenía a una amiga, Karolina. La extraño muchísimo.

- Claire, nos alegra mucho que seas nuestra amiga. -dijo Ginny.

- Sí, y puedes contarnos todo lo que quieras o necesites. Siempre estaremos aquí para apoyarte y ayudarte en todo lo que sea posible.

- Y en lo que sea imposible también. -dijo Ginny con una sonrisa muy sincera.

- Gracias chicas, os quiero mucho. -dije y me levanté de mi cama para abrazarlas bien fuerte.

Cuando nos acostamos cada una en su respectiva cama, cerré los ojos y traté de dormirme. Spoiler, no hubo manera. No puedo dejar de pensar en Mattheo. ¿Qué demonios me pasa? Seguro que me quiso besar porque seré una más para él, como hacen todos. Solo buscan una cosa, para la cual no estoy nada preparada, y menos después de lo que pasó con mi ex novio.

Por otro lado, me gustaría pensar que algún día llegaré a ser alguien importante para alguien, para la persona indicada, que me amarán tal y como soy. 

Decido actuar como si nada ha pasado hace unas horas. No quiero que mis amigos se den cuenta de que algo ha pasado esta tarde ni dejaré que me utilicen. He oído por los pasillos que Mattheo es un mujeriego y no quiero ser el juguetito de nadie, valgo mucho más que eso.

A decir verdad, me ha desilusionado un poco oír eso de Mattheo, puede que me haya hecho alguna ilusión que no debería con todo esto. Pero a la vez no puedo olvidar esas palabras que me dijo él sobre mis ojos y lo bonitos que eran. Fue muy tierno, debo admitirlo. Pero no quiero salir dañada.

Finalmente termino quedándome dormida de tanto pensar en el tema.

Ya por la mañana, bajamos al gran comedor todos mis amigos de Gryffindor y yo. Hemos quedado con Luna y con un tal Cedric Diggory allí.

Cuando entramos todos juntos miro de reojo a la mesa de Slytherin y allí está él, mirándome fijamente con un rostro inexpresivo. Dejo de verlo y me centro en mis amigos que están hablando con un chico de la casa de Hufflepuff, lo cual lo descifro por los colores de su túnica.

El chico me saluda y me sonríe de oreja a oreja. Parece muy simpático.

- Buenos días, me llamo Diggory, Cedric Diggory. Mucho gusto. -Se presenta y me besa la mano. Pero qué caballeroso.

- Yo soy Claire, Claire Laurent. Encantada. -Le sonrío algo tímida debido a su acto anterior.

- Bueno amigo Diggory... -soltó George.

- Será mejor que cierres la boca si no quieres que te entren moscas. -le siguió su gemelo.

- Es decir, ya sabemos que nuestra amiga es muy guapa, todo Hogwarts lo ha notado. -volvió a decir el otro gemelo Weasley.

La apuesta // Mattheo RiddleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora