Capítulo 17 - Holocausto armónico

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Capítulo 17 - Holocausto armónico

El ruido en la taberna era lógico tras lo deseado. Los vidrios que rechistaban entre choques y mareas de cerveza y los gritos de los pobladores ocultaban los pensamientos de los presentes, sobre todo tras Twisted haber exclamado luego de golpear con sus dos puños la mesa al ver la carta que preparaba el futuro de Graves. Entre más pasaba el tiempo, más difícil era mantener un orden, pues la mayoría se dejaba ceder ante las tentaciones banales y emocionales.

Incluso en un ambiente familiar y favorecido, Gangplank solo deseaba una cosa: golpear a Graves. Su reacción indiferente era lo que más le molestaba, pero teniendo a Miss Fortune a su lado tenía mayores problemas en lo que preocuparse. Su mente solo le permitía concentrarse en una sola cosa.

El único que no sentía necesidad alguna de expresarse era Graves. Tras haber echo una mueca con sus ojos al escuchar al mago golpeando la mesa y tras sus últimas palabras este se levantó y acomodando su vestimenta procedió a dirigirse a la puerta después de decepcionarse con el resultado de la carta. Aburrido, pues la taberna ya no le hacía gracia, caminó con su escopeta hasta finalmente encontrar la salida.

Gangplank seguía con las ganas de golpearlo, así que procedió a intentar seguirlo, pero fue interrumpido por los bruscos movimientos de la dama pirata.

Tú te quedas aquí sentado como el vagabundo que eres - se burló la pirata tras empujar a Gangplank y forzarlo a sentarse alrededor de la mesa -

Agradece que eres mujer, si no te mato sin pensarlo - agregó el capitán acatando sus órdenes. Él sabía que ella poseía una fuerza y un don enorme cuando se trababa de controlar a hombres, así que prefería no volver a enfrentarla. Él también tenía cosas que pensar en calma -

Eh, Twis - soltó Miss Forturne con ternura hacia el mago para ordenarle - Síguelo.

Twisted aún no había vuelto de sus pensamientos, pero al oír su nombre se despertó rápidamente como si de adrenalina se tratase para luego ingenuamente preguntar << ¿Qué lo siga? ¿Por qué?>>.

Instinto de mujer - agregó la pirata haciéndole un gesto para que se vaya de una vez mientras que observaba como Graves abandonaba el bar -

Tú no eres mujer, eres una bestia - interrumpió Gangplank para inmediatamente arrepentirse. Sabía que sus comentarios traerían consecuencias -

Dilo de nuevo - soltó Miss Fortune tras haber insertado su pistola en la boca de Gangplank con brutalidad partiendole un poco sus labios -

"Woouk, meuw rindow" - "Ok, me rindo" intentó decir el pirata con la pistola en su boca mientras que indicaba con su dedo que la multitud los estaba observando por llamar tanto la atención para que la dama retirase la pistola de su boca -

Quédate sentado, un solo movimiento y disparo - ordenó nuevamente la dama retirando la pistola de su boca y tomando asiento con las piernas cruzadas - De todas formas tienes muchas cosas que explicarme.

Twisted en contra de su voluntad caminó hacia la salida con la tonta esperanza de no encontrarse con Graves. Lo único bueno de salir era el aire fresco que le otorgaba el muelle y la lejanía de los piratas. Graves sin haber esperado a nadie seguía caminando con tranquilidad como si nadie de la policía lo estuviese siguiendo. Por primera vez en su vida, su vida era suya, y aunque fuese sólo una noche, él quería ser libre y caminar.

El mago por unos segundos observó la espalda de Graves sin notificarle su presencia. Su mente le jugó una mala pasada y le recordó la primera noche que lo conoció, noche en la cual él se encargaba de sus heridas y cicatrices en su robusta espalda. De alguna forma el juego recientemente jugado, había curado a ambos. Graves por primera vez caminaba sin atención tranquilo y Twisted por primera vez se atrevía realmente a acercarse.

Demasiado triste para morirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora