Locancy.

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Empresa de los Choi; 3:30pm.

— ¿aún sigue allí? — habló Jongseong, tocando la puerta de la oficina de Choi, este asintió tranquilizando a su amigo. — Gracias a Dios, no quiero encontrarme con esa loca.

— Dios, Jay, no digas eso o ella te escuchará.

— ¿Tiene un oído supersónico o una mierda así? — la cara de Yeonjun lo dijo todo, sonriendo de manera sarcástica. — bueno, para que preguntar, si hasta sabe en qué piso estás aun cuando ella esté en planta baja o en la terraza.

— Jay, enserio.

— Vamos, ¿Cuándo te volviste tan serio y aburrido? Antes sonreías como un tonto todo el tiempo.

Era feliz, pensó silenciosamente en su mente, solo para él.

— Supongo que maduré.

— Heeseung me llamó y dijo que Beomgyu venía para acá en estos momentos. — el rostro de Yeonjun palideció en esos momentos, eh inconscientemente sus labios formaron una patética sonrisa, Jay soltó una descarada risa. — es broma, mira que esa no es la reacción que esperaba, no pensé que te quedarías sonriendo como un bobo.

— Eso fue muy cruel. — el antes maestro y ahora modelo de la empresa Choi soltó una nueva carcajada, su mejor amigo sí que estaba tenso esos días. — no soy mucho de estar de acuerdo con locancy pero me parece muy buena idea lo de salir de Daegu un par de días.

— No Jay, solo me estresaré más al estar a solas con ella.

— ¿Siquiera sabes a dónde vas?

— No quiero ir a ningún lado con ella.

Algo en la mente de Jay se encendió, dando paso a una alocada pero ingeniosa idea que podía reparar el dañado corazón de Yeonjun.

— ¿A dónde vas? — preguntó al ver al modelo irse casi corriendo, sea lo que sea que planeara, no sería nada bueno, pues las ideas de Jay eran igual que su chistes, muy malos.












— Hey, Locancy.

— ¡Te dije que no me llamaras así, Park! — bramó furiosa la rubia, se contenía lo más que podía para no soltarle una buena cachetada al fastidioso ser humano que tenía enfrente.

— ¿A dónde vas con Yeonjun, bruja?

— ¡Y aun así me insultas! — Jay sonrió ante el rojo rostro de frustración de la Omega, para finalmente mirar su reloj con algo de apuro. — ¿Qué te hace pensar que te diré?

— Si me dices a dónde vas con Yeon prometo que lo convenceré de que vaya contigo.

— ¿Dónde está el truco?

— ¡Que grosera eres! No lo hago por ti, quiero que Yeonjun se relaje. — a la bonita chica le brillaron los ojos, cayendo completamente en la embustera trampa de Jay.

— Tenía planeado ir a Busan, conozco bares por allá y-

— No, no, a Junnie no le gustan esas cosas, le gusta más el ambiente de ciudad, les quedaría perfecto veamos...— llevó sus delgadas manos a su mentón, fingiendo pensar su respuesta. — ya se, ¡Les vendría muy bien ir a Seúl!

Porno!¡ | YeonGyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora