No sabia nada de el ,solo que era el heredero al trono ,el futuro rey.
El en cambio en cuanto miro mi sonrisa supo todos mi secretos mas ocultos.
Mara se a pasado toda su vida viendo como las chicas de su edad intentan ser perfectas. Ella nunca a en...
- ¿Qué haces aquí fuera? -me preguntó Hunter a medida que se abría paso hacia mí en el jardín.
-Es la última vez que voy a pisar este lugar-susurre.
-El que vamos a tener allí será aún más bonito y si no lo es me asegurare de que lo sea-contestó.
Me giré a mirarlo y sonreí, él me abrazó por la espalda y devolví mi vista a la luna que se encontraba encima de nosotros.
-Todavía me cuesta creer que estas aquí-comentó.
-En cierto modo me sigues teniendo secuestrada-dije riendo.
-Si con eso consigo tenerte siempre conmigo estarás secuestrada toda la vida-se unió a la broma.
Luego de unos minutos entramos otra vez al castillo, Hunter se despidió con un beso y cada uno se dirigió a sus habitaciones.
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Hacía horas que habíamos llegado, la familia real ya se había trasladado, Hunter estaba en su despacho haciendo cosas de reyes, había pedido que nadie entrara excepto yo y Diago, asique empecé a dirigirme allí cuando escuche esa irritante voz.
- ¿Diago que pasa? -pregunte.
-La señorita Bentley desea ver al rey Hunter-hizo una pausa-pero ya le he dicho que el rey ha pedido que nadie lo moleste-mi mirada se dirigió hacia la señorita Bentley.
-Hunter está ocupado ahora, pero si deseas le puedo decir que has venido-respondí lo más amable posible.
-Quiero ver a mi futuro prometido ahora-me miro con asco y superioridad.
Mi mirada viajó a la de Diago para asegurarme de que había escuchado lo que yo pensaba, él tenía una cara de horror poco disimulada, aunque enseguida cambió su expresión a una más normal.
-Enseguida vengo-le dije a Diago.
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-Adelante-contestó en cuanto toque la puerta.
-Hunter tengo que hablar con...
-Ven aquí-fui a donde me pedía y con sus manos me agarro de la cintura y me sentó en su regazo -¿Qué pasa?
-La señorita Bentley está aquí-explique.
- ¿Qué hace aquí?-pregunto.
-No lo sé, pero exige ver a su futuro prometido.
- ¿Su futuro prometido? -hizo una pausa hasta que se dio cuenta- ¿yo? -solo pude asentir con la cabeza-Dile que no quiero ver a nadie, estoy muy ocupado.
-Pero estás aquí conmigo-comente.
-Tu era la excepción-susurro mientras dejaba un suave beso en mis labios.
-Diago y yo ya le hemos dicho que no puedes atenderla, pero no parece entenderlo.
-Pues échala de palacio-dijo como si nada.
- ¿Cómo voy a hacer eso? -susurré sorprendida por sus palabras.
-Todos los guardias y doncellas de este palacio tienen la orden de obedecerte incluso si tu orden es la de ejecutar a alguien-yo solo pude mirarlo estupefacta.
- ¿Que?-volvió a hablar al ver que mi cara seguía con la misma expresión-algún día serás la reina, es momento de que se vayan acostumbrado a obedecer tus órdenes-dejo un beso en mi mejilla.
- ¿Entonces puedo echarla? -comente con una sonrisa.
-Puedes incluso cortarle la cabeza-me sonrió.
- ¡Hunter! -exclame mientras me dirigía hacia la salida de la habitación.
-Yo solo digo-ser río, siempre me dijo que nunca se reía, pero lo he visto reír más veces de las que lo he visto comer.
Sin más salí de la habitación y volví con Diago y la garrapata.
- ¿A qué quiere verme? -pregunto sin dejarme responder-se lo dije.
-En realidad me ha dicho que no desea verla-respondí con una sonrisa de oreja a oreja.
- ¡Mientes! -habló-Él quiere verme-siguió diciendo mientras comenzaba a avanzar por el pasillo sin hacer caso a los movimientos de Diago para que no pasará.
- ¡Guardias! -hice un pequeño grito-sáquenla de aquí inmediatamente.
-Enseguida-respondieron los dos guardias a la vez.
Ella comenzó a gritar, pero solo la ignoré, me di la vuelta y vi a Hunter apoyado en el marco de una de las habitaciones.
- ¿Qué haces aquí? -pregunte.
- ¿Crees que me hubiera perdido eso? Ni loco-se volvió a reír-pero debo decir que me ha decepcionado que no hubiera orden de ejecución-ahora la que comenzó a reír soy yo-tengo que volver, pero si necesitas cualquier cosa ya sabes dónde estoy-hablo mientras dejaba un beso en mi frente-te quiero-dijo para desaparecer por el pasillo.
"Te quiero" ¿Ha dicho que me quiere?
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