40.- Nice to C U

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Dos semanas desde la crisis de pánico han logrado que mi novio comience a asemejarse a un zombie

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Dos semanas desde la crisis de pánico han logrado que mi novio comience a asemejarse a un zombie. Todos estamos preocupados; el cansancio que lo abate es tan evidente que incluso alguien que no lo conoce sería capaz de identificar que se ve enfermo.

Muy enfermo.

TaeMin se ha estado moviendo entre dos extremos: somnoliento por las pastillas y las doce horas de sueño, o somnoliento por no dormir en lo absoluto. Usualmente con lo primero se ve un poco más sano. Dice que si la cantidad de pastillas es lo suficientemente alta, puede dormir sin soñar, lo cual le acomoda, exceptuando el hecho de que se siente un poco más lento y no coordina muy bien nada de lo que hace. Por el contrario, si no se las toma, prefiere no dormir. TaeSun y yo sabemos perfectamente que esto tiene todo que ver con algún sueño, posiblemente premonitorio, que lo está aquejando. Tiene que ser algo lo suficientemente fuerte, horrendo y escabroso como para haber llegado a esto.

Hay un único problema.

No sabemos todavía qué sueño es.

Durante las tardes en las que TaeMin descansa, hemos intentado analizar por nuestra cuenta los sueños que alcanzamos a leer en su diario, tras su primera crisis de pánico, para así desentramar toda esta mala broma. Sin embargo, ni TaeSun ni yo manejamos información lo suficientemente amplia como para conjeturar nada. Sabemos que tener el diario en nuestras manos ahora sería de mucha más ayuda, pero aquello implicaría volver a hurgar en las pertenencias, cabeza, y miedos de TaeMin. Romperíamos la confianza que nos tiene, y las posibilidades de que nos cuente cualquier cosa por voluntad propia serían completamente nulas desde ahí en adelante.

O al menos así habíamos pensado hasta ahora.

Ayer todo estaba relativamente normal. TaeMin y yo regresamos más o menos a las dos de la universidad. Viajamos en su moto, a pesar de que TaeMin estuviese un poco empastillado, pero corrimos la suerte de llegar sanos y salvos a casa. Dado que él venía con un poco de sueño, partió a tomar una siesta y me pidió que lo despertara a las cinco. Por supuesto que accedí. Acordé despertarlo a esa hora y me puse a estudiar.

Todo apuntaba a que TaeMin había tomado sus pastillas usuales para dormir, incluso aunque yo le dije que no abusara de ellas, que podían hacerle mal. Pero bueno, TaeMin es terco...

... y tomó unas cuantas pastillas de más.

Jamás había sentido tanto miedo como cuando lo fui a despertar y vi que no me respondía. Estaba tan profundamente dormido que casi no lo sentía respirar. No se movía. No respondía a mis sacudidas ni gritos. Logré identificar que tenía pulsomientras coordinaba llamadas con una ambulancia, luego con TaeSun y los padres de TaeMin, y finalmente con SunMi y KiBum.

Llevamos a TaeMin al hospital y tuvimos que explicar más de cinco veces lo que había estado sucediendo con él en el último tiempo, y que no había en realidad posibilidad de que eso fuera un intento de suicidio. Eventualmente me lo cuestioné mientras escuchaba a los padres de TaeMin hablarle al psiquiatra de turno, e incluso me dio la sensación de que TaeSun estaba dudando también, pero ninguno de nosotros mencionó algo al respecto.

〈 La Habitación Blanca 〉Donde viven las historias. Descúbrelo ahora