Secretos en Colina Blanca

Capítulo 14: Debe haber una razón más.

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"Es imposible vivir sin fracasar en algo, a menos que vivas tan cautelosamente que bien podrías no haber vivido en absoluto, en cuyo caso, fracasas por defecto".

J.K. Rowling.

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En algún lugar del centro de Portland:

Apoyando los brazos en el borde de su escritorio, Seth corrió la mirada por todos los monitores conectados a sus diversos CPU, algunos mostraban mapas, otros artículos de periódico, páginas online, artículos médicos, expedientes y páginas de redes sociales, su mirada las estudió a todas con suma atención hasta que, suspirando, se centró en el monitor del centro en donde tenía abierto un documento que hablaba de cirugías con ciberknife... Él había descubierto el lugar en donde Iva se había realizado la cirugía pero... ¿por qué ella no aparecía en la tienda en los últimos días...?

—No tengo su número... —murmuró estirándose el cuello de la camiseta y mirando ahora uno de los monitores que mostraban la plataforma de Facebook—, y ella tampoco parece usar las redes sociales con frecuencia...

Él abrió una pestaña de chat en Messenger con Iva y adjuntó un archivo con la dirección del hospital en donde él creía que ella había sido operada, no obstante, antes de hacer algo más, terminó por borrar el documento, resoplando, alzó las manos y se frotó el rostro con frustración... Y mientras él se quejada resintiendo una punzada en la cabeza, por la puerta entreabierta a su espalda, Edward McNamara le miró fijamente hasta que, conteniendo el aliento, retrocedió cerrando la puerta tras él. Con eso caminó hasta la sala y se sentó en uno de los sillones, suspirando, sacó el teléfono y abrió uno de los videos que había logrado conseguir... en aquel apareció a la grabación de la CCTV de la tienda de conveniencia que Seth solía frecuentar, y en ella aparecía aquel muchacho en compañía de una mujer de negro cabello. Un segundo después la puerta del dormitorio se abrió y, mientras él bajaba el artefacto, Seth se asomó al salón.

—Oye, terminé de hacer lo que me pediste, ¿puedo ir a comer fideos instantáneos?

—Solo vete a la cama.

—Tengo un poco de hambre... —repuso Seth bajando la mirada. Edward se descruzó de piernas y se inclinó hacia adelante mirándole fijamente, acto seguido el muchacho bajó una vez más la mirada y retrocedió un paso—. Bueno, está bien... —Seth se giró hacia la puerta y abrió unos centímetros, pero antes de ingresar, volvió a mirar a su cuidador—. Esto... acerca de los sueños lúcidos... —Edward se giró hacia él en el acto con el ceño fruncido—. ¿No me hablaste de ellos o sí?

—¿Qué...?

—Resulta que sé cómo hacer que la gente tenga sueños lúcidos...

—Solo entra... —dijo McNamara respirando hondo.

—Ya entendí... —respondió Seth volviendo al interior de su dormitorio y lugar de trabajo.

Ya habiéndose quedado solo, Edward comenzó a respirar más rápido, su corazón latía con fuerza y sus manos temblaban, algo que muy pronto se extendió por todo su cuerpo en pequeños temblores de terror... con un sudor frío corriendo por su espina, volvió la mirada al frente tragando saliva con dificultad... ¿Seth sabía cómo tener sueños lúcidos...? ¿Cómo era eso posible...? ¿Acaso... la barrera se estaba rompiendo...?

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