Una Noticia Inesperada

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Casa de los Von Kloff, Múnich, Alemania-16 de Septiembre de 1914

Familia Von Kloff nos enteramos que su hijo es un doctor extraordinario, vimos sus calificaciones en la facultad de medicina y son increíbles, es creativo y sabe como curar casi cualquier herida o quemadura, es por eso que el Káiser lo ha seleccionado para unirse al ejercito y pelear por la madre patria-les hablaba un Oficial Alemán de reclutamiento a los padres del joven Guillermo, su madre obviamente atónita por la noticia rompió en llanto, pero leve, como solo las madres pueden al recibir tal noticia, su hijo ira a la guerra. Su padre en viceversa, estaba emocionado y alegre por su hijo, pues tendrá una oportunidad que el mismo tuvo de joven pues el combatió en la Guerra Franco-Prusiana de 1871 con tan solo 18 años.
Al retirarse el Oficial, los padres esperaban la llegada de su primogénito para darle la gran noticia.
Para inculcar al lector en la situación que los personajes están pasando, en 1914 estallo la Gran Guerra, donde Alemania y su aliado el Imperio Austro-Húngaro decidieron unir sus fuerzas por diferentes motivos, Austro-Hungría quería tomar venganza de Serbia por asesinar al heredero al trono, el Archiduque Francisco Fernando, mientras que Alemania solo buscaba destruir de una vez por todas a su rival declarado desde siempre, Francia. Ambas potencias estaban altamente equipadas con soldados, armamento y una moral por las nubes.
Más tarde ese mismo día, llega el joven Von Kloff del Hospital Bismarck, lugar donde trabaja. Al pasar la puerta observa a su madre sollozando con un pañuelo entre la boca y la mano y a su padre fumando pipa observando la ventana desde su sillón.
Que sucede, ¿todo está bien?-pregunta desconcertado el muchacho.
Su madre lo recibe triste y alegre a la vez, su padre emocionado e impaciente por contarle la noticia.
Excelente hijo, hoy nos visito un Oficial del ejército, has sido reclutado para servir por tu patria como doctor en el frente, felicitaciones-le dice su padre con un gran abrazo. Su madre solo lo observa desde su sillón conteniendo el llanto.
El joven muchacho queda extremadamente shockeado por la noticia, no sabe qué hacer o decir, será enviado a la guerra, la gloria para algunos, el infierno para otros pero de igual manera nos afecta a todos.
He, es increíble, podre serle útil a la patria, como tu papa-dijo emocionado Guillermo, un nacionalista ferviente, pero su ética profesional lo obliga a abstenerse de los asuntos políticos ya que él tiene la obligación de ayudar a cualquier persona sin importar sus ideas o si está en contra o a favor del régimen.
Luego de tanta charla, su padre le entrega la carta que le dejo el Oficial y dice así:
"Joven Guillermo Von Kloff, usted ha sido reclutado por el Ejército Alemán que combatirá para defender los ideales de libertad, honor y bienestar que rigen a la madre patria. Su servicio es extremadamente agradecido por el Káiser, al igual que el sacrificio que hará usted y su familia.
Usted debe presentarse el día 17 de Septiembre de 1914, en el campo de entrenamiento militar en Múnich, un autobús lo recogerá a las 9:00 am. Se le solicita documentación, allí se le hará una revisión médica. Sin otro motivo, me despido Atte. Oficial de Reclutamiento Otto Mansi."
Esa misma noche, Guillermo y su hermano Alger antes de acostarse a dormir, tuvieron una conversación interesante. Guillermo tiene 21 años y Alger 17 años.
Qué suerte que tienes, podrás marchar en las filas alemanas, yo todavía debo esperar otro año-decía un tanto desanimado Alger.
Tranquilo, como van las cosas esta guerra está lejos de terminarse, tendrás tu oportunidad, servirás y juntos seremos héroes en la historia de nuestra nación, tendremos Cruces de Hierro de primera clase y demás condecoraciones, será fabuloso- le decía Guillermo acostado mirando el techo con sueños de grandeza.
Bueno, quiero decirte que estes bien y que puedas pasarla lo mejor posible, no me gusta eso de las despedidas emotivas, así que te saludo aquí y ahora, entre hermanos-despedía a su hermano demasiado temprano pero con el corazón, ellos jamás se separaron, eso cambiaria mañana.
Gracias Alger, espero que podramos estar en la misma unidad, cuando pueda vendré a visitarlos-consolaba Guillermo a su hermano menor.

Apocalipsis: El Comienzo del FinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora