Michael había pasado por mí a eso de las ocho de la noche. Él estaba un poco preocupado, desde que había hablado con Mimi—aquella vez de la carne—tenía esa conducta. Era raro.
Subimos a su auto y venía conduciendo preocupado.—Oye, Paul.—me llamó.
—¿Mhmm?
—¿Tú realmente quieres mucho a John?—Me espanto esa pregunta, ¿acaso el motivo de su preocupación era mi Johnny?
—Sí, claro, ¿por qué la pregunta, Mike?—dije un poco extrañado.
—Uhh, por nada, por nada.—repitió muy inseguro.
—Oye, SuperVegano, ¿estás bien?—me fije en su cara—Tienes ojeras, Mike. ¿Qué te está pasando? ¿Tiene que ver con tu novia, Rowena?—traté de bromear, pero él no apartaba la mirada del camino. Algo raro, siempre que hacía eso era porque tenía miedo, ansias o algo lo estaba atormentando.
Recuerdo que cuando casi lo despiden de su trabajo, o, Rowena casi lo deja, él condujo de esa manera.—¿R-Rowena? No... sólo no he dormido bien. Es todo, no preguntes más.—¿Qué le estaba pasando? O sea, Mike era súper molesto pero no era tan grosero.
—Supongo.—fue lo último que hablamos. Lo que me pareció más raro, aún. O sea, Michael siempre me hablaba de cosas en el camino a casa pero esta vez no lo hizo. Sentía que tenía que ver algo con Mimi, John y sus frases de la vida.
Al llegar a casa, se encerró en su habitación. No salió ni para cenar conmigo. Había algo en mi pobre hermano que realmente me estaba preocupando. Quería mucho a Mike, entonces, que le pase algo a él sería como si a mi me pasara algo también.
Quise no pensar en eso, pero me pareció imposible. No quería que algo le pasara a Mike, de veras que no.
Opte por irme a la cama, mañana sería un nuevo día donde vería a Johnny Boy y tal vez sabría un poquito más de lo que le pasaba a Michael.
[🌱]
¿Saben qué es peor que la muerte? Clase de educación física a primera hora en un miércoles.
Dios, qué horror. Aunque, la suerte estaba nuevamente de mi lado pues compartía esa clase con el dueño de mi corazón, John.
No podía esperar a verlo correr en la cancha conmigo mientras me sonreía y decía que lo estaba haciendo bien.¡Agh! Ya quería llegar a la clase pero me daba flojera caminar hasta las canchas donde tomábamos educación física.
Cuando llegue vi todo el alumnado, que estaba hablando mientras se morían de frío.
Claro, pues, ¿a quién demonios se le ocurría una clase en plena mañana?Vi que en las gradas estaba sentado mi chico, con una chamarra grande y pantalones. Algo que se me hizo raro porque según la escuela cuando tengamos esas clases debíamos de ir de una vestimenta especial. Pues por algo todos se estaban muriendo de frío.
Al acercarme, vi que Johnny me había visto, con su mano me saludó. Me acerque hasta sentarme con él. Estaba tan lindo y parecía tan pachoncito.
—¡Bunny!—me dijo para referirse a mi. Algo que sinceramente, me extraño.
—¿Cómo?
—Oh, perdón Paulie. Es que ayer hablé con Mimi y dijimos que parecías un conejito de lo bonito que te veías—río—, pero si no te gusta no te vuelvo a decir así.
—Eso de hecho es muy lindo, Johnny Boy—le dije muy sonriente—. Por cierto, cariño, ¿y tu ropa de educación física?—encarné una ceja.
John pareció apenarse pues cambió repentinamente su cara.
—Ohh, eso... pues yo no tomo educación física.—Tú a mi me estás jodiendo, ¿cómo que no toma la clase? ¿CÓMO DE QUE NO?
—Oh, Johnny, pero ¿por qué?—John pareció incomodarse ante mi pregunta, parecía que no me quería decir.
Empezaba a sentir que había algo entre John, Mike y Mimi pero que ninguno de ellos me quería decir. No sabía exactamente si por miedo a mi reacción o porque realmente no querían hacerlo.
—No soportó hacer mucho esfuerzo físico. Mi cuerpo se desploma, no tengo rendimiento.—confesó después de un buen silencio.
—Johnny, eso de hecho es increíble. Si por mi fuera, me encantaría, así no asistiría a ninguna clase de educación física por las mañanas, es una excelente excusa ahora que lo pienso.
John pareció incomodarse y ofenderse ante mi respuesta. Puesto que rodó los ojos y vio hacia otro lado cuando dije eso. Eso me rompió el corazón.
—Es muy fácil para ti decirlo, tú no quisieras entrar a un equipo de deportes. Hablas como si en realidad fuera un regalo, cuando es doloroso.—Y después entendí lo que estaba pasando. Lo que estaba pasando era que: yo, Paul, era un idiota. ¿Cómo se me ocurre decirle eso cuando ya sabía su deseo casi imposible? Aunque, en su caso, sí era imposible. Tal vez de ese límite estaba hablando ayer.
—Bueno... el dolor a veces es bueno, ¿no lo crees, Johnny Boy?—dije captando su atención.
—¿Por qué dices eso? El dolor es malo y feo.—dijo molesto.
—Pues ponte a pensar, ¿qué sería la vida sin el dolor y sin metas inalcanzables? Sería aburrido. Piénsalo así: imagina que tú vida es un libro, ¿sabes cuál es el clímax?—negó—El dolor es el clímax de tu vida, John.
John lo pensó por mucho y me sonrió, significando que le había gustado mi idea. Era bueno que él pensara así como yo.
Aunque odiaría el dolor, debía admitir que sin él mi vida se basaría en una comedia dramática o algo así.—Lo horrible es cuando ni siquiera desde que era pequeño pude hacer educación física. Cuando estaba en básico, me pusieron a correr y me desmayé. Cada que hago mucho ejercicio, pasa eso. No lo toletero para nada.
Lo que John me contaba era malo, John tenía deseos de hacer deporte pero su extraña condición no se lo permitía. Todavía sentía que entre Michael y John me ocultaban algo pero qué raros los últimos síntomas. ¿Qué era lo que Johnny Boy tenía?
Al final, la voz de John me sacó de mis pensamientos, me preguntó algo.—Bunny, ¿crees que debería adelgazar?—dijo mirando a los chicos que iban calentando a la espera del profesor.
—¿Por qué lo preguntas? ¿Pasa algo malo con tu cuerpo?—asintió—¿Qué tiene?
—Es que ayer, Mimi vio que tenía rollitos en la panza y les habló a sus amigas por teléfono de eso, escuché que les dijo que estaba gordo.
—Pero, Johnny, no creo que debas cambiar algo de tu cuerpo, me pareces muy lindo con esos rollitos.—al decir esto, sus mejillas se pintaron de un rojo intenso. Sabía que no era por el frío—Aunque, si tú quieres cambiar tu cuerpo para tu comodidad, no soy quien para prohibirlo, cariño.
notaaa: ustedes q creían, no soy como esas escritoras q le dicen "la gorda lennon" a john
le tengo mucho respeto y después d saber todo lo qué pasó con su anorexia era obvio que necesitaba hacer un cap donde le dijéramos q era lindo así como estaba >:((
no soy gordofobica, simplemente siento que no te debes decir así si no lo eres, pq d vdd q john no lo esss
dejen de decirle gorda lennon o los voy a patear
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-here today ➸ mclennon
Fanfiction❛❛-No sé si la estés escuchando, pero tengo una canción que compuse para ti-tomé mi guitarra- . ¿Qué harías si te dijera que te amo un montón y estoy agradecido por tu llegada?❞ 🌱school au ! 🌱 fluff & angst ⚠️ este fic contiene posibles com...