Control mental

Odio a Endevour

Para Hawks ya no era nada nuevo contactar con los otros miembros de la liga de villanos. Ya habían pasado dos meses desde que empezó a contactar con ellos y parecía que tenía la aprobación de ciertos miembros. A excepción de Dabi. Sus favoritos eran Twice y Toga quienes en seguida le hicieron un hueco sin sospechar. Todo lo contrario de los demás. Sin embargo, mientras los demás miembros parecían acatar la decisión del jefe de integrar al héroe número 2 y optaban por mostrar sonrisas falsas, el pelinegro ni siquiera intentaba disfrazar sus muecas. Dabi siempre le hablaba a la defensiva y cada vez que el héroe alado intentaba entablar una conversación con él, parecía que en cualquier momento le iba a saltar.

No obstante, Hawks era testarudo y sabía que debía ganarse la confianza del pelinegro. Lo supo en cuanto vio las relaciones entre Dabi y los demás villanos. Pues, pese a que se encontraban en el mismo equipo, Dabi parecía optar por actuaciones en solitario y por ignorar aquellos comentarios que simplemente no estaban en sintonía con sus deseos. En los dos meses que llevaba pudo ver pequeñas disputas entre Shigaraki, Spinner y Dabi mayormente. Disputas que, aunque insignificantes, le proporcionaban información valiosa acerca de sus debilidades como grupo.

Desde entonces, había intentado recopilar información de Dabi desde dentro ¿Qué sabían los demás sobre este miembro? ¿tenía mucha importancia dentro del grupo? Quería acercarse a él y para ello, toda la información que pudiera obtener era bienvenida.
Por desgracia, pasaban las semanas y el único dato importante que había conseguido gracias a su ahora buen amigo Twice, era su obsesión con Endevour, el héroe número uno en todo Japón. Parecía que el villano lo odiaba como si este le hubiera hecho un ataque personal. Según Twice, lo odiaba tanto que a veces cuando atacaba a inocentes, gritaba a su víctima "grita, grita lo suficiente para que Endevour venga, quiero que vea de lo que soy capaz" ¿La razón? se desconocía.

Hawks se planchó con las manos el abrigo que formaba parte de su traje de héroe y mientras caminaba por el largo pasillo en dirección a la nueva reunión, se planteó cómo abordar después a Dabi. No iba a ser fácil, pero tenía que intentarlo.
Rápidamente, llegó a la sala de reuniones y entró con paso airoso. La estancia ya estaba ocupada por los miembros de la liga. Cada uno en su respectiva silla, alrededor de la larga y curva mesa. El lugar de Hawks era el centro de la sala. Él no tenía silla ya que su única función era informar acerca de la posición de los demás héroes y sobre el porcentaje de éxito de la misión. Una vez que acabara de informar, escuchaba la nueva petición del líder de la liga y abandonaba la sala, dejando a los demás discutir acerca de la información dada. A veces se quedaba alguna pluma en la sala estratégicamente para así escuchar a escondidas lo que decían. Esta vez, haría lo mismo.

- ¿Y bien? te ocupaste de los demás héroes. - habló finalmente Shigaraki. Este estaba en el centro de la mesa, justo donde la curva de esta estaba en su máximo esplendor. A cada lado había tres miembros de la liga mirándolo fijamente, atentos a sus palabras.
- claro, no hay de qué preocuparse. He informado de una falsa amenaza al otro lado de la ciudad. Atacaréis a los alumnos de la escuela media con el objetivo de capturar a uno de los alumnos cuyo quirk sería de gran utilidad para vosotros. Tenéis un noventa y cinco por ciento de posibilidad de éxito -
- ¿Un noventa y cinco? - preguntó Kurogiri
- Sí. Por desgracia temo que estoy siendo vigilado por Endevour, mi instinto me dice que se está debilitando la confianza que tiene en mi - respondió mirando de reojo a Dabi quien parecía haber salido de un trance al escuchar el nombre del héroe.
- Pues consíguete de nuevo su confianza. Lo último que necesitamos es que el héroe número uno se presente de repente y nos destruya la misión - habló de nuevo Kurogiri. Los demás simplemente asintieron y miraron a Shigaraki, el que tenía la última palabra.
- Estoy de acuerdo. Pondremos en marcha el plan en una semana, así que consigue que Endevour también esté ocupado. No quiero ninguna sorpresa. Si no...- empezó a decir mientras se escuchaba la risilla de Toga de fondo
- Hey hey, quiero lo mismo que tú ¿recuerdas? no te preocupes, conseguiré que muerda el anzuelo, se me da bien. - argumentó el rubio con una sonrisa confiada. De nuevo, miró de reojo al pelinegro quién lo observaba detenidamente. "Bravo" pensó "capté su atención"

La reunión entonces siguió su típico cauce. Explicó las decisiones tomadas y se aseguró que todos las entendían y aceptaban. Después, escuchó las pequeñas discusiones entre los miembros y, una vez todo decidido, abandonó la sala, no sin antes dejar que una de sus plumas se despegara de sus alas de manera casual para así utilizarla como aparato de escucha.

No obstante, aquel día no se dijo nada que no se pudiera imaginar ya. Dabi seguía oponiéndose a su introducción en el grupo y Spinner se mostraba reacio a llevar a cabo la misión. El mencionar a Endevour hizo que ciertos miembros se replantearan la posibilidad de que la misión saliera mal y eso llevó a la creación de una atmósfera tensa y nerviosa. No era lo mismo enfrentarse a héroes de una categoría inferior que a uno de los más fuertes de todo Japón.

Hawks hizo que la pluma volara a él de nuevo y esperó en una de las salas al otro lado del edificio. Allí es donde pasaba horas hablando con Twice y Toga y donde, prácticamente, había ido evolucionando su superficial relación de amistad. Estos, pasados unos minutos, empezaron a entrar en la sala. El primero en entrar fue Twice, dirigiéndose rápidamente al frigorífico buscando alguna bebida refrigerante. Los siguientes en entrar fueron Toga, Spinner y Mr Compress quienes se tiraron en el sofá agotados de tanta formalidad. Finalmente, entró Dabi.

El héroe alado se acercó a este y le ofreció una lata de coca cola con una sonrisa amable.

- Hey compi, justo quería hablar contigo - comentó mientras esperaba a que el contrario cogiera la lata.

No hubo movimiento por parte de Dabi. Simplemente una mirada inquisitoria.

- Tú y yo no tenemos nada de qué hablar - respondió ignorando la lata que le ofrecía y caminando hasta el frigorífico para tomar una botella de agua. La abrió y le pegó un largo sorbo. Mientras tanto, Hawks le seguía observando atentamente, los demás parecían ignorar la aparición de Dabi o lo ignoraban a propósito.
Abrió la lata y le dio un corto sorbo, sintiendo las burbujas del gas explotar en su boca y quedarle un regustillo dulce. De nuevo, se acercó a él y volvió a mostrar aquella sonrisa que muchas fans habían descrito como "irresistible"

- Sé de tu odio a Endevour y pensaba que a lo mejor, te gustaría ayudarme a deshacerme de él. - comentó observando las reacciones del contrario - Por ahora intentaré distraerle y ganarme más su confianza pero...no estaría mal tener a alguien con quién hablar sobre como deshacerte de uno de los grandes héroes de todo Japón.
- ¿Y a mí qué me cuentas? Búscate a otro. Yo trabajo solo - replicó mientras le miraba como esperando una respuesta
- ¿Acaso tienes alergia a trabajar con gente? -
- Sí, sobre todo a trabajar con pajarracos como tú - Lo miró y empujándolo caminó hacia la puerta -
- ouch, eso dolió - respondió burlón mientras se llevaba una mano en el pecho dramáticamente - venga, piénsatelo, seguro que tienes buenas ideas y me gustaría oírlas -
- vete a la mierda -

Abrió la puerta y, ante la atenta mirada de los demás miembros de la liga, los cuales de vez en cuando cuchicheaban algún que otro comentario, salió dando un portazo.
- Parece que le gusto - comentó con una sonrisa al grupo de cotillas
- No te preocupes, Dabi es así - señaló Twice mostrando una sonrisa escondida tras la máscara
- Es un niñato quemado - comentó Toga riendo
- Dabi es como un filete mal hecho. - destacó Mr Compress desde la otra esquina del sofá. Todos le miraron a la expectativa mientras este le daba un trago a su refresco - Quemado por dentro y por fuera -

Toga y Twice rieron ante la ocurrencia y Hawks se unió mostrándose amable y confiado. Se sentó en asiento vacío al lado de Mr Compress y extendió las alas lo poco que pudo para acomodarse bien

- Oye...¿vosotros creéis que todo su cuerpo está quemado? ¿o hay alguna zona en la que su piel esté bien? - preguntó Spinner. Entonces, tal y como había pasado un segundo antes con Mr Compress, todos lo miraron a la expectativa de que añadiera algo más. Sin embargo, no habló. Se quedó mirando a la mesa pensativo, como si fuera uno de los misterios de la vida
- ¿Te refieres a si también tiene la piel del culo quemada? - habló entonces Twice. De nuevo, se escuchó una risilla que poco a poco iba aumentando de volumen
- En verdad, es una buena pregunta. Quizás esté a rayas, los brazos y piernas las tiene quemadas, la cara también y el cuello pero ¿y el abdomen? ¿y el culo?
- ¿cagará bien? - preguntó de nuevo Spinner.

A partir de ahí, todo fueron risas y conjeturas divertidas acerca de la manera en la que las quemaduras de Dabi se esparcían por su cuerpo. Un cuerpo que hacía mucho tiempo había dejado de tener un color sano y había pasado a estar cubierto de grapas quirúrgicas que le unían la piel y de heridas mal curadas.

No sabía cuanto tiempo había pasado riendo y hablando animadamente con los miembros de la liga. A veces se sentía asqueado por la idea de que realmente se lo había pasado bien con ladrones y asesinos. Entonces, se recordaba así mismo que todo era parte de la misión, que si quería que tuvieran la suficiente confianza en él, tenía que pasar por momentos así y no debería martirizarse por actuar y pasárselo "bien".

No obstante, muchas veces se preguntaba si a quién estaba engañando era a su persona o a los miembros. ¿Realmente es todo mentira o esas risas eran reales?
Rápidamente se apartó de la mente aquellas preguntas que solo harían que se comiera la cabeza, y prestó atención a su ruta. Por fin volvía a casa. Era ya entrada la madrugada y la ciudad, desde aquella altitud, se mostraba fantasmagórica. No había nadie en la calle, llenándola de silencio y las luces de las farolas causaban un aspecto mágico y a la vez temible.

Hawks aumentó la velocidad y viró a la derecha. Unos minutos más y a estaría en casa.
Ese día, también había sido un éxito a excepción del encuentro con Dabi. ¿Por qué odiaba tanto a Endevour? ¿era por algo personal o porque era ahora el representante de la sociedad de héroes? Su instinto le susurraba que era por lo primero. Aquella mirada oscura que le había mostrado nada más pronunciar el nombre del héroe le hizo ver que tenía que tener cuidado. Aquel villano tenía mucha ira dentro y ese nombre era el detonante.

Viró hacia la derecha y finalmente llegó hasta el gran ventanal de su casa, el cuál ante su presencia se abría dejándole pasar sin necesidad de parar. Una vez dentro, cerró el ventanal y se quitó tanto la chaqueta como los zapatos, como era costumbre y, al igual que todos los días, se tiró agotado en el mullido sofá.
No comprendía por qué tanto odio hacia Endevour. ¿Qué sucedió entre los dos? ¿Se conocían de antes? No lo sabía pero le causaba la suficiente curiosidad para levantarse y encender el portátil que había dejado encima de la mesa.
Para él, el héroe de fuego era uno de sus ídolos favoritos. Gracias a él estaba vivo. Él le había dado fuerza y le había enseñado que la perseverancia ayudaba a cumplir sueños. Endevour por fin se había convertido en el héroe número uno y Hawks ahora era su segundo, el héroe más joven en llegar a una posición tan alta en todo Japón.
"Qué podría haber pasado?" murmuró empezando una larga búsqueda de Google acerca de posibles rumores.

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Era un nuevo día, el apartamento estaba más presentable, pues aquél día era el día de limpieza, y Hawks ya se encontraba preparándose para el trabajo. En aquél momento, estaba en el baño cepillándose los dientes mientras que con la otra mano intentaba aplastar los mechones de pelo que parecían estar vivos. Lo único que se escuchaba era una canción de fondo de Panic! at the Disco y el sonido del cepillo de dientes al hacer su pulcro trabajo.

Hoy sabía que iba a ser un día atareado pero por lo menos, no tendría que ver a los miembros de la liga. Estaba relajado, algo cansado, pero relajado y preparado para un día monótono de trabajo. Escupió el bochinche de agua y empezó a tararear la letra mientras caminaba hacia el salón abrochándose los pantalones.

"If you're a lover, you should know
The lonely moments just get lonelier
The longer you're in love than if you were alone
Memories turn into daydreams, become a taboo"

Su cabeza se movía al ritmo de la música y sus pies empezaron a imitar a su cabeza y a deslizarse por la sala. Daban traspiés, saltos y se movían de un lado a otro imaginando una coreografía.

"¡Buenos días a todos! Espero que estéis teniendo un buen comienzo del día" bramó el interlocutor de la radio con entusiasmo

- Buenos días Akari ¿Qué tal te has levantado hoy?
- ¡Buenos días Haruki! hoy estoy genial, con ganas de pasar un buen rato y dar todas las buenas noticias que tenemos para hoy! - respondió con el mismo entusiasmo la compañera
- Me lo has quitado de la boca Akari, porque sí oyentes, hoy tenemos muy buenas...¿perdón? - de pronto la música paró en seco dejando un silencio abrumador.

Hawks se detuvo y se quedó pendiente de la radio ¿Por qué se habían callado?

- Perdonad oyentes, acabamos de recibir una noticia de primera mano y, pese a que nos gusta empezar nuestro programa con buenas noticias, nuestro deber es informar urgentemente de lo sucedido - empezó a comunicar el primer interlocutor con voz débil. Sonó un carraspeo de garganta. - Nos acaban de informar de que ha habido un ataque cerca de la zona central de la ciudad. Más específicamente, en el gran edificio antiguo de las ciencias. De momento no hay muertos, pero los villanos, conocimos por pertenecer a la temeraria liga de villanos, han secuestrado a dos de los civiles que se encontraban dentro del edificio. Todavía no han llegado los héroes más necesarios y aunque los héroes presentes están intentando hacer todo lo posible no paro de pensar... ¿Dónde está el héroe número 1? - informó preocupado.
- No lo sé pero debería darse prisa. Esperemos que la situación se consiga superar gracias a los héroes, como tantas otras veces - comentó la interlocutora
- Yo pienso lo mismo. Esa liga de villanos es...

Hawks apagó la radio. Una abrumadora cantidad de pensamientos pasaron por su mente en aquél momento. "Hoy no es el día. Han adelantado el día del ataque sin comunicármelo" pensó mientras notaba como su cuerpo empezaba a irradiar ira. Rápidamente, se cambió a su traje de héroe y salió por el gran ventanal hacia el sur de Musutafu. Más específicamente, hacia el antiguo edificio de las ciencias.

"Voy a matarlos" pensó mientras intentaba ir lo más rápido posible hacia su destino. El papeleo tendría que esperar.