La apuesta // Mattheo Riddle

Capítulo 19

Narra Claire:

Sentía una molestia en los ojos. Había mucha luz, así que los abrí lentamente sintiendo toda la claridad de los rayos del sol dándome en la cara.

Cuando conseguí abrirlos por completo pude darme cuenta de que estaba en una camilla, en la enfermería. No entendí por qué estaba allí si lo último que recuerdo es haber estado perfectamente justo antes de la prueba del torneo en la que yo era la pareja de Cedric.

No entiendo nada.

- ¿Cómo se encuentra, señorita?- escuché a mi derecha una voz que se iba acercando a paso algo apresurado.

Giré mi cabeza hacia esa dirección y vi a Madame Pomfrey con unos papeles y una pluma escribiendo lo que supuse que era un informe médico. Estaba sonriente, así que le devolví la sonrisa.

- Me duele un poco la cabeza... pero estoy bien. Disculpe, pero, ¿Qué hago aquí?

Justo cuando Poppy iba a hablar, el ruido de la puerta de la enfermería la interrumpió. De repente muchas voces se escuchaban, miro por detras de la enfermera asomándome a un lado y allí veo a mis amigos.

- ¡Claire, menos mal que estás bien! -dijo Hermione con tono de alivio mientras se acercaba a mí para darme un abrazo.

- Estábamos muy preocupados, no despertabas y pensamos que te pasaba algo grave. -Suspiró Harry mientras se ponía una mano en el pecho. Ron hizo lo mismo, así que entendí que Harry había hablado por los dos.

- Lo siento muchísimo, Claire. No pude ayudarte, no me dejaban. -Harry soltó en un tono de angustia.

- Pero... no entiendo. ¿Por qué estoy aquí? -pregunté todavía aturdida, sin entender nada.

- Estás aquí porque un imbécil te puso en peligro. -Me tensé al escuchar esa voz, esa que tanto me tranquilizaba oír y que a la vez tantas mariposas me hacía sentir dentro de mi estómago.

Mattheo se asomó a mi grupo de amigos, acababa de llegar y ni siquiera lo había sentido.

- ¿Cedric?

Nadie dijo nada, pero lo dijeron todo con la mirada. Miré a Mattheo, tenía la mandíbula tan tensa que parecía que se la iba a romper.

- Se le complicó la prueba y no pudo sacarte del agua, los profesores tuvieron que hacer un hechizo para sacarte de allí... -Respondió Ginny, mirando hacia el suelo.

- ¿Él está bien?- Pregunté preocupada.

- Por desgracia sí. -murmuró de nuevo Mattheo y todos lo miramos a la vez, pero nadie dijo nada.

Nos quedamos en silencio unos pocos segundos y Fred habló.

- ¿Como está, señora Pomfrey?

- La señorita Laurent está bien. Como el hechizo de antes de entrar al lago se deshizo, ha tragado bastante agua pero gracias a los profesores que la sacaron y con mi ayuda hemos conseguido que el pulso de la señorita vuelva a la normalidad y esté estable. Ahora necesita descansar. Para la hora de la cena ya estará con ustedes, así que ahora vayan a clases, venga.

Mis amigos obedecieron, pero antes se despidieron de mi. Hermione me dio un fuerte abrazo, Ginny uno más delicado. Harry me acarició el brazo y Ron le imitó con una sonrisa. Fred me frotó la cabeza de manera juguetona y George me agarró de la mejilla derecha con sus dedos. Luna se despidió con un abrazo delicado para no hacerme daño y, finalmente llegó el turno de Mattheo.

Se acercó sin quitar sus ojos de los míos, se inclinó para estar a mi altura y la de la camilla y me sostuvo la mano mientras que con su pulgar la acariciaba, y me dio un beso delicado en la frente. Me pareció lo más tierno que me habían hecho desde que llegué a Hogwarts.