𝗖𝗼𝗻𝘁𝗿𝗮 𝗹𝗮𝘀 𝗿𝗲𝗴𝗹𝗮𝘀 / 𝗘𝗺𝗶𝗹𝗶𝗼 𝗟𝗮𝗿𝗮

Capitulo 4.

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Finalmente estaba de vacaciones. Llevaba semanas esperando a que esté semestre se terminará. El día de hoy solamente tenía que ir a recoger mi boleta de calificaciones final para poder entregársela a mis papás.
Iba de camino hacia Control Escolar donde había una larga fila de estudiantes esperando su turno. Mi mirada se encontró con Karla quien desvío su mirada y siguió caminando molesta.
Entendía su molestia, yo le había mentido y ocultado lo de Emilio. Traté de llamarle, enviarle mensajes pero en ninguna tuve éxito; incluso fuí a buscarla a su casa pero su papá me decía que había salido o estaba dormida.

Si me dolía estar en esta situación con mi mejor amiga. Estuve a punto de reclamarle a Emilio y culparlo por esto pero no sería justo hacerlo, además no puedo estar culpándolo por algo que yo decidí ocultarle a Karla.

Una vez que recibí mi boleta, esperé a que Karla saliera de la oficina pero parece que hasta acelera el paso cuando me ve. Esta vez no me quedo estática y voy tras ella.
Se siente muy extraño estar así.

— Karla, Karla. — la llamaba pero se hacía la que no escuchaba — Karla, te estoy hablando. — se detuvo — ¿Podemos hablar, por favor?.

— No, yo no habló con mentirosas y malas amigas. — respondió molesta.

— Quiero explicarte que pasó. Se que estuve mal en ocultártelo y te ofrezco una disculpa por eso. Déjame contarte cómo estuvieron las cosas.

— Bien.

Sonreí victoriosa. Nos sentamos en una mesita de la explanada de la universidad para tener un poco más de "privacidad".
Comencé a contarle todo lo que había ocurrido en la fiesta cuando salí al balcón y me lo encontré hasta el día que fuimos a comprar la dichosa playera del club.

Karla me veía atónita, tratando de entender lo que le estaba diciendo. Era mi oportunidad de que mi mejor amiga confiará de nuevo en mí, así que no podía ocultarle ni un solo detalle.

¿Me preocupaba su reacción? Definitivamente si.

— Espera, ponte pausa. — me interrumpió — Déjame ver si entendí: llevas estás dos semanas haciéndote pasar por la novia de Emilio Lara, que casualmente es futbolista de mi equipo favorito, solo para evitarle un escándalo.

— Si, algo así.

Soltó un chillido de emoción. — Es como una película de romance adolescente. — expresó — Eres afortunada, te lo digo en serio. ¿Sabes cuántas veces he estado deseando ser novia de un futbolista? ¡Miles!.

— Karla no me siento afortunada. Este par de semanas han sido las más estresantes, créeme no ha sido tan divertido. — la contradije — Aparte le estado mintiendo a mi hermano.

— ¿Aarón no sabe?.

— Claro que no, si se entera es capaz de ir a buscar a Emilio y no se que hacerle. — contesté — Y ahí si va a tener el escándalo que tanto estaba evitando.

— No puedo creer que me hayas tenido fuera de esto. Cuando los ví juntos en el centro comercial me dolió que no hayas confiado en mi.