Hija del Sol || Bnha

36. Dónde Hay Humo, Hay Fuego...

Holaaaaaa, linduras✌️✨

Esta semana... Por voto y comentario, capítulo esta dedicado a TW_Jackie!

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36. Dónde Hay Humo, Hay Fuego...

Eros estaba allí.

Preparó la segunda flecha, listo para dispararla en el único momento donde podía hacerlo sin ser visto.

El don que su madre le había dado a su protegida no era la gran cosa, pero sin dudas era una gran molestia para el... El don de reconocer a un dios aún sí este se escondía no era una buena mezcla con una semidiosa que huía del amor.

Pero el había trabajado duró en elegir la primera flecha, no iba a dejar que eso arruinará su trabajo.

Disparó la flecha.

Está vez... Las cosas iban a salir bien.

. . .

Helisto se despertó de golpe.

Sus ojos bien abiertos escanearon la habitación de las chicas con precaución, esperando que una criatura saltara a intentar cortar su garganta en pedazos en cualquier momento.

Ella esperó el ataque... Esperó por varios segundos pero, afortunadamente, ese ataque jamás llegó.

Al asegurar que estaba a salvó, la semidiosa relajo sus tensos músculos y dejó ir el aire que había retenido.

Su mirada esmeralda volvió a a caer sobre la única extrañeza que había localizado en la habitación: una cama vacía.

Lexi no estaba allí.

Asumió que la chica solamente había ido al baño, así que no le tomó mucha importancia y se volvió a recostar en su cama para intentar volver a dormir.

Pero a medida que pasaban los minutos, la inquietud creció en ella.

Lexi no apareció.

Al darse cuenta de que probablemente algo andaba mal, se levantó y se puso su calzado, sin molestarse en cambiarse ni en ponerse una chaqueta sobre su pijama.

. . .

Sintiendo la brisa nocturna y la luz de luna acariciar su piel, Lexi cerró sus ojos y disfrutó el momento de paz.

Pisadas suaves se acercaron a ella.

"En serio te escapaste sólo para congelarte aquí afuera?" La peliblanca no necesito abrir los ojos para saber a quien le pertenecia aquella voz pero aún así lo hizo, solamente para devolverle la mirada a su amiga.
Helisto se sentó al lado de Lexi, apoyando su espalda contra la pared, y observando la expresión en el rostro de su amiga y como abrazaba sus piernas contra su pecho, "...Sucede algo?"

Lexi parpadeó un par de veces ante la repentina pregunta, antes de responder con fingida tranquilidad, "Estoy bien."

Helisto negó suavemente, "No tienes que decirme que pasá... Pero, por favor, no me mientas."

Lexi giró su cabeza en dirección contraria a la de su amiga, incapaz de mirarla a los ojos.
Y aún sin voltear, preguntó con un suave susurro: "...Soy tan fácil de leer?"

"Siempre te sientas así cuando algo te afecta, además..." Hizo una breve pausa, "Tus ojos pueden llegar a ser muy expresivos."

Lexi finalmente se giró a mirarla, con una ceja alzada.