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𝐓𝐇𝐄 𝐄𝐍𝐃.
Amaba a Harriet Blair Lynn, estaba enamorado de ella. Se dio cuenta de aquello mientras se preparaba para acabar con la vida del Raptor. Pensó que lo que sentía por ella era una simple atracción de niños o un sentido normal de protección por el secuestro, pero no era así.
Jamás pensó que llegaría a vivir una situación así con ella, donde no sabia si estaba viva o si estaba muerta, o si el viviría para decirle que la amaba. Ella era la persona más audaz y soñadora que había conocido, y si los dos salían juntos de ahí, sabia que no se iba a separar de ella nunca, que serían ellos dos para siempre.
Nunca sería el mismo Finney Blake de antes. No, porque ahora sabia lo que era amar. Habían momentos en la vida donde se tenía que ser valiente y dejar todo el miedo atrás. Habían momentos donde todo lo que se ama es puesto a prueba, y este es el momento de Finney Blake. Estaba sangrando y no solo físicamente, en aquel momento, su corazón sangraba.
"¿Dónde estás ahora?"
En ese momento, las luces se encendieron, el ya venía. Su corazón comenzó a latir más fuerte que nunca, y sus puños se cerraron. En aquel momento, recordó la posición de pelea que había visto a Robin tantas veces hacer cuando estaba con vida, y la imitó. Se puso en posición de defensa, pero para su sorpresa un sujeto completamente se asomó por la ventana, claramente dudoso.
—No puede ser.—Abrió su boca con sorpresa viendo los alrededores.—Sabía que me estaba ocultando algo aquí abajo, pero no sabía que ese algo eras tú.
—Por favor, ayuda.—Intentó aprovechar la oportunidad, pues no sabia si era un hombre malo o bueno.—Tienes que llamar a mi padre o a mi hermana.
—Tranquilo, no te preocupes, no está aquí. Está trabajando.—El hombre hablaba con rapidez.—Soy Max, solo cálmate...Con razón estaba nervioso en la mañana, ¿Quieres saber la historia sobre cómo te encontré?
Negó con la cabeza tragando saliva, en ese momento, solo quería ver la luz del día de nuevo y salir lo más rápido posible. Quedarse un minuto más no estaba entre sus opciones.
—No, no, no.
—Tu tranquilo, puedo contartelo mucho más tard...— De repente, el Raptor se apareció por las escaleras detrás de Max y enterró un hacha en su cabeza.
Finney soltó un grito, retrocediendo al ver la sangre correr de la cabeza de Max, y como la vida abandonaba sus ojos para luego caer al suelo como si no fuese más que un muñeco. Hizo contacto visual con el Raptor, dándose cuenta como sus ojos brillaban, él era espeluznante.
—¿Ves lo que me hiciste hacer?—Entró a la habitación a paso lento.—Maté a mi hermano por ti.
