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—¿Y eso? —Sonríe mientras me sigue teniendo a una corta distancia. No sabía qué responder y estaba un tanto nervioso.
—Ten tu vaso de agua. —Seguía repitiendo. Entonces lo tomó aún sin alejarse de mí, volvió a dejar el vaso en la mesa detrás de mí, posó su mano en una de mis mejillas acariciándola y volvió a acercarse a mí, besándome una vez más, está vez con más ritmo, con más pasión, con más ganas de robarme el aire.

Y otra vez el tiempo desapareció, aunque luego de separarnos parecía un tomate y no podía mirarlo a los ojos, sentía mariposas en el estómago, no, no eran náuseas, lo sabía, entonces Minho siempre tomaba mi rostro y me hacía verlo a la cara y apreciar si bella sonrisa que también me hacía sonreír a mí.
—Me alegra volver a tenerte así, tan cerca de mí. —Me dice aún con una mano en mi cintura.
—Gracias... Por aclarar todo. —Fue lo único que pude decir, porque realmente estaba agradecido, Minho jamás podría engañarme, ahora lo sabía, y aún no puedo decir que todavía me ama, pero yo lo hago, tal vez no pueda volver a decirlo tan pronto luego de reencontrarnos, pero lo hacía, cómo a nadie en el mundo, sólo necesitamos tiempo, para volver a ser lo que algún día fuimos.
Y parecía que Minho había escuchado mis pensamientos.
—Te dije que esperaría el tiempo que fuera necesario, incluso si el reloj en tu pared deja de correr y el tiempo parece parar, estaré aquí esperando pacientemente para que superemos juntos todo lo que ha pasado.

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Habían pasado tres meses desde aquel día, Minho nunca insistió en ser algo más que amigos luego de aquel beso, aunque se seguían repitiendo de vez en cuando.
Ahora pasábamos la mayor parte del tiempo juntos, y eso me hacía sentir menos solo en casa cuando mi mamá tenía turno nocturno, y aunque Minho no me presionara, sabía que él también quería que algo más entre nosotros sucediera.

—¿Entonces se lo dirás hoy? —Pregunta Seungmin teniendo a un Changbin abrazado a sus cintura.
—Pues eso parece. —Contesté con una sonrisa.
—Ay, al fin vas a tener tu romance adolescente. —Habla Hyunjin con cierto tono de burla, por lo que todos reímos. Es entonces que llega Minho del baño y toma asiento a mi lado.

—Hey, estaba pensando en ir a la cafetería después de clases. —Toma mi mano y la entrelaza con la suya.
—Claro, el cheesecake de ahí es delicioso. —Dije sonriendo.
—Bien, entonces paso por ti a tu última clase. —Terminó el almuerzo y se fue junto con Changbin no sin antes dejar un beso en mi frente.
—¿Así fueron siempre? —Me mira Seungmin.
—¿Tienes algún problema, Seungmin-ah? —Hyunjin y yo reímos mientras mi amigo simplemente alzaba los hombros.
—Parece que Minho te quiere mucho, es increíble el tiempo que estuvieron separados. —Habla Hyunjin al mismo tiempo que nos encaminamos a nuestro salón de clases.
—Lo sé, aunque quise olvidar todo, no se puede de un momento a otro, y si bien nunca hablé de él, tampoco lo había apartado de mi mente. —Decía mientras recordaba lo difícil que fue ir superando lo que había pasado.
—Parece que al final valió la pena, ustedes se ven bien juntos. —Esta vez es Seungmin el que se dirige hacia mí.
—Y no solamente yo. —Le sonreí, los tres sabíamos que se trataba de Changbin. —No me imagino qué hubiera sucedido si Minho no regresa y yo me encontrara "enamorado" de Changbin, siendo que desde un principio le gustaste tú. —Enfaticé las comillas en la palabra, pues realmente nunca me enamoré, simplemente me atraía un poco.
—Ni me lo recuerdes, me sentiría el peor amigos, porque siempre fue tan lindo conmigo. —Respondió Seungmin y los tres reímos antes de que iniciara la clase.


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—Hey. —Escucho a Minho, se encuentra frente a la puerta de mi salón de clases. Me despido de mis amigos y llego hasta él.
—Hola Honnie. —Digo y me paro de puntillas para dejar un beso en su mejilla a lo que él me sonríe y luego me toma de la cintura con una mano y con la otra toma mis mejillas para después dejar un casto beso en mis labios, lo único que puedo hacer es sonrojarme.
—¿Qué tal tus clases, Hannie? —Pregunta tomándome de la mano y saliendo de la escuela.
—Aburridas. —Digo sin importancia, estaba más nervioso por lo que estaba por decirle acerca de nuestra relación.

Llegamos a la ya conocida cafetería y ordenamos lo de siempre, nuestra charla era de cosas triviales, pero siempre con esas miradas que solíamos darnos antes. Ahora me encontraba aún más nervioso de lo que pensara Minho de querer regresar, ¿qué pasaría si quiere más tiempo? Yo también estaría dispuesto a esperar a que esté listo, pero no sabría cómo reaccionaría en el momento. Solo necesitaba relajarme, todo saldría bien.

Habíamos terminado nuestra comida unos cinco minutos atrás y estaba un tanto callado.
—¿Estás bien, Hannie? —Lo veo mirándome con su mejilla recargada en su mano. —Desde que salimos de la escuela estás un poco raro, ¿ocurrió algo en clases? —Se escucha preocupado.
—Todo está bien, no te preocupes Honnie, tengo un poco de sueño, me dormí tarde porque estaba terminando un proyecto, solamente es eso. —Dije para calmarlo un poco, aunque tampoco era mentira, había dormido tal vez unas tres horas por ese trabajo.
—¿Tienes algo que hacer este fin de semana? Estaba pensando en que podríamos ir a ver una película al cine. —Entrelaza nuestros dedos como ya es costumbre.
—No, estoy libre. —Digo sonriendo.
—Bien entonces paso por ti a medio día.

—Honnie, yo... —Había hablado, era ahora o nunca. —Tengo algo que decirte, más bien algo que preguntarte, tal vez es algo apresurado, incluso lo planeé hace unas horas mientras estaba en clase. Es sólo que, ha pasado un tiempo, y no hablo solamente de nuestros besos ahora, es todo este tiempo que me alejé y desaparecí de tu vida, quería borrar todo recuerdo de ti en mi vida, pero era imposible, y lo fue aún más cuando regresaste a mis días, quería olvidar incluso tu existencia, pero no pude, y cada día, con cada acción, fuiste abriendo esa herida, o más bien la fuiste sanando, y entonces nos encontramos aquí, comiendo mi postre favorito, como solíamos hacerlo, tomando un café americano helado, que parece que es nuestra bebida, siempre lo fue, y solamente quería preguntarte... Si quieres que lo volvamos a intentar. Minho, ¿quieres ser mi novio?... Otra vez. —Dije lo último riendo un poco, no sabía si era por los nervios, todo lo había dicho rápido, esperaba que Minho me haya entendido.

No había recibido respuesta alguna y empezaba a creer que Minho aún no estaba listo para comenzar una relación, pero todas mis dudas e inquietudes se esfumaron cuando tomó mi rostro y me acercó a él para posar sus labios sobre los míos iniciando un beso lento y tranquilo, no sabía cuánto tiempo había durado, pero sabía que los minutos iban pasando lentamente, dejándome saborear su boca y recorrer cada rincón de ésta con mi lengua.
—Jisung, no sabes cuánto había esperado este momento, me alegra mucho que hayas tomado la iniciativa porque definitivamente yo no sabía cómo preguntarte lo mismo. —Había una sonrisa en ambos, era tan grande que los músculos de mi cara dolían, pero se sentía bien. —Y sí, sí quiero ser tu novio... Otra vez. —Dijo imitándome en eso último, entonces volvimos a unir nuestros labios.






FIN



Me tardé mil años en terminar esta historia pero al fin está completada, de verdad que tuve un bloqueo todo este tiempo pero aquí estamos sacando el último capítulo

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Me tardé mil años en terminar esta historia pero al fin está completada, de verdad que tuve un bloqueo todo este tiempo pero aquí estamos sacando el último capítulo.
Tengo algunas otras historias en mente, les prometo que estarán mejor, sólo que aún no sé cuándo ir escribiendo porque en una semana regreso a clases y la universidad me va a matar, así que ahí estaré viendo cuando tenga algún rato libre.

Muchas gracias a quienes leyeron esta historia, espero que les haya gustado aunque sea un poquito, les tqm.
~TheQuinnQuinn.🍓

Snap Out Of It / MinsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora