Enamorando a un Zeppeli (CeaJose)

Interrogatorio

A la mañana siguiente, todas las hermanas de Caesar lo rodearon para saber que tal habia ido todo. El rubio aun queria disfrutar de la esclusividad que el y Joseph tenia, ahora que aun nadie sabia sobre su relación. Pero ellas estaban siendo demasiado pensadas, con saber como habia ido todo, y como seguian sin recibir respuesta, asumieron que habia sido rechazado. Sofia, dispuesta ha proteger a su hermano se preparo a dirigirse ha donde el ingles para decirle ciertas palabras. El chico asustado, de lo que su hermana podria llegar ha hacerle a su novio(Enserio amo escribir novio >w<) no tuvo mas remedio que confirmar la relación. Lo que alegro a todas, y empezaron a hacerle preguntas de todo tipo. Caesar estaba mareado de toda aquella atención y no era capaz de satisfacer la curiosidad de las chicas, por suerte, alguien abrio la puerta de la habitación del chico. Aquella persona resulto ser ni mas ni menos que el castaño que iba ha la habitación del chico para pasar tiempo con el, hasta que escucho todo aquel alboroto dentro de esta, y no pudo contener su curiosidad y preocupación por si algo hubiera pasado. El italiano al reconocerlo espero lo peor por parte de sus hermanas, y como pensaba, las chicas corriendo rodearon al chico, haciendole las mismas preguntas que le habian hecho a su hermano. Joseph que esperaba todo menos eso se asusto con la rapided que las italianas lo habian rodeado.

-Dejar al pobre en paz ¿no veis como esta a un paso de que le de algo?

-Si, tienes razón. Si se muere te quedaras sin novio nada mas haber conseguido uno y no queremos eso. Sofia, Guiseppa soltarlo.- Le pidio a sus hermanas Giulia.

A pesar de todo lo ocurrido con su padre, las chicas seguían como siempre habían sido pensó Caesar. Giulia era segura, decidida y se le daba bien guiar a los demas, al contrario que su melliza Giuseppa, que era mas relajada y lo unico que le interesaba eran los chismes, pero siempre podias contar con ella para hacerte reir. Sofia era basicamente hiperactiva, no podia estar quieta ni un segundo, parecia un conejo. Y por ultimo Martina, la mas pequeña, ella era tranquila, siempre habia sido una niña adorable y obediente, pero aveces demasiado llorona y miedosa. Caesar las habia hechado mucho de menos.

- Te liberaremos ¡pero no pienses que te desaceras tan rapido de nosotras! Tenemos que asegurarnos de que estas a la altura de nuestro hermano.- Aviso Giuseppa decidida.

-¡Y que no le vas ha hacer daño!- Añadio Sofia.

Cuando todos se relajaron y volvieron a sentar la conversación continuo, sin embargo ahora de manera mas calmada.

-Nos alegramos de volver a verte Joseph, sobre todo despues de que pensaramos que estabas muerto.-Hablo, Giulia.

-Por dios ¿podemos dejar en el pasado de una vez por todas el tema del funeral?

-¡Oye, no cualquiera aparece en su propio funeral!-Replico Giuseppa.

-¡Martina casi se muere del susto!-Se rio de su hermana Sofia.

-¡Para no hacerlo! Pense que era un zombie.

-Creo que todos pensamos eso al principio.-Se unio a la conversación Caesar.

-¡Dejemos de hablar del funeral y enfoquemonos en lo importante!- Intervino Giuseppa.

-Si por favor, estoy harto de que la gente me hable sobre el funeral, podrian al menos preguntarme sobre como fue mi recuperamiento ¡pero no! Todo el rato con lo del funeral.

-Eso ahora no importa. Dinos Jojo ¿Que te gusta de nuestro Caesar'-Continuo Giuseppa.

-¿No hay manera de que nos saltemos todo esto?

-Callate Caesar, esto es muy importante, tenemos que que protegerte de los Don Juanes.-Le mando Sofia.

-Y de todos se lo dices justamente a mi. Ademas, deberia ser yo quien deberia de hacer esto con vuestras parejas.