40 | ¿Egoísta?

14.6K 1.6K 1.1K
                                    

Podría recordar las mejores formas de despertar por las mañanas, pero ninguna se compararía a esta. Sus besos tan cálidos son lo primero que siento sobre mi boca obligándome a despertar, aun me remuevo soñolienta y evito prestarle atención, lo de anoche me dejo muy cansada, solo quiero un par de horas más en la cama, y si son sus brazos los que me abrigan estaría bien.

Pero de repente se coloca sobre mí, dejándome demasiado sorprendida, intenta desabrochar su camisa que llevo puesta y le detengo.

—Alice, ¿tienes la menor idea de que hora es? —sujeta mi pierna y acaricia pausadamente mi piel, besa mi cuello y continúa hablando—. ¿Cuándo piensas despertar?

—Solo cinco minutos más, me duele todo el cuerpo, estoy muy cansada —le beso fugazmente y me concentro en regresar a mi agradable sueño.

—Casian preparó el desayuno, hace dos horas —¿Cómo dijo? —. Ya es hora de despertar, si no lo haces te desnudaré aquí mismo y volveremos a lo de anoche.

¡De acuerdo! De acuerdo, ya me desperté, ya me desperté.

—No es mala idea despertar así —al intentar tomarlo del cuello para besarlo noto que estaba completamente vestido. ¿En qué momento se cambió? ¿En qué momento me dejo sola? —. Parece que tú ya estás listo —son muy pocas las veces en las que lo vea vestido así, tan hogareño, sin el traje, que le hacía ver increíblemente sexy no lo puedo negar, pero ahora luce mucho más lindo, sin cargas extras.

—Casian no dejaba de limpiar durante horas cuando regreso a casa, y ese ruido no me dejó dormir, pero vaya que tú tienes sueño pesado.

Ni tanto, que exageración...

—Muy gracioso. Descuida ahora bajo.

Y justo antes de que se alejara nuestros labios se unen en beso muy caliente que con mucha facilidad despertaría cualquier. Cuesta mucho dejarlo ir, tal vez tomemos unos minutos para bajar a desayunar.

*****

—Casian, buenos días —le saludo muy cordial y tomo asiento.

—Buenos días, señora, buenos días, señor, ya les tengo el desayuno listo, supongo que estarán muy cansado... —habla muy divertido, sonriendo más de lo habitual—. Desayuno americano como le gusta a la señora, y...

Nam se sienta a mi lado y toma de uno de los platillos una tostada sin esperar que Casian terminara de servir, trato de no reírme de su expresión de tristeza al ver como habían arruinado el orden perfecto del platillo.

—Alice... —no puedo esperar mucho, muero de hambre, me acerco al plato y tomo un pedazo de tocino—. Necesito preguntarte algo importante para mí.

¿Por qué tanta seriedad? ¿De qué quiere hablar?

Simplemente asiento y continúo comiendo.

—Me gustaría que me hablarás de tus parejas sexuales anteriores —suelta esa frase tan tranquilamente, mientras yo me atoro con el desayuno. ¿Escuché bien? ¿Cómo se le ocurre preguntar algo así frente a Casian? —. Me gustaría saber quién estuve antes que yo.

—Ehmm y-yo —continúo tosiendo. Demonios, creo que el tocino se quedó pegado a mi garganta.

—No me pagan lo suficiente para escuchar esto —masculla Casian dejando el ultimo plato sobre la mesa para salir de la cocina tan rápido como le fue posible.

¿¿A dónde va?? No es buen momento para que me deje sola.

Tomo un poco de jugo de naranja para ver si con eso podía calmar mis ganas de escupir un pulmón, y cuando me siento lista para hablar regreso mi atención a él.

PUNISHMENT › Knj ❛+18❜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora