Hospital Jungang; 6:30am.
Demonios, allí estaba, justo enfrente de aquél hospital, con sus piernas temblorosas y cubierto de sudor, ese era Choi Yeonjun en esos momentos.
— E-espero que tengas razón. — le dijo al modelo a su lado, se animó a entrar acompañado por el, siendo atendidos por una bonita Omega justo en la entrada.
— Buenos días, ¿en qué puedo ayudarle? — saludó, Yeonjun se quedó callado sin saber muy bien que decir, la Omega mostró un gesto de confusión al no obtener respuesta, Jay rodó los ojos y tomó el mando guiñando un ojo a la chica.
— Buenos días linda, ¿podrías decirme donde queda el área de Dermatología? — la chica asintió, dándole la dirección que quedaba en la segunda planta del hospital. — gracias, bonita. — la chica dio una reverencia educada, haciendo oídos sordos a los halagos, a Jay le pareció raro. — Bueno, entonces me voy preciosa, si sigo viendo tu lindo rostro me enamoraré, oh, ya es tar-
Yeonjun lo sacó de allí a rastras al sentir el olor picante de a chica en el aire y la onda de pena ajena rodeando a Jay, ¿Qué demonios le pasaba?
Ya lo suficientemente de la chica, procedió a quejarse.
— ¿Qué fue eso? — susurró enojado, pero el apuesto chico parecía ido. — ¡Te pregunté que fue eso, Alfa imbécil!
— E-esa Omega ni siquiera me miró.
— ¿Qué esperabas, que te pidiera matrimonio como tus admiradoras?
— ¡Pero que insulto! ¿Acaso no lee revistas? ¿Vive en una roca o qué? Es ciega al no ver mi belle-
— Deja de ofenderte y ve a tu tonta consulta mientras busco a Beomgyu, como debimos hacer desde el principio.
— Bien, bien, pero esto no se quedará así. — refunfuñó por lo bajo dando zancadas hasta el piso de arriba, ya solo, Yeonjun buscó disimuladamente el área de cardiología, ignorando al montón de Omegas y Betas que lo miraban y suspiraban.
Acostumbrado y algo nervioso decidió ignorarlas y seguir caminando, chilló de dolor al sentir una mordida en su pierna derecha, ¿Qué demonios había sido? Miró hacia abajo desconcertado mientras acariciaba su pierna terriblemente herida. – Exagerando un poco, claro.- y se encontró con una pequeña niña, su mente conectó los puntos y era la misma niña que había visto junto al (su) Omega.
Oh, Dios, ¿estaba en problemas?
— ¡Lo advertí, si hacías llorar a mi tío Gyu de nuevo te mordería! — ¿de qué estaba hablando esta niña? El no recordaba ninguna advertencia, pero eso quedó en segundo plano al escucharla decir Tío Gyu.
— ¿Tío Gyu?
— ¡No digas su nombre, solo yo puedo decirle así! — le dio una muy adorable patada en su pierna, Yeonjun rió por lo bajo, fingiendo dolor.
— ¡Ow, me has herido! — dijo, haciendo puchero a la niña, esta le sacó la lengua orgullosa y Choi rió de nuevo, la pequeña era adorable. — bien, pequeña, si...Beomgyu es tu tío, ¿Quiénes son tus papis?
— Mis papis son mis papis, no sé de qué hablas. — Choi asintió, claro que, una niña tan pequeña les llamaría papis y no por sus nombres, intentó con otra cosa.
— ¿alguno de tus papis es muy torpe?
— Mi papa, mi papi se la pasa arreglando sus desastres, yo lo ayudo a encubrir algunos. — dijo alegre y orgullosa de su ayuda, Yeonjun sonrió, esos sin duda alguna eran Heeseung y Sunoo, estaba tan feliz de que ellos formaran una familia.
Aunque su pecho dolió mucho cuando se dio cuenta de que él ya no formaba parte de ella y que se había perdido del crecimiento de esa pequeña.
— Oh, mi niña. — acaricio sus castaños cabellos y sus abultadas mejillas que había heredado de Sunoo. — eres realmente hermosa, ¿lo sabías? — halagó a su sobrina, su pequeña sobrina, su familia.
Ahora entendía las risas de Jay, hasta él se reiría ante eso, la pequeña apartó su mano con un puchero y sus pálidas mejillas se enrojecían. — e-esas palabras bonitas deberías decírselo a mi tío Gyu, lo hiciste llorar.
— ¿Enserio? — se sintió mal de que el (su) Omega llorara por su culpa, aunque ya se lo esperaba con el accidente de ayer. — ¿puedes guardar un secreto? — la niña asintió emocionada, la verdad no era buena guardando secretos, pero le encantaba oírlos y sentirse importante como confidente. — la verdad es que, quiero cortejar a tu Tío Gyu, ¿crees que tengo oportunidad?
— Bueno...creo que sí, pero no puedes hacerlo llorar, si haces eso no voy a apoyarte, quiero que mi Tío Gyu sea feliz.
— Te juro que lo haré feliz, demasiado feliz, lo amo mucho, tanto como lo amas tú.
— Oh, ¿tanto como yo? — exclamó sorprendida y asintió a todo, si lo amaba tanto como ella entonces era digno de darle una oportunidad. — Bien, te ayudaré con mi Tío Gyu...Tío Junnie.
Yeonjun abrazó a la niña con fuerza y besó su castaña cabellera, enternecido por el bonito apodo que dijo su sobrina. — Bien, ¿Cómo te llamas mi niña?
— Mi nombre es Haerin.
— Bien, Haerin, ¿Puedes ayudarme en la misión de buscar a Beomie?
— ¡Si, misión buscar a Tío Gyu! — ambos rieron, Yeonjun cargó a su linda sobrina y la posó en sus hombros, quedando cada piernita al lado de su cabeza, la pequeña se restregaba contra la rubia cabellera del Alfa, inundando sus fosas nasales del delicioso olor a café y un toque muy sutil a lluvia.
Haerin guió a su Tío Junnie al consultorio de su Tío Gyu, que estaba algo alejado de la entrada y entrando a otra zona completamente diferente, con una vibra completamente diferente.
Todo estaba blanco y tranquilo inclusive estaba callado, pero el inconfundible olor dulce del aroma de Beomgyu estaba en el aire, Yeonjun refunfuñó feliz al olerlo, ayer no había podido disfrutarlo como se debe.
Se deleitó perdiéndose en sus pensamientos hasta que Haerin jaló sus cabellos como un caballo descarrilado, avisando que ya habían llegado a su destino final.
— Aquí es, Tío Junnie, toca tres veces por si mi Tío Gyu está ocupado, ¡debemos ser educados!
Así lo hizo obedientemente como la pequeña le ordenó, tocó tres veces la blanca puerta, escuchó uno que otro suspiró dentro de la habitación y finalmente fue abierta por un pálido pelinegro.
Un pálido pelinegro que al verlo se petrificó, aún más cuando vio a su sobrina junto aquél hombre, claramente desconcertado.
Su olor se había apaciguado lentamente y ambos corazones ardieron en sincronía.
— Yo...— habló dudoso Yeonjun, tomó aire de sus pulmones y se armó de valor, reuniendo un poco de su rota confianza. — necesitamos hablar, Omega.
— Yo no necesito hablar nada contigo, Alfa. — refutó, iniciando una guerra de miradas liderada por el pálido.
— Mi niño...yo-
— No me llames así, por favor.
— Beomgyu...
— No entiendo porque estás aquí, no te dejaré romper nuevamente mi corazón.— con el corazón en la boca, Yeonjun insistió, no había venido desde tan lejos para rendirse ahora, no estando tan cerca, no estando enfrente del (su) Omega.
— No te llamaré así si tan solo me escuchas, por favor, te explicare todo, todo lo que es y no mi culpa, solo hablaré unos breves momentos, no aceptaré un no como respuesta. — y así, entró a la habitación haciendo retroceder lentamente al Omega, bajando a la pequeña eh iniciando nuevamente una batalla de miradas que sabía no iba a poder ganar.
.
Tarde pero seguro ;)
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Porno!¡ | YeonGyu
FanfictionYeonjun, un Alfa actor porno heterosexual bastante famoso y deseado. Su cuerpo es caliente y es bueno en la cama, pero lo guapo lo tiene de tonto y en su nuevo trabajo no había leído todo el contrato, ¡Vaya, no era un porno heterosexual! Y lo peor e...