Prenda 4

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Jimin si tocó las telas.

Pasó una semana de esa salida, Jay no se apareció mucho por la boutique de Sunoo, por el estudio y el trabajo. A decir verdad esa salida será una de las pocas en el semestre. Si Sunoo hubiera entrado a la universidad, estaría igual que su mejor amigo. ¿Por qué Sunoo no entró a la universidad? Simple, la carrera de diseño en vestuario no se encuentra en la ciudad. En la capital es el único lugar en el país que puede ir a estudiar, gracias a su hermana mayor, Taeyeon, supo qué podía matricularse en una universidad cercana a la de ella, a pesar que Taeyeon se encuentra en su doctorado de derecho.

Derecho, una carrera difícil y costosa pero que la mayor de los Kim pudo sustentar no solo con becas sino con un poco de ayuda de parte de la familia.

Sunoo admira a su hermana, él admite que es fuerte, pero ella lo es aún más.

Jimin ha estado yendo, entre días a ayudar a Sunoo, a diferencia de Jay, Jimin aporta con la creatividad. Cómo es el cocinero maestro y dueño del restaurante "Moon" puede darse estos lujos de salir si lo quiere.

—¿Cómo vas?

Jimin recarga el mentón sobre un hombro del azabache, mira como crea bocetos de rápido en el taller de confección, que se encuentra detrás de la tienda.

—Voy bien.

Las prendas de Sunoo se exponen en la tienda y detrás de ella esta el taller dónde están todas las telas, y herramientas de trabajo de un modista y diseñador.

—Eres el mejor, Sunoo-ah —sonrió orgulloso Jimin.

—Soy uno de los mejores Hyung.

—Eres modesto —dijo Jimin, dejando un besito pequeño en una mejilla del chico, apartándose para seguir moviendo las telas nuevas que llegaron.

Una suave sonrisa tiró de los labios de Sunoo, no es nuevo que digan esa palabra hacia él. Afirma mejor los lentes redondos que caían sobre el puente de su nariz, Sunoo no tiene miopía pero hace dos años ocupa anteojos porque los ojos se le cansan de tanto diseñar, de acá para allá, y según el oftalmólogo es mejor utilizar lentes para trabajar e evitar un agrave a la vista con el tiempo.

—¿Hola? ¿Hay alguien?

Sunoo levanta la mirada, eleva una ceja, Jimin no fue porque sigue moviendo las telas nuevas. ¿Fue en la tienda? Mirá el reloj pegado a la pared, son las 6 en punto, todos en la ciudad y los locatarios alrededor saben que cierra a las 7, nadie viene a estas horas.

—Creo que no hay nadie.

—¿Por qué dice "abierto" entonces?

Sunoo sacá los lentes y los dejá colgando sobre su cuello por una cadena que los sostiene. Con su caminar característico, como un pingüino, va hacia la tienda, deben ser clientes de afuera de la ciudad, varias veces tanto Jay como sus primos le han dicho que abriera una página en instagram o algo así para que la gente encuentre la boutique (él tiene las suyas, cuentas propias) el azabache dice que lo hará, pero nunca lo hace.

—¿Hola?

—Hola, lamentó la demora me encontraba en el taller.

Saludó Sunoo, las dos personas que vió una pegó un sobresalto al verlo, el azabache aprieta los labios para evitar soltar una carcajada, un joven y una joven. Pero algo llama la curiosidad de Sunoo, la forma que están vestidos, parecen ser gente de oficina y a la vez no, porque tienen mucho estilo para ser de oficina, normalmente los trajes de oficina son neutros, de un solo color, con un accesorio de acuerdo a la personalidad de la persona, Sunoo lo sabe bien ha hecho esos trajes innumerables veces.

Prada Bag | sunsun Donde viven las historias. Descúbrelo ahora