Más allá de las estrellas

8º CAPÍTULO

Libra estaba un poco decaída, su extraño amigo alienígena había empacando sus cosas para marcharse, con Casui, a su planeta natal.

-Te extrañaré compañera- le había dicho con lenguaje de señas el cazador.

-Yo también- le contestó ella -espero que todo te vaya bien y tengas cacerías interesantes- en apenas un mes y medio, Libra había aprendido casi a la perfección ese lenguaje. Según Alley, era una superdotada y esperaba que aprendiese también otros idiomas.

-¿Existen más alienígenas?- le preguntó Libra con entusiasmo.

-Si claro, aunque no los llamamos alienígenas en sí- le informó la joven exploradora - hay muchas razas diferentes, yo obvio no las conozco todas en persona- Alley estaba mientras tanto tomándose un zumo de bayas que habían recolectado.

Alley estaba pensativa en esos momentos, Libra se dio cuenta de ello -¿Oye estás bien?-

-Si, es solo que estaba recordando lo que Casui me dijo antes de que se marcharan-

-¿Qué te comentó?- interrogó Libra.

-Me dijo que esperaba que fuera con ellos ya que necesitaban gente fuerte en su planeta, y le pregunté a qué se debía- hablaba la chica pelirroja -ya que era raro que un yautja acepte a un humano entre ellos-

-¿Y?- Libra se acercó más a su compañera para poder escucharla.

-Obviamente me negué, o sea, era un honor para mi claro pero necesito más experiencia y bueno luego ella me dijo que había una amenaza ahí fuera la cual no podían identificar...-

-Eso... es extraño- opinó la otra chica -¿Te dieron más detalles?-

-Expresó miedo y es muy raro que un yautja lo tenga, pero parece ser que su sociedad y posiblemente otras muchas están siendo amenazadas por la misma entidad...-

-Tu también te ves algo inquieta por ello- Notó Libra -¿Tienes una idea de a lo que se referían?-

-Entre nosotros, los nómadas hulú, tenemos una serie de leyendas y creencias- empezó a narrar Alley -Casui habló de un ser de un solo ojo que hacía que todos a su alrededor enloquecieran y murieran casi al instante, eso me recordó a las leyendas de cíclopes. Pero además dijo que muchos de los suyos tuvieron pesadillas con ese ser... lo que implicaba que estaba cerca de su mundo-

-¿Cómo de cerca?- Libra estaba intrigada con aquella historia, ella también sabía lo que era un cíclope pero esas leyendas antiguas no eran más que historias de fantasía.

-Captaron una nave a unos 1400 km de su planeta, no pudieron identificarla- dijo Alley, añadiendo con cierto terror -nunca habían visto una nave igual. Y antes de que pudieran interceptarla, esta desapareció a la velocidad de la luz-

Libra pensó en ello unos instantes: si eso hubiera ocurrido en la Tierra habría creado un gran revuelo y temor entre los humanos -los estaban acechando desde el espacio- concluyó la chica.

-Exacto- confirmó Alley -pronto marcharemos a un enclave humano, allí intentaré saber más sobre esto que me dijeron, debemos estar alerta e informar luego a nuestra nave nodriza- terminó de tomarse el batido y posó el vaso en la pequeña mesita que había a su lado.

Fuera de la nave, estaba Vaum haciendo ejercicio de brazos y espalda. Estaba sin casco, ya que se había acostumbrado muy bien a la gran cantidad de oxígeno de la atmósfera.

Tras realizar una serie de flexiones, se incorporó, limpió su sudor y observó los terribles estragos que había dejado el incendio.

Tras el ataque de los piratas, el fuego continuó avanzando hasta que, debido al cambio repentino de temperatura, hizo que se formaran fuertes lluvias, y así fue cómo paró el incendio.