Una chica nueva llega a Hogwarts tras un pasado difícil. Su vida está a punto de cambiar, conocerá a gente nueva, amigos que la apoyarán en todo y también conocerá a un chico.
Él es egocéntrico y egoísta. Le da lo mismo que alguien salga lastimado p...
Ya era domingo, hoy vendrían las dos escuelas de magia que nombró Dumbledore, entre ellas mi antiguo colegio. Lo que significa que volveré a ver a Karolina después de tanto tiempo, la extrañaba mucho. También significaba que el director por fin diría la razón por la que se juntarían los tres colegios aquí.
Por lo que oí a los de mi casa en la sala común, los profesores darán la bienvenida a Beauxbatons y al instituto Dumstrang al mediodía. Estoy ansiosa por ver a mi amiga de nuevo.
Con respecto a lo de Mattheo, no me ha hablado en todo el día de ayer, me ha ignorado completamente y me duele. Pensaba que sería un enfado momentáneo que le duraría unas horas y al día siguiente estaría bien conmigo, pero me equivocaba. No he dejado de darle vueltas al tema durante todo este tiempo.
Al ser domingo no había clase y tampoco me apetecía ir a Hogsmeade por la mañana porque hace mucho frío, así que me quedé toda la mañana en la sala común al calor de la chimenea mientras ojeaba el libro de Estudios Muggles. Me parecía realmente interesante ver la visión de un mago hacia las personas no mágicas.
LLegada la hora de comer, bajo al Gran Comedor yt allí me siento con mis amigos a comer. Yo a penas tenía hambre, removía seguido los cubiertos en la comida que tenía sobre el plato, haciendo tiempo.
Me giré para ver la mesa de Slytherin y verlo allí, hablando con los demás. Se le ve feliz, y eso es lo que importa. Puede que él no esté afectado como yo lo estoy, pero ya es hora de superarlo.
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- Te apuesto dos galeones a que no te atreves a comerte todo ese muslito de pollo de un bocado- dijo Fred.
-Que sean cinco. -dijo Ron muy convencido y dispuesto a hacerlo.
La verdad es que me lo paso muy bien con mis amigos y sus locuras, me hacen olvidarme de todo lo que me hace mal y me hacen pasar ratos geniales. Todos reímos al ver como Ron consigue sacar la carne del muslo del pollo de un solo bocado y tiene la boca tan llena que apenas se le puede cerrar y mucho menos entender cuando intentaba hablar.
De repente, el director pidió silencio. Entiendo que hará la presentación de los otros dos colegios. Sigo sin ser consciente de que volveré a ver a Karolina después de tanto tiempo.
- Queridos alumnos y alumnas, me complace presentarles a las alumnas de Beauxbatons y a su directora Madam Olympe Maxime. En ese momento entraron las chicas haciendo un saludo un tanto peculiar. Todos los chicos de aquí estaban embobados mirándolas. Me alegro de ver a Madam Olympe, pero no mucho de ver a mis antiguas compañeras. Y ahí la vi, en medio de ellas. Mi mejor amiga Karolina. La veía más guapa de lo normal, estaba más delgada y se le marcaban más los pechos y las curvas en general.
Ella y Camille eran las que más llamaban la atención de los chicos.
Camille era una persona un tanto difícil, mi historia con ella se resume en malos tratos en la escuela por parte de ella. Me lanzaba hechizos para caerme al suelo y reírse de mí y mil cosas más que prefiero no recordar.
