El alfa "Perfecto" - [HaruKyu]

Capítulo 15: Una "cita" arruinada 2/2

Haruto estimaba mucho a la familia de Junkyu, realmente lo hacía y adoraba a todos, pero este día realmente sentía que lo estaban haciendo a propósito. Ni siquiera dejaron que platicar a con él durante el día de campo que había preparado para él. A Junkyu le preocupaba que su familia pudiera preocuparse si no contestaba, así que simplemente lo hacía y se disculpa a con Haruto, quien tampoco le decía nada por temor a que el otro se molestara o tener problemas con los padres de Junkyu aún cuando le costó tanto trabajo que lo dejaran viajar con él.

- De verdad lo siento, era mi hermana Lisa. - dijo Junkyu avergonzado mientras tomaba asiento frente a él. Ahora toda la comida estaba fría.

- Está bien, no te preocupes. - respondió con una sonrisa. - Deberíamos recoger esto y comprar algo. La comida se enfrió.

- No... Está bien... - Junkyu detuvo la acción del otro. - de todas maneras el té también se toma frío, ¿no?

- Este té no. - respondió el otro empezando a guardar lo demás.

Junkyu sobó su brazo sintiéndose sumamente culpable. Haruto parecía enojado y lo entendía.

- Déjame ayudarte... - Junkyu tomó los platos, los cuales le fueron arrebatados casi al instante.

- Yo lo hago.

Haruto empezó a guardar todo por su cuenta ignorando por completo la presencia del otro.

- Vámonos.

- ¿A dónde vamos? - preguntó levantándose de su lugar. - Tengo mucha hambre. - dijo con una pequeña sonrisa intentando cambiarle el ánimo al japonés.

- No la tendrías si tu familia no se la hubiera pasado interrumpiendo. - respondió el otro.

Junkyu borró su sonrisa con lo dicho.

- Conozco un lugar no muy lejos de aquí. - agregó posteriormente.

- ¿Y qué comeremos?

- No sé qué vayas a querer.

- Ammm... ¿Qué me recomiendas tú? - preguntó nuevamente.

- No lo sé, Junkyu. No voy a elegir todo por ti.

El omega asintió sintiéndose incómodo. Sintió nuevamente su celular vibrar, algo que no pasó desapercibido por el alfa.

- ¿No vas a contestar? Deben estar muy preocupados por ti.

- Si... Ya voy...

Junkyu atendió la llamada empezando a caminar detrás de él.

- Hola Jihoon... Estoy bien, ¿Cómo estás tú?... No, no es nada, es que estoy caminando...

Haruto rodó la mirada. Podía jurar que ya se sabía el patrón de llamadas de cada uno de los hermanos de Junkyu. Después de él llamaría Yoshinori y después Junghwan, luego volvería a llamar Daesung o Hoony, dependiendo de quién quisiera joderlo primero.

.

Haruto lo llevó a un restaurante de comida casera y típica del lugar donde vivía. Junkyu no entendía nada del menú, pues todas esas eran juegos de palabras que su nivel de japonés no le daba a comprender muy bien. El japonés no le dirigía la palabra, sólo esperaba a que él eligiera.

- ¿Cuándo vas a elegir? - preguntó el japonés.

- No entiendo el menú...

- ¿Y por qué no lo dijiste antes? - preguntó arrebatandole el menú de las manos.

- Ya te lo había dicho, pero no me escuchaste... - susurró sintiendo un nudo en su garganta.

Haruto señaló una sopa.

- Es como en la imagen, tiene vegetales, hongos...

- No me gustan los hongos...

Haruto dio un golpe a la mesa, llamando la atención de las mesas de al lado.

- ¿Y entonces qué quieres?

-...

Junkyu sintió sus ojos humedecerse. Ese no era el Haruto con el que se sentía tan feliz y no quería estar con él más tiempo.

- Te pregunté...

- Quiero ir a casa...

- Bien, mejor para mí. Allá puedo preparar algo que se pueda calentar otra vez si tu familia vuelve a llamar.

- Quiero irme a mí casa... - repitió nuevamente. - ¡Quiero regresar a Corea! ¡Ya no quiero estar contigo, quiero regresar con mi familia!

- Oh claro. El niño de papi ya quiere regresar a su castillo. - Haruto se acomodó sobre su lugar, percatandose entonces de que no había hablado en japonés.

- No me importa como me llames ya. Tú no eres el Haruto del que me enamoré y no quiero estar contigo más tiempo...

Junkyu se levantó de su lugar y salió del lugar.

Haruto se quedó estático por unos segundos ¿enserio había escuchado bien? ¿Junkyu estaba enamorado de él?

- Junkyu... Junkyu, espera.

Finalmente se levantó y empezó a caminar detrás de él.

- Junkyu, espera... ¡Junkyu!

El otro empezó a caminar más deprisa intentando perder lo, pero Haruto seguía detrás de él intentando detenerlo.

- ¡No quiero estar contigo! ¡Voy a regresar a Corea ahora mismo! - gritó mientras seguía caminando y empezando a correr.

Haruto hizo lo mismo disculpándose con cada persona con la que chocaba y dejando un gran desastre con su paso.

- ¡Déjame en paz!

- Por favor, déjame a hablar... Junkyu... ¡Junkyu!

Haruto no lo pensó dos veces al ver que Junkyu cruzaba un camino sin siquiera haberse fijado y se fue contra él cayendole encima y logrando llevarlo al otro lado del camino.

- Junkyu... ¿Estás bien?

Haruto se hizo a un lado, viendo los raspones en su mejilla, en las palmas de sus manos y muy seguramente tenía también en las rodillas, ya que sobre ellas fue donde cayó primeramente.

- Ven... déjame ayudarte. - Haruto lo ayudó a ponerse de pie notando su ropa rasgada con la caída y sus rodillas con pequeños rasguños que empezaban a sangrar.

En ese momento comenzó a llover, al mismo tiempo que las mejillas de Junkyu se llenaban de lágrimas y se empapaban con las fuertes gotas de lluvia.

El japonés sintió a su corazón romperse al verlo así. Eso era su culpa.

Se quitó su sudadera y lo cubrió.

- ¿Y qué hay de ti? - preguntó el omega intentando contener su llanto.

- Sólo me importa que tú estés bien. Te voy a llevar a casa de mi hermana Bom, es la más cercana. Vamos.