Capítulo 23.

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—Mierda, mierda, mierda —repetía en voz baja todo el rato. 

Llevábamos en la misma posición que antes unos minutos, y la expresión de Violet era exactamente la misma. Es decir, seria, sin ninguna expresión en los ojos que te dejara ver en qué estado de ánimo se encontraba ahora mismo. Aunque apostaba lo que fuera a que estaba enfadada. Kyle, a mi lado, me sujetaba todavía por la cintura y se aclaró la garganta. 

—No es lo que...

—Oh, Kyle, cállate —dijo Violet, poniendo sus manos en sus caderas. Era graciosa verla enfadada, con lo pequeña que era, y además, dentro de su vestido de novia parecía más pequeña aún —. Tenías tu lengua metida en la garganta de mi mejor amiga. No me digas que no es lo que parece.  

Yo seguía sin decir nada. ¿Qué podría decir? Si abría la boca seguro que la cagaba. Le di un codazo a Kyle, seguido de una seña con la cabeza hacia Violet para que se lo dijera. Él me preguntó con la mirada si estaba segura, a lo que yo asentí. Ya nos había pillado, no ganábamos nada escondiéndolo. 

—Abby y yo llevamos unas semanas saliendo —habló Kyle. 

Se sentía raro escucharlo en voz alta, y todavía más raro que otra persona que no fuéramos nosotros fuera consciente de nuestra relación. Se sentía raro, y bien. 

—No sé cómo surgió, y sé que me dijiste que no me acercara a ella, pero no pude evitarlo. 

Mientras Kyke hablaba, yo no podía dejar de mirarle. Estaba nerviosa por la reacción de Violet y era incapaz de mirarla a ella. La escuché suspirar. 

—No te enfades por lo nuestro, Violet. 

De la nada, ella se empezó a reír, y me giré hacia ella extrañada. Tenía las manos en su estómago y estaba inclinada hacia delante, sin parar de reírse. Miré a Kyle y el estaba igual de extrañado que yo. Decidí hablar esta vez yo. 

—¿De qué te ríes? —pregunté. 

—Ay, chicos. Sois tan tontos —dijo todavía riéndose—. ¿Os creíais que no lo sabía? ¡Si sois lo más obvio del mundo! Y Kyle tuvo el error de dejar el pie fuera de debajo de la cama cuando se escondió. Tenía mis sospechas y en ese momento las confirmé. 

Sentí como mi cuerpo se relajaba totalmente y cómo el brazo de Kyle a mi alrededor dejaba de estar tenso. Ahora acariciaba suavemente mi cintura, reconfortándome. 

—¿Entonces no estás enfadada? —el alivio era notable en mi voz. 

—Estoy molesta porque me lo habéis estado ocultando. Le dije que no se acercara a ti porque sabía que estabas algo dolida por lo de James, y también sabía que mi hermano era un idiota.

—Hey —se quejó Kyle.

—Es la verdad, hermano —se encogió de hombros inocentemente. 

Ella se quitó el velo que colgaba de su pelo y lo sujetó con las dos manos, acariciándolo. 

—Ahora, que ya se ha aclarado todo y podéis dejar de fingir delante de todos por mi culpa, vamos a bailar. 

De repente, la música empezó a sonar. Seguramente llevaba sonando más tiempo pero yo no podía concentrarme en otra cosa que en evitar que Violet se enfadara. Comenzamos a andar hacia una carpa donde había una pequeña banda local tocando. 

Kyle cogió mi mano y la balanceó haciendo que yo riera. Axel se acercó y agarró a Violet de la cintura, susurrando algo en su oído. En ese momento una música lenta se hizo cargo de la carpa y todo el mundo se levantó para hacer un circulo al rededor de Axel y Violet. 

Mi mitad imprevista. [#Wattys2015]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora