Flufftober 2021 [Henray]

#9 Extra: Compras juntos.

Ambientado en el universo de Henry Danger, pero no apegado al canon de la serie. Henry y Ray no tienen poderes, Capitán Man y Kid Danger no existen.

One-shot simultáneo con el día 23 titulado: Mudanza.

Relación Adulto/Joven Adulto.

Henry: 19años

Ray: 35años

Lo que más Henry amaba de vivir con Ray, además de pasar más tiempo juntos y tener un lugar solo para ellos; era hacer las compras.

Henry amaba ir al supermercado con Ray, pasear por los pasillos llenos de comida, decidiendo qué llevar para su hogar. Más que salir al cine o ir a un restaurante, Henry gustaba de lo más simple.

Y lo había vuelto una tradición, siempre hacían las compras del mes juntos. Después de un día agotador, un viernes por la noche, o inclusive, un domingo por la tarde; Henry siempre estaba dispuesto a realizar las compras con su novio, se podía decir que era una de sus actividades favoritas, por muy raro que se escuchara. Por lo general, la gente evitaba las compras, les resultaban tediosas, pero Henry las amaba con locura.

Y justo ahí se encontraba, después de una larga semana de clases para él y de trabajo para Ray, finalmente podían relajarse en la comodidad de su casa, habían decidido tener un fin de semana tranquilo, pero antes, tenían que ir a recargar la alacena de su cocina.

Henry empujaba el carrito por el pasillo, mirando los anaqueles de comida: iba tranquilo y en silencio, escuchando la suave música que se escuchaba a lo lejos en el lugar. Metía algunas cosas en el carrito, sin pensarlo mucho. Ya conocía a su novio, sabía lo que le gustaba.

Y como si este pudiera leyera su mente, de pronto apareció por el pasillo, sosteniendo una canasta llena de productos para el cabello, Henry dejó escapar una risita, solo en eso, Henry no se metía. Ray era un maniático con su cabello y solo él sabía elegir sus productos.

Lo miro venir con una sonrisa satisfactoria de la cual se contagió.

—Muy bien, ya tengo todo lo que necesito —comentó sin dejar de sonreír, mirando entre Henry y la canasta.

Henry volvió a reírse antes de tomar la canasta colgando del antebrazo de Ray.

— Genial, yo lo pagaré —metió la canasta en el carrito antes de empujarlo y continuar con sus compras.

Ray miro a Henry y sonrió con ternura, luego lo siguió, colocándose a su lado.

—Sabes que no tienes que hacer eso, ¿verdad?

—Tengo —afirmó Henry —desde que me mude contigo no me has dejado pagar las compras, ¡ni siquiera me dejas pagar la renta! —exclamó, pero no estaba enojado.

Ray se rio un poco, negando con su cabeza.

—No tienes que pagar nada, es mi departamento.

—Pero vivo contigo y no me gusta vivir gratis —reclamo, frunciendo levemente el ceño — además, sabes que gano mi propio dinero, puedo pagar por la comida y la renta sin problemas—sonrió victorioso antes de concentrarse de nuevo en los estantes frente a él.

Ray le sonrió a su joven novio, feliz de verlo tan orgulloso de ganar su propio dinero. Él no tenía problema en pagar por todo, incluso por lo que Henry le pidiera, pero si el rubio quería gastar su dinero, entonces, lo dejaría.

Lo siguió de nuevo cuando se percató de que se alejaba y se puso frente al carrito para evitar que se alejara más.

— Está bien, hagamos esto: tú pagas las compras de este mes y yo pago la renta. El próximo mes, cambiamos ¿qué dices?

Henry sonrió, feliz por la propuesta y levemente asintió.

—Me parece perfecto —exclamó demasiado alegre. Ray se contagió de esa actitud y le regaló una sonrisa y una pequeña risa.

Después continuaron haciendo las compras, juntos elegían y debatían sobre que llevar; puede que pasarán casi toda la tarde en el super, pero eso no les importó, para ellos, hacer las compras era como ir a una cita, les gustaba y no lo cambiarían por nada.