Hace unos años atrás, a finales del año 2012, se organizó por primera vez un gran evento temático en uno de los centros comerciales más concurridos de la ciudad. El evento hacía honor a los mejores animes, películas y series producidos hasta el momento; por lo que muchos jóvenes se vieron sumamente entusiasmados de poder demostrar su afición. Algunos iban disfrazados de sus personajes favoritos, otros fueron a tomar fotos y los demás fueron principalmente a curiosear la novedad del momento ya que, usualmente, este tipo de festividades se realizaban en espacios poco concurridos y con entradas a un muy alto precio.
Dichos eventos, se caracterizan por sus concursos espontáneos de karaoke, disfraces y baile que se demostraban en un gran escenario. A los cuales, muchas bandas se sumaron al espectáculo para entretenimiento del público, quienes tocaban las canciones más conocidas de las múltiples producciones homenajeadas. Por primera vez, la prensa cubría todo lo que acontecía.
Entre esos jóvenes entusiastas, se encontraba Roxana Albornoz de 20 años, una asidua fanática de los animes de romance; así como de la música japonesa en general. Desde que se anunció la festividad a desarrollarse, insistió a su pareja con quien llevaba dos años de novios de ir el día de la inauguración. Logró convencerlo tras muchas negativas de su parte.
Nada más llegar, ella se sentía como una niña que visitaba una feria por primera vez. Recorrió todos los stands y no dudó en invitar a su novio a probar todos y cada uno de los exquisitos bocadillos exóticos que se exhibían. Asimismo, le rogó que le comprase algunos artículos temáticos de su serie favorita, los cuales ella llevó con orgullo, entre ellos estaba un cuaderno con un gran dibujo coloreado al frente, dos collares con un anillo colgante para cada quien y un divertido peluche de gato.
Para cuando terminaron de recorrer todos los puestos, decidieron descansar en uno donde servían bebidas y jugos. Se sentaron de lado a lado en la barra del mismo, hicieron un pedido y mientras esperaban, su novio pidió un momento para ir al baño.
Fue en ese momento, donde un muchacho vestido de camisa a cuadros, lentes oscuros, mitones de cuero y pantalones rasgados se sentó al lado de Roxana. Se quitó los lentes y pidió el mismo jugo que pidió el novio minutos antes. Al notar la presencia de la joven, no dudó en comenzar a hablarle.
—Hola amiga —le dijo sonriente.
—Ah hola —le dijo ella un tanto nerviosa mirando a ambos lados.
—Disculpa, ¿nos hemos visto antes, en otro evento? te me haces conocida.
—No, no lo creo, es la primera vez que vengo.
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Tal Vez (Libro 1): Esto Nunca Pasó - [COMPLETA]
Romance¿Qué pueden tener en común una historia de desamor y una de amor? ¿Qué misterio los une? Estas son las preguntas a responder con estas dos historias donde lo obvio se deja de lado. Un amor que termina de la peor manera y otro que empieza de la mejor...