CAPITULO 4

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Desde que comenzó nuestra extraña "relación falsa" las cosas se hicieron distintas a como estaba acostumbrada antes, cambió mi vida por completo desde ese momento en el que le hice esa estúpida propuesta. Era una persona tan terca, que a fuerza quería conseguir  que quería solo porque creía que podía, porque fue la forma en la que me criaron y en ese momento solo tenía 14 años llegando a los 15. Era una niña que creía que tendría todo siempre y que nadie la dañaría, mi padre me crio enseñándome a ver la vida de una forma dicotómica. Lo cual significa que solo veía el mundo de dos formas, o ganas o pierdes, o eres intimidado o te intimidan, o vives o mueres, o das miedo o te da miedo, o dañas o te dañan, o matas o te matan.

Era el concepto que tenía de ver las cosas y obviamente no iba a dejar que me intimidarán o ser la débil, por eso a fuerza debía conseguir lo que quería, demostrarle a Jacob que no tendría poder sobre mí como el que tenía sobre otras, pude simplemente dejar todo y nunca acercarme a él. Pude simplemente mirarlo desde lejos o olvidarlo y jamás haber iniciado esto, pero en el momento en el que Camila me dijo que Jacob sería capaz de engañarme a mí, no lo permití porque en ese momento no haber hecho nada le daría la razón y con eso todos podrían decir que Jacob Blaze sería capaz de jugar con todas incluso conmigo, y yo no podía dejar que pensarán que él podría hacerme eso, por eso hice la apuesta. Porque en ese momento estaba entre que me importaban y no me importaba lo que me dijeran, yo sabía que el no podría conmigo -o al menos eso creía al inicio- necesitaba demostrarle al resto que el no podía conmigo. Que conmigo sería diferente y no sería capaz de jugar conmigo. Al menos pretender eso, luego yo terminaría con el y lo probaría que conmigo nadie sería capaz de meterse.

Oh pobre pequeña y maldita Kassy de 14 años, no podías controlar a todos.

Tampoco contaba con el hecho de que a pesar de que todos supieran lo mierda que era Jacob tenía cientos de admiradoras las cuales querían estar con el a pesar de todo lo que se decía de él. Y que no dudaron en llamarme zorra en el momento que supieron que yo estaba con él.

Sin contar también el hecho de que nuestros padres eran grandes rivales en sus asuntos laborales y saber que ambos estábamos en una relación los mataría o nos matarían, al menos el mío si lo haría.

—Me agrada un poco la idea de todo esto, ya necesitaba algo de diversión en mi vida— expresó el recostado en los sillones del salón donde estábamos él y yo.

—Algo muy importante, tus amigos no deben saber que esto es falso— advertí —Todos deben creer que somos una pareja y los únicos que sabremos que es falso seremos tu y yo ¿entendiste?

—Entonces los tuyos tampoco.

—Por supuesto— mentí.

—Muy bien.

—Verás que será divertido.

—Tú eres divertida. Está empezando a aburrirme este lugar, salgamos de aquí a presumir nuestra increíble nueva relación donde debemos fingir que nos amamos, pero la realidad es que siento más curiosidad por ti que amor.

—El sentimiento de curiosidad es mutuo, salgamos de aquí.

Y sin más salimos del salón, el tomo mi mano y caminamos así obteniendo la mirada de todos sobre nosotros como si fuéramos los putos reyes de ese lugar, ambos traíamos una increíble sonrisa que mostraba superioridad ante cualquiera que nos viera.

Y la verdad es que me sentía tan bien en ese momento, había conseguido lo que quería y al ver la mirada de sorpresa y enojo de Camila era mi mayor felicidad, Kassy Tomber saliéndose con la suya una vez más.

Pintura Amarilla Donde viven las historias. Descúbrelo ahora