Capitulo 11.

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Abre ella la puerta de su casa, el nuevamente ahí. Parado frente ella, ella agacha la cabeza cerrando los ojos.

A ella le había costado mucho en olvidarse de él, para que él estuviera ahí en aquel momento.

- Quiero que te vayas Martin - Catalina abre sus ojos para hacer un gesto con su mano para que se fuera - Y no quiero que vuelvas por aquí a mi casa...

Martin escucha lo que deseaba Catalina, la cual tenía la mirada aún en el suelo.

- Necesitamos hablar Catalina... - Estaba cerca de ella, con su mano levanta la barbilla de Catalina - Debemos de hablar, pequeña...

- Ahora no - Niega ella con la cabeza - Dame tiempo, para hablar - Ella le mira mientras deja que el le acaricie sus labios húmedos - Necesito tiempo...

- Yo sé lo que ahora ambos necesitamos... - El la mira aún acariciando sus labios - Y lo sabes - Después miró aquella mesa del comedor.

Se vuelven a besar apasionadamente, mientras que caminaban o intentaban caminar hacia la mesa mientras se besaban. El de una manera agresiva le rompe su camisa por mitad viendo que no tenía sujetador y agarro uno de sus pechos para apretarlo y hacer que ella jadeara sexy.

Simona llego con Juan Pablo V en la casa de manera silenciosa. Sin interrumpir a la pareja del año.

- Estoy segura amor - Le dice mientras subían las escaleras - Que finalmente terminarán juntos ellos dos.

Asiente pensando lo mismo.

El padre llegó, vio aquella escena y enojado gritó el nombre de su hija.

Ambos se separan rápidamente, poniéndose la ropa.

- ¿Que hace este pelele en esta casa? - Dice su padre con una voz alta y gruesa mirando a Martin - ¡Te prohibí y te dije Catalina que no podías juntarte con ellos, más con este pelele!

- ¡Y lo sé padre! - Le dice su hija con la cara roja de tanto llorar - Pero entiéndeme padre, necesito a Martin en mi vida.

- Catalina, ¡SI TE LO DIGO ES POR ALGO! - Exclamo su padre - ¿TU CREES QUE LE HACES FALTA? ¡DATE CUENTA DE QUE MARTIN ESTÁ CASADO Y DE SER PADRE!

- Ya padre, ¡TAMPOCO QUIERO QUE ME DS SERMONES DE LA VIDA!

Martin se va corriendo de aquella casa para irse. No iba a soportar que se metieran en su vida.

- ¡TIENES ESTRICTAMENTE PROHIBIDO SALIR A LA CALLE! - Su padre llevó a su hija a su habitación y la cierra con llave por fuera.

Catalina miraba por la ventana la calle, la luz.

***
Llevaba ya 4 meses encerrada en su habitación sin salir, sin ver la luz. Solo comía y dormía.

- ¡Necesitamos salvar a Catalina, chicos! - Dice Nath preocupada por su amiga - Su padre la está manipulando a su puta manera.

- ¿Por qué no podemos ser felices sin Catalina? - Martin se enoja teniendo a su preciosa bebe en sus brazos - ¡Catalina ya no es tan importante!

- ¡MARTIN! - Exclamaron todos.

Por un momento pensaba que me iba a morir, pensaba Catalina. Quería salir, ver otra vez la luz, a sus amigos y encontrar el amor.

- ¡PAPA! ¡PAPA! - Grita su hija desde la habitación llorando - ¡DÉJAME SALIR, POR FAVOR!

Su padre no le respondía, seguía trabajando. Su ventana estaba haciendo pequeños ruidos suaves, ella se quitó las lágrimas de su cara y se acerca a la ventana. Ve a sus amigos, ahí parados. "Te hemos venido a rescatar, Catalina. Así que tranquila."

La esperanza de ser rescatada era muy baja pero tenía la ilusión de que así fuera en esa ocasión.

***

Horas más tarde, Catalina vio después de 4 meses la luz del día, el aire que corría, las nubes blancas del día.

- Que bonita es la bebe - Respondió ella con sinceridad - Se parece a tí Martin... ¡Felicidades a ambos! - Ella los felicita con mucha honestidad.

Martin solo le sonríe falsamente a Catalina y se marcha con Tiara y su esposa Carlota a casa.

Catalina abraza a su amiga Simona y a Nath al verlas de nuevo. Saludo también al resto con varios abrazos y sonrisas. Gabriel le regalo varias flores a Catalina al volverla a ver, le abraza sonriendo.

- Chicos, yo quiero empezar de cero esta vez - Les comentó Catalina - Quiero empezar de cero con mi vida, pasar pagina. ¡No voy a volver con Martin! - Les mira - Ya no siento nada por él, gracias a la ayuda también de mi padre.

Ella se marcha, necesitaba sentirse aquel día libre de todo. Quería conocerse más aún así misma.

Todos tenemos dos vidas. La segunda comienza cuando nos damos cuenta de que solo tenemos una. Es mejor cruzar la línea y sufrir las consecuencias que mirar fijamente la línea durante el resto de tu vida.

- No entiendo tu actitud, Martin - Ella se queda quita mientras se pone sus manos en la chaqueta ya que tenía frío - ¿Por qué me sigues?

- ¡Quiero que me expliques por qué le tienes tanto odio a mi esposa! - Responde y ella arquea su ceja, se ríe al ver que pensaba que le tenia malas.

- Mira Martin, no sé que te habrá contado. - Ella se rasca la frente y sigue caminando - Pero no la odio, es bonita.

Martin la sigue, mirándole como un depravado su culo bien formado. Martin se pone a su lado dándole su gorro.

- Gracias.

Martin tenia que dejar que fuera feliz. Ella debía de ser feliz y si no lo era con él quería que fuera feliz con otra persona. Pero nunca podría olvidarse de ella.

- Yo sé que te tengo que dejar que seas feliz pero no puedo verte con otra persona que no sea yo... - La para en el medio de la calle - Me pongo celoso cada vez que te veo con un chico Catalina - Ella traga saliva sin saber que decir, mientras lo mira - Quiero que seas feliz Catalina.

- Entonces déjame ir, por favor - Cierra ella sus ojos y se le cae varias lágrimas - Solo déjame ir...

- No puedo Catalina - La vuelve a besar a pesar de que tenía esposa y una hija.

Ella se vuelve a enloquecer al sentir sus labios en los suyos. Se movían al compás, pero ella se separa tristemente.

- No puedo Martin, no puedo - niega ella con una tristeza y se marcha corriendo.

El fue detrás de ella para poder calmarla y abrazarla.

- Si podemos Catalina - Poniendo bien su pelo detrás de sus orejas y acomoda sus manos en sus mejillas - Podemos hacerlo, pero no hacernos daño como nos hemos hecho Catalina - Le vuelvo a besar de nuevo.

Catalina estaba sonrojada, pero no sabía si ilusionarse o no. Le daba miedo de que la volviera a lastimar.

- Siempre ha sido ella, ¿verdad? - Pregunta Carlota sin ninguna expresión en su voz.

Ellos se separaron, mientras Martin se sentía culpable pero tenía que decirle la verdad.

- Si, siempre ha sido ella, Carlota - Lo vuelve a confesar - Siempre ha sido ella... Pero... - Miró a Catalina con ilusión pero debía de dejarla ir - Carlota, quiero estar ciento por ciento a ti - Catalina había entendido en ese momento que la estaba dejando libre de irse y enamorarse de otra persona, conocer a mas personas - Yo lo siento Catalina...

Catalina sonríe o intenta sonreír y asiente yéndose. Empezó a llorar nuevamente en silencio y se encuentra con Simona para abrazarla fuertemente y llevarla a casa.

- Es lo mejor para ambos, Catalina - Comentaba Isaza, intentando animarla - Es mejor que estén separados y sean amigos o lo intenten...

- Pero es que yo realmente si lo amo, Isaza - Estaba sentada en el sofá con su cabeza en sus piernas y llorando de dolor - Me duele que Martin no haya luchado por nuestro amor...

- Pero veras que con el tiempo todo esto se irá y podrás seguir adelante - Simón le dice mientras se sienta a su lado - Ambos se aman, el destino los volverá a unir en un futuro.

ꜱɪᴇᴍᴘʀᴇ ᴀ ꜱɪᴅᴏ ᴇʟʟᴀ [ᴍᴀʀᴛɪɴ ᴠᴀʀɢᴀꜱ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora