heroes

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(...)

Queridos Hiro y tía CAss, lamento mucho esta forma de despedirme, pero la verdad es que Ya no pUedo soportarlo mas, me siento tan mal aquí, no sabía cómo enfrentarme a tantas cosas, pensé que poDría pero en reAlidad solo tengo Miedo, quiErO que sepan que, estoy contento de conoceRlos, y también QUE eSTaré bien, volveré A mi país junto con Marco, gracias por todo este tiempo.

...

Esa mañana las cosas se sentían extrañas, un fuerte dolor de cabeza, además de una presión en su pecho que apenas le dejaba respirar lo suficiente como para seguir vivo.
Llegó a su universidad, aún era bastante temprano pero los laboratorios estaban abiertos, solo tenía que esperar un poco hasta que llegara su amiga, entro y caminó directo hasta su taller, era como en un principio, solo llegaba a encerraba esperando intentando planear algo nuevo o adelantar sus proyectos, sin embargo su cabeza estaba echa un laberinto, y su angustia lo hacía caminar de un lado al otro revisando a cada rato la hora, esperando simples esperando a que la nipona llegara, claro no había pasado tanto tiempo desde que llegó pero sentía aquella persistente sensación que lo carcome.

Después de ida y vuelta en su laboratorio finalmente se dejó caer sobre su silla, recostando su cabeza por la parte superior, había pasado tanto tiempo desde la última vez que se desvelo, ahora por su condición lo único que hacía era dormir, sus pies no pudieron evitar hacer pequeños movimientos que lo hacían mecerse lentamente, dejando caer su fatiga sobre sus hombros y párpados. Poco a poco sus ojos se fueron cerraron en lentos pestañeos.

Pero solo fue eso, solo un pestañeo, pues tan pronto se sintió dormido un fuerte escándalo se escucho fuera de su laboratorio, solo abrió la puerta y encontró un pequeño cúmulo de gente que rodeaba a dos personas, entre esas una voz que conocía muy bien.

— como te atreves a hacerle eso a Miguel!

— no se de qué me estás hablando!!

Eran hope y Hikari...

Hiro de inmediato se acerco, mirando como la chica sacudía con fuerza al muchacho.

— Hiro que haces— el nipón aparto a la chica tomando su lugar, ahora siendo el, el sujetaba al castaño de su camisa

— que le hiciste a Miguel!? Donde está!?— grito tan fuerte, que dejó pasmados a todos a su alrededor, de echo su grito había intimidado más hope que la apenas fuerza que tenía el nipón en ese momento.

— yo..

— hiro..— intervino Hikari— que le pasó a Miguel?

— quiero que el me lo responda..- respondía con una voz de furia sin mirar a su amiga, el estaba mas concentrado en mirar a la escoria frente a el

— oye relajante amigo, yo no sé de qué me están hablando los dos, yo no he visto a Miguel en días, es más está es la primera vez que vengo en la semana— respondía algo torpe pero seguro de sus palabras

— mentira, estoy segura de que mandaste auno de tu amigos a jugarle esa broma tan pesada

— broma?— respondieron ambos alfas en unísono mirando extrañados a la chica

— si.. la broma, lo dejaron en ridículo..

— de que hablas Hikari?— pregunto aún más extrañado el mayor.

— no te hagas el que no sabes— respondió enfadada.

— no se de que me están hablando! De verdad esta es la primera vez que vengo en esa semana!

— hikari que le hicieron?..

— bueno.. al parecer un chico lo invito a comer y hablar, durante el almuerzo, de pronto este chico lo beso y de la nada salió una chica armando un escándalo diciendo que Miguel había besado a su novio.. ella lo golpeó, es uno de tus amigos de eso estoy segura

el niño del cafeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora