"¡Hola!". Esta fue la primera palabra que llegó a mi mente cuando te vi caminar por aquella avenida, por aquel pasillo pro- metedor de una librería.
Tu nombre siempre fue difícil de pronunciar para mí, esa bendita agrupación consonántica "d-r", la odio porque no me permitió llamarte como tal. Desde el primer instante me perdí en tu mirada, aquel color café y carmesí tan profundo, ese cabello desgreñado que conjugaba a la perfección con tus cejas oscuras y marcadas.
Me maravillaste por tu forma de pensar, ver la vida, tu manera innecesaria y profunda de regañarme sin hacerlo notar, el choque de tu mano con mi muñeca. En ese entonces te marqué como mi primer amor. Pensé que sería como un resfriado que llega momentáneamente y no deja huellas, pero no fue así. Tu sonrisa, esas curvas perfectas que van a la par con el rose de tus maxilares, tu forma de pensar, aquella que me dejaba maravillada por el conocimiento abstracto y remoto, quería aprender tanto como tú, quería ser uno de los libros que tanto leías; si fueses o formaras parte de un libro o una oración, estarías fonéticamente bien escrito. Me perdí en la lectura, me perdí en ti, me perdí en la ficción. Pero ahí estabas, enseñándome a no rendirme. ¡Qué injusto!, fuiste temporal, volaste como las hojas en otoño hacia otro humano dejando recuerdos únicos.
Cuando te conocí tenía dieciséis, y tú, veinticinco años (creo), pero fue tanta la magia que supe que serías mi primer amor.
Quizá llegue a mi vida una persona que forme torbellinos de amor y paz, horizontes diferentes de esos que dicen: "todo estará bien", quizá y solo ahí sabré que estoy enamorada nuevamente. Por cierto, gracias por la recomendación: "Los cuatro acuerdos" de Miguel Ruiz, me volví su fiel seguidora, tanto así que compré sus otras obras, entre ellas, "Los cinco niveles de apego". Gracias por tanto conocimiento hablado y escrito.
No lo he dicho, no lo he marcado, pero te quiero o quizá más que eso...
Gracias, humilde servidor, por tu temporalidad en mi vida.
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Canciones en la Luna (✓) en librerías.
Thơ caCanciones en la luna puede sentirse en varias facetas. Estas letras te pertenecen. Equivócate, ríe, ama y llora, pero no te detengas, la vida son pequeñas manifestaciones de lo que una vez fue. Los problemas mentales no son tema de burla, o algo qu...
