Dante se quedó toda la noche a su lado, canceló la cita con su padre y la pasó para otro día.
Su padres no comentaron nada al respecto tuvieron una cena tranquila y se quedaron en su habitación y algo que realmente era raro que sus padres estuvieran de acuerdo con eso.
En la mañana me levante con dolor de estómago y quería pedirle a Dante que por favor se fuera. No lo hice porque no quería que esa sensación de estar en casa se fuera, de estar protegida, a gusto y sin preocupaciones.
Me había despertado bastantes veces en la noche y es que Dante me tenía apretujada como si fuera un oso de peluche era la primera vez que dormíamos tan juntos. Era la sensación más placentera del mundo pero yo estaba preocupada por la novia que dijo que tiene.
Dante tuvo repetitivas erecciones a mi lado que me hacían sentir incómoda, sus roces, sus caricias tendían a enloquecer lo que soy y quien realmente soy. Nunca me comporte de esta manera con nadie y ni siquiera con mi ex, Dante tenía un poder sobrenatural sobre mí.
—Buenos días – Dante traía en sus manos una charola con café y medialunas de las que a ella le gustaban.
—No me siento bien, no tengo hambre pero gracias— dije negando.
—Cuando comas te sentirás mejor, te lo aseguro— puso la bandeja en medio de la cama y se volvió a recostar a su lado.
— Puedes irte a lo mejor tu novia espera que desayunes con ella que estés con ella, tal vez, no vaya al trabajo hoy...me siento fatal y es la excusa perfecta para decirle a tu familia que ya no estamos juntos- dije tomando sin ganas el café entre mis manos.
-¿Eso quieres?- preguntó y asentí.
-Sí- contestó con toda seguridad – es lo que quiero, señor Newman- él asintió amable y sin discutir tomaron el desayuno y al terminar él se marchó sin decir nada.
Quedé mirando por la ventana como se iba en su auto ¿porque torturarnos? ¿Porque simplemente no podía resistirme a sus besos y caricias? Decir no, solamente un no y todo terminaría pero mi cuerpo me delataba quería más.
-¡Bella! Llegaron las invitaciones de la boda de Juan y Martín— Bajé las escaleras un poco más animada.
Su madre estaba sentada en el sillón pequeño de Blas con una expresión de felicidad, y corrió a tomar esa invitación en sus manos.
La portada de la tarjeta era dos trajes uno en blanco y otro en negro con un gran "Mr & Mrs" detrás y en negro delante.
Por dentro tenía los colores de la bandera LGBT. Y ''Para la querida Familia Ferreyra" se leía en la primera línea.
Juan & Martín, los invitamos el próximo viernes 29 de julio a nuestra boda en Palermo.
La cena tendrá lugar en el Hotel St. Regis a las 21:00 horas.
Nos gustaría compartir esto con nuestra familia y por eso estás invitado, Gracias y rogamos la confirmación.
Un caluroso beso.
Juan y Martín.
-¡Es preciosa, tengo que llamar a Juan!- tome mi teléfono y marqué su número.
Más tarde ese día...
Cuando por fin estaba oscureciendo mi celular comenzó a sonar y era un mensaje de Rebeca, la hermana de Dante.
Ella quería verme ya que al estar enferma no pudimos, tenía muchas ganas encontrarnos así que me citó en un Pub y acepté, no podía quedarle mal, no a Rebeca.
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Pasión Irrefrenable (Borrador) [#1 Mi Jefe ♥]
RomancePrimera parte de la saga Mi jefe ♥ [#1] Pasión Irrefrenable. [#2] Save Me. [#3] Falso prometido (pronto). [#4] Ardiendo. [#5] Las fantasías de Alma. La pasión irrefrenable que sienten no se puede explicar, ella no lo quiere y Dante se siente atraído...