Porno!¡ | YeonGyu

Llamada entrantante

Hospital Jungang; 9pm

Beomgyu despertó con un dolor de cabeza horrible, se intentó sentar en la camilla de hospital, pero su cuerpo estaba tan cansado que no pudo lograr su cometido, soltando un quejido en su lugar.

Heeseung al escúchalo saltó de su silla con sus ojos de cachorro aguados, acercándose de prisa a la cama de su hermano, tomando de su mano y besándola con amor.

— Discúlpame, lo siento, lo siento, lo siento tanto. — susurró entre los besos repartidos. — es que cuando lo vi... perdí los estribos y mi Alfa me controló. — miró al Omega que estaba callado y escuchando atentamente todo. — eres mi pequeño hermanito...y siempre querré protegerte, supongo que mi orgullo se sintió tan herido, y te dije todas esas cosas feas... ¿podrías perdonarme, cachorro?

Beomgyu asintió, abrazando a su tonto hermano, entendía por completo el enojo de su Hyung, pero su preocupación ahora mismo era otra cosa.

— Hyung quiero preguntarte algo.

— ¿Qué pasa Gyu?

— ¿Qué es todo esto? — dijo señalando todas las máquinas conectadas a su cuerpo, que no podía negar que le asustaba un poco, después de todo, él odia los hospitales.

— No te preocupes por eso, es solo por si acaso, piensan que fue un ataque de ansiedad.

— Dime la verdad.

Heeseung tragó en seco, no estaba mintiendo del todo, pero no quería decirle que no sabían exactamente que le había pasado, tampoco quería decirle que puedo que su corazón no esté respondiendo bien al tratamiento actual.

— Esa es la verdad.

— Prométemelo.

— ¿No confías en tu pobre hermano?

— La última vez que me mentiste con algo como esto estuve en este asqueroso lugar por seis meses Heeseung, si me voy a morir mañana quiero que me lo digas.

— ¡No digas cosas como esas! No morirás, no te pasa nada malo, métetelo en la cabeza.

— Muy bien Hyung, confiaré en ti.

Sunoo y Yeonjun entraron a la habitación donde estaban los hermanos, Sunoo fue directo a abrazar a su bebe, mientras que Yeonjun estaba parado en el marco de la puerta.

— ¿Qué haces allí parado Yeonjun? Ven y abrázame. — sonrió con sus bonitas encías asomándose, estirando sus brazos para dale un cálido abrazo a su Alfa.

Yeonjun con una gran sonrisa fue a obedecer a su mandón Omega, marcando con su olor el pequeño cuerpo aferrado a él, soltando un suspiro de alivio al verlo normal como siempre y no decaído.

— ¿Te sientes bien?

— Me siento de maravilla, es más, ¿Cuándo nos vamos? ¡Oh, ahora mismo no es así! No queda más remedio que vestirme rápido. — espetó el Omega levantándose de la camilla, para luego ser detenido por Sunoo quien lo miraba negándose al intento de escape.

— No funcionará.

— ¡Pero odio los hospitales Hyung, no es justo! — lloriqueó, restregándose a su Alfa para ver si este si le aceptaba el capricho. — Junnie, no me gustan los hospitales, me dan miedo, vámonos por favor. — pidió con sus mejores ojos brillosos, parpadeando repetidas veces.

— No.

Pero eso no funcionaba con su preocupado Alfa.

Beomgyu frunció su ceño y suspiró derrotado, estaría en ese lugar mínimo tres días para monitorear las respuestas de su cuerpo a una nueva medicina, genial, más pastillas que lo hacían sentir mareado eh inútil.

— Si quieres podemos ir al jardín del hospital. — sugirió Yeonjun, dándole aunque sea la opción al Omega de ir a algún lugar aunque sea para estirar las piernas.

— de acuerdo. — puchereó aún insatisfecho con la opción, realmente quería salir de ese lugar lo más rápido posible.

Yeonjun ayudó a su omega a pararse completamente de la camilla, sosteniéndolo con fuerza de su pequeña cintura y poniéndole delicadamente las pantuflas de conejito esponjosas en sus pálidos pies.

Caminaron con calma hacia los jardines de ese hospital, no eran muy grandes, pero si o suficiente para que los niños y pacientes de edad avanzada pudieran distraerse un rato jugando o leyendo un libro con una refrescante brisa.

Pero Beomgyu no quería nada de eso, solo quería irse de allí... o acostarse en el pasto verde con Yeonjun y contar nubes, llámenlo raro, pero eso lo desestresaba.

Al menos no tendría que preocuparse por cosas innecesarias, la renta, sus relaciones, sus amigas sus tareas, sus profe-

Oh demonios, ¡La tarea del demonio Kim! No la había terminado, ni siquiera la había empezado.

— E-estoy enfermo, sí, creo que deberé quedarme más tiempo en el hospital de lo que había planeado.

— ¿Por qué el cambio de decisión tan repentina?

— Bueno...— buscó una manera para evadir el tema, y vaya fue su suerte al escuchar el celular de Yeonjun sonar con insistencia, pero al ver que no contestaba comenzó a asustarse con su risa nerviosa. — contesta Jun, no sabes si es una emergencia.

Choi revisó la pantalla, chasqueando la lengua en el proceso.

"Llamada entrante; Papá"

>>Ignorar<<

— Son mis padres.— afirmó, volviendo a escuchar el molesto sonido de llamada.

— ¡Ves, te dije que te llamarían pronto! Soy un adivino. — sonrió meloso, insistiéndole a Choi que contestara, finalmente, aunque algo inseguro, Choi contestó alejándose un poco del pálido para más privacidad.

— ¿Hola?

— ¡Choi Yeonjun! — Yeonjun alejó el teléfono de su oído, arrepintiéndose de haber tomado la llamada. — ¿se puede saber porque estas en un hospital? Esas malditas peleas, seguro uno de esos animales te-

— ¿Cómo demonios sabes que estoy en un hospital, estas espiándome?

Apresurado, su padre contestó con agresividad. — ¡Pero por supuesto que sí! ¿Qué crees, que te dejaré hacer lo que te da la gana solo porque eres "independiente"?

— ¡Pero por supuesto que sí! No puedes entrometerte en mi vida, ya no más.

— Eres una completa decepción, por ti tu padre llora todas las noches preocupado por lo que pueda pasarte, si tan solo regresaras a casa...

— No lo haré, no caeré en tus manipulaciones y engaños, ya no seré tu títere, padre.

El Alfa mayor dejó en un penetrante eh intimidante silencio la línea telefónica, para luego soltar una carcajada descolocando por completo a Yeonjun.

— Bien, no lo hagamos por las buenas, pero eso sí, tu niño se ve muy amigable, ¿Cuándo planeas presentarlo a la familia? — colgó dejando a Yeonjun con la palabra en la boca, maldiciendo al teléfono apagado.

— ¡Maldito hijo de puta! — mordió su dedo pulgar con fuerza, ¿Cómo demonios sabía de Beomgyu? Y se preguntó, ¿será eso demasiado peligroso? Su padre tiene conexiones, poder, dinero y maldad ¿cómo para hacerle daño a su Omega?...no, no podía ser posible, su padre podía ser de todo, pero no lo creía capaz de lastimar a alguien solo para conservar un heredero para su deshonesto imperio... ¿o sí?

— ¿Qué te dijeron? — Choi se sobresaltó cuando su pequeño pálido lo abrazó por detrás, enrollando los brazos por su cintura desde su espalda.

— Nada de lo que debamos preocuparnos.

O al menos eso esperaba.

Tenía que actualizar SI o SI porque sino me iban a cortar la cabeza perdón por tardar tanto TT

20 comentarios y 15 votos y para la proxima actualización AJAJAAJAJA