¡déjame en paz donghyuck! - nohyuck.

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—¿hijo, podemos hablar?—Donghyuck le prestó toda su atención mientras comía de los panques que le había preparado su padre Doyoung.

Notó que era algo importante cuándo su padre comezó a acariciar sus dedos con algo de fuerza, sólo lo hacía cuándo estaba nervioso.

Temió de lo peor, ¿acaso jaehyun había hecho algo malo? ¿otra vez él se metió en problemas?, ya había tenido suficiente éstos días y no quería más problemas.

—Claro.. ¿Sucede algo?—Dejó su comida a un lado y le prestó toda su atención a su padre.

—Tú papá quiere volver a verte... Ya sabes, quiere volver a estar presente en tú vida.—Era algo que él ya sabía, sin embargo aún no lo había pensado o no le había dado mucha importancia.—La decisión sólo la puedes tomar tú.—

¿Tener a su papá nuevamente en su vida?. No negaría que había fantaseado mucho con eso, con tener a su papá nuevamente con él queriéndolo y apoyándolo.

—Necesito tiempo para pensarlo, cuándo tenga la respuesta yo mismo hablaré con él.—Tomó sus cosas rápido. Había perdido el apetito.

Caminó hasta la escuela pensando en lo que le había dicho su padre doyoung.
Su cabeza comezó a llenarse de distintos escenarios y cada vez estaba muchísimo más confundido.

Cuándo sucedió eso, cuándo Johnny se fue todo sucedió tan rápido. Era tan sólo un niño cuándo su padre ya no apreció más en su casa, cuándo dejó de ir a buscarlo, incluso hubo un tiempo en el que no recordaba cómo se veía su propio padre.
Era pequeño y simplemente no entendía.

Los recuerdos con él eran escasos pero trataba de recodarlos cómo lindos momentos. Lindos momentos cuándo eran una familia.

—¡Papi!—Un pequeño Donghyuck de tan solo cuatro años de edad esperaba a su padre pacientemente que volviera del trabajo.

En su casa había un gran ventanal con vista a la calle, ahí tenía muchas cosas y a la misma hora se sentaba a esperar a su padre que llegaba del trabajo.
Normalmente se sentaba a mirar por si llegaba el auto de johnny con su peluche de osito favorito y algún caramelo que seguramente se había robado de la cocina.

Cuándo johnny pasó por la puerta miró a su hijo con una gran sonrisa y lo tomó entre sus brazos para poder besar su rostro repetidas veces.

El y su padre eran muy unidos, jugaban mucho tiempo y tomaban sus siestas de la tarde juntos en el sofá. Johnny encontraba la manera de que jamás se aburriera.

Ya era tarde y en toda la casa se podía oler la comida que había preparado su papi doyoung. La radio estaba sonando con las canciones favoritas de la familia y era un ambiente muy agradable.

—Llegaste.—Doyoung apreció por el pasillo y se acercó hasta su esposo para saludarlo con un beso en los labios.

—Te juro que tengo ganas de desparecer, el jefe ha esta insoportable.—Sujetó con un brazo a su hijo mientras que con el otro sujetaba de la cintura a doyoung.

—Ow, pobre bebé.—Doyoung sonrío y dejó un beso en su mejilla.

—¡Pobre papi!—El morenito copió la acción de su padre y dejó un besito en la mejilla de su padre johnny.

Sus amigos lo miraban preocupado, había estado extrañamente callado y en las clases había estado mirando la pared fijamente.

—A Donghyuck le pasa algo, estoy seguro que si le preguntamos de todas formas no nos dirá nada.—Jisung llegó con su almuerzo a la mesa y comezó a devorar éste mismo.

—Es verdad... Ha estado desanimado éstos días, me preocupa.—Renjun se quejó y miró cómo Mark llegaba junto con Donghyuck.

Algo hizo click en su cabeza y sonrió en grande, moviendo fuerte a Jisung haciéndo que se le caiga la comida de los palillos.

—¡Hola Hyuck!—Lo saludo con una sonrisa grande y lo abrazó fuerte.

—Hola junnie, ¿Sucede algo?—Dijo con una sonrisa pequeña y comezó a comer lento.

—Hoy voy a ir con Jaemin a un karaoke, ¿quieren ir con nosotros?—Preguntó, casi rogando a sus amigos.

—¿No les estaríamos interrumpiendo su momento?—Donghyuck miró confundido a su amigo.

—Pues yo acepto.—Se apresuró en decir Mark y Jisung sólo asintió con una sonrisa.