Pasión Irrefrenable (Borrador) [#1 Mi Jefe ♥]

Capítulo 21 ( Final)

En la mañana desayunamos café con tostadas mientras escuchábamos música, tal vez podría acostumbrarme a esta vida y a Dante. Sus ojos verdes me tienen tan enganchada, enamorada y excitada. Me sentía muy feliz con Dante, luego fuimos al trabajo y estuvimos hasta tarde.

Volvimos en uno de sus autos y compramos algo de comida en el camino.

— Muero de hambre— dije exagerando.

— Yo igual— sonrío— Espero te gusten las hamburguesas.

—Sí, me encantan— reí.

Llegamos al departamento y Dante comenzó a comportarse muy extraño.

Comimos casi en silencio mientras él leía su correo muy nervioso, hasta que se ahogó con la hamburguesa y fue al baño.

— ¿Dante estás bien?— pregunté afuera del baño.

—Sí, Bella ya voy— contestó todavía un poco ahogado.

Terminé mi hamburguesa sola en el sofá y luego prendí la televisión, Dante seguía sin salir del baño. Me senté en dirección al baño por si salía descompuesto o algo.

Salió con una seriedad de muerte, se sentó en la silla del comedor y me miró.

— Isabella quiero hablar contigo sobre algo— dijo muy nervioso.

— Sí— contesté y me levanté del sofá para sentarme en la mesa frente a él.

— ¿Recuerdas que quería poner una editorial como esta en Italia? ¿Y que solo faltaban los papeles para poder confirmar todo?— me preguntó preocupado.

— Sí, Dante. Lo recuerdo de la cena que tuvimos con tu padre— contesté muy pensativa.

—Los papeles llegaron y me confirmaron un vuelo en una semana, debo ir a vivir a Italia unos meses para ver que todo marche bien y yo sé que no tenemos mucho tiempo de estar en pareja y que es una propuesta difícil y tal vez no aceptes porque somos muy unidos a tu familia pero no puedo vivir sin vos y no quiero vivir sin vos ¿Quieres ir vivir conmigo a Italia? — dijo muy nervioso.

— Dante ¿me juras que serán unos meses? Me encantaría vivir contigo, donde sea— me levanté y le di un fuerte abrazo.

Sus labios buscaron con ímpetu los míos y se fundieron en un beso apasionado. Me quitó la blusa y comenzó a besar mis pechos, me sentía totalmente acalorada, me preguntaba cómo había vivido sin sus besos y caricias tanto tiempo. Sin su presencia tan angelical, tan protectora y cariñosa.

Si es que me preguntaban al principio, jamás estaría con alguien como Dante "un seductor nato" que estuvo con mi prima en la casa de mi abuela y ahora es tan distinto, es un buen hombre con buenos valores.

La felicidad no siempre viene como la deseamos a veces vienen en modo torbellino, arrasa con todo nuestro ser e inseguridades. El amor es un poco eso que arrasen con vos, con tu cuerpo y pensamientos. Alguien que aparece para sanar heridas o que te da las herramientas para sanar. Quien crece contigo también sanando su propio pasado, no quería enamorarme porque sabía cómo terminaban las historias de amor o por lo menos las mías, yo rota en dos y llorando lágrimas de sangre. Dante me hizo darme cuenta que el amor no es destrucción sino construcción y sobre todo con una inmensa paciencia e inmenso cariño.

Él me hizo sentir la pasión a primera vista, sentir como te desnudan con la mirada y que sientan deseo cuando hubo alguien que antes sintió asco.

Una pasión irrefrenable para siempre.