Esa sonrisa tuya |Lu SiCheng|

Capítulo 9.

Desperté de mi sueño , realmente había necesitado dormir.

Me arregle totalmente, bajando las escaleras mientras cantaba alguna canción inventada.

Vi a Cheng, rápidamente fui hacia el lanzandome en el sofá donde el estaba.

El se asustó ante mí aparición repentina, pero al verme sonrió levemente.

Lo abracé sonriendo, mientras cantaba ahora una canción de un grupo femenino coreano.

—¿Qué es el amor? —Dije mirándolo.

El me miró con el ceño fruncido, luego sonrió mirando en algún lado donde habían cuadros.

—Cheng—Dije poniendo mi cabeza en su pecho, sintiendo los latidos de su corazón.

—Dime—Dijo abrazándome, nosotros manteníamos la mirada en el cuadro de primavera.

—¿Donde están los demás?—Dije.

—Fueron a cenar, les pedí que trajeran cena para nosotros—Dijo acariciando mi cabello.

—Cheng—Volví a decir.

—Dime, Jia—Dijo en un susurro.

—Te quiero, Cheng—Dije en un susurro.

—Y yo a ti, pequeña—Dijo besando mis cabellos.

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Nos encontrábamos abrazados mientras veíamos algunas dramas coreanas.

—Cheng—Dije en un susurro.

—¿Mhm?—Dijo, mientras continuaba viendo el drama.

—Tengo mucha hambre—Dije haciendo un puchero.

El le puso pausa al drama, volteo a verme mientras acariciaba mis mejillas.

—¿Quieres que te haga algo de cenar?—Dijo, preguntándome con mucho cariño y cuidado.

—¿Pero si ellos vienen con la cena? Ya estaré satisfecha con la cena que harás—Dije cabizbaja.

—¿Quieres esperar, pequeña?—Dijo sonriendo levemente.

—No lo se—Dijo abrazándolo.

Nosotros escuchamos como abrían la puerta de entrada, no le tomamos importancia al ya saber que eran los demás.

Entraron gritando de felicidad.

—¡Jia!—Dijo Pang gritando, sacandome del agarre de Cheng, así abrazándome.

Yo comencé a reír por cómo se expresaba.

—Yo también te extrañé—Dije enternecida.

Escuchamos un carraspeo, voltee a ver a Cheng que nos miraba con seriedad.

—Allí esta la cena, come—Dijo.

Yo asentí besando su mejilla, el me sonrió levemente ante el tacto.

Fui corriendo hasta la mesilla donde se encuentra la deliciosa cena.

Habían traído lo que les pedimos, sonreí satisfecha mientras comenzaba a comer.

Solté leves gemidos ante la deliciosa comida, moví mis pies con felicidad.

—Veo que te gustó—Dijo Cheng, comiendo un bocado de sushi.

Yo asentí felizmente.

Sin duda la espera había válido la pena.

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Me desperté ante el sonido de mi alarma, me vestí y cepillé los dientes.
Fui a la planta baja, sonreí al ver a Cheng practicando.

Fui a el dándole un beso en la mejilla, pero el hizo una seña indicándome que estaba transmitiendo la partida en la que el juega.

Me tensé poniendo mi rostro de pánico a él que la cámara estaba encendida, aquella que había captado el beso que le di a Cheng.

Rápidamente me fui de allí completamente sonrojada y avergonzada.

Esperaba que nadie comentara algo al respecto, la verdad es que esas cosas me ponían nerviosa mas que la gente muchas veces no veía lo bueno, solo criticaban sin pensar en el dolor que sentirá la otra persona al leer esos comentarios.

Bufé prendiendo mi celular ya que este yacía apagado.

Bufé leyendo algunas historias publicadas por fans, algunas eran groseras y otras románticas.

Sonreí al imaginar a Cheng y yo en una relación, dándonos el cariño sin sentir vergüenza, sintiendo el verdadero amor.

Suspiré soltando una sonrisa.

—Hola, Jia—Dijo Tong Yao sentándose a mi lado.

Moví mi mano en forma de saludo.

—¿No te percataste de la cámara?—Dijo con el ceño fruncido.

Yo negue bufando—Si tan solo Cheng me hubiera avisado que el haría una trasmisión, yo no hubiera hecho lo de hace un momento—Dije.

—Tienes toda la razón, pero en algún momento saldría la verdad, tarde o temprano lo iban a saber—Dijo.

Yo fruncí el ceño, ¿Acaso piensa que estamos en una relación?

—Piensas que estamos en una relación amorosa?—Dije con el ceño fruncido.

Tong Yao asintió con una leve sonrisa.

—Pues no, estas completamente equivocada. Cheng y yo solo somos amigos, es solo eso—Dije nerviosa.

—No sabía que los amigos se daban besos a escondidas—Dijo alzado sus cejas.

Yo abrí mis labios, ¿como es que ella sabía eso?

—¿Como es que lo sabes?—Dije nerviosa.

—Todos lo saben, no soy la única—Dijo poniendo su mano en mi hombro.

Yo asentí bufando—En realidad solo somos amigos, solo que estamos enamorados y parece que ninguno quiere declararse—Dije poniendo mi mano en mi mejilla.

—¿Por qué no lo haces tú?—Dijo.

—Tengo miedo—Dije en un susurro.

—¿Miedo de qué?—Dijo interesada en el tema.

—A ser una rechazada, ese es mi miedo—Dije cabizbaja.

...