救い;; ❝No importa si la muerte los separa, seguiremos buscando aquella Redención que nos salvará.❞
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THE BLACK PHONE FANFIC.
__________ Harrison es conocida como la chica rara de la escuela, la gente a veces la mir...
❝—Vivir, Existir, Morir. Tres simples palabras que para algunos son solo eso, para nosotros eran caminos distintos❞
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Pronto llegó a mejorar, para por fin salir de las 4 paredes que nunca puro llegar a llamar hogar, para dirigirse a donde sí pertenecía, con él.
Fue con su trabajador, más ya no era eso, era su amigo, no. Era alguien que podía llamar "papá" y no le diría nada más que llevarla a el lugar que quisiese, aunque no se sentiría sola, ya que ahí estaba para cuidarla.
Visitaron varias tiendas en donde la joven se sentía cada vez más desanimada. Quería que el regalo para esas fiestas fuese perfecto, porque quería expresa de otra forma la gratitud que tenía con ambas personas.
De pronto, pasaron por una tienda particular, que ofrecía figuras en miniatura. A ella le llamó la atención; entró a la tienda seguida por el mayor, haciendo sonar una campana que le provocó un susto.
- Oh, Bienvenidos, ¿te asustó la campana, querida?. -preguntó la mujer de tercera edad detrás del mostrador.
La nombrada negó levemente mientras jugaba con sus manos. Levantó su mirada del suelo, ya que una figura captó su atención casi de inmediato.
- ¿Te gusta?, Mi hijo tardó varias semanas en terminarla, es su creación más reciente.
La Harrison se acercó a la repisa para mirar con más detalle los trazos que ofrecía la escultura, y repentinamente recordó que a el chico le gustaban mucho ese tipo de cosas.
- ¿Cuál es el precio?. -preguntó ladeando la cabeza aún examinándola.
- 200 dólares.
A Ryan casi le da un infarto, sin embargo, al parecer ella se había quedado hipnotizada, así que mientras su mirada se mantenía en aquello, sacó su cartera y la extendió a la mujer.
- En una bolsa, por favor.
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La nevada de esa noche era delicada, los caminos tenían ese blanco que a los niños les gustaba, pues podían hacer bolas de nieve y jugar con ellas.
Para la chica, significaba algunas enfermedades. Pero le parecía bonito el ambiente que generaba junto con las farolas de la calle.
