PECADO // Joseph Quinn+18

†015

"Estamos en la tierra, creemos que el infierno está bajo de nosotros pero... Y si estamos en el infierno?"

Mi cuerpo se tensó, lo miré y él soltó una pequeña y silenciosa risa, tapé su boca y me quitó la mano rápidamente.

-Quien es?- habló alto para que se escuchará

-Padre, no ha subido a dar la misa- mencionó mi prometido

-No me encuentro muy bien, iré en un momento- me sonrió pícaro y yo besé su cuello

-Necesita ayuda con algo?- soltó un jadeo

Bajé del escritorio y le di la espalda, mi trasero se movía contra su miembro, volvía a ponerse duro y yo me incliné un poco más sintiendo la mano del padre en mi espalda

-Padre?- mi prometido volvió a tocar la puerta

-Quizas puedas preparar el altar, daré la misa en algunos momentos- habló y me tomó del pelo -Deja de jugar- susurró y llevé mi mano atrás

Tomé su miembro de nuevo y lo llevé a mi humedad, esto era divertido y estaba excitado con el juego.

-Reclamame como tuya-susurré bajo, él se empujó dentro de mi y apreté la madera

-Muy bien padre, quería preguntar si vió a mi futura mujer- mencionó y gemí

Joseph llevó rápidamente su mano a mi boca y se movió un poco más rápido.

-Mmm...no hijo- se dificultó un poco

-Padre, no se escucha bien- movió el picaporte

-Dile, dile que estas dentro de mi ahora- susurré cuando el beso mi hombro mientras se hundia y salía rápidamente

-Soy capaz de decirlo- me desafío dando una estocada dura.

-Me estoy preocupando- habló del otro lado de la puerta y rodeé los ojos, no lo soporto

-No hijo, subiré al altar en un momento- habló y lo miré

Se veía tan jadeante, tiraba su cabeza hacia atrás y no disminuia sus movimientos, su pecho desnudo, sus brazos en mis caderas y comencé a querer más asi que me moví contra él buscando ir más rápido, sentía aquella necesidad de liberación hasta que él llevo su mano por mi vientre y bajando hasta mi clítoris, comenzó a darme atención en ese punto sensible sentía mi cuerpo desarmarse, tanto que él me sostuvo porque tenía temor a desmoronarme. Mi liberación me azotó y apreté la mesa, ahogue mi gemido con el dorso de mi mano. Joseph siguió un poco más hasta que su liberación lo abrazó y apoyó su cabeza sobre mi espalda. No hacía falta decir nada, él rápidamente busco algo para limpiarnos y luego comencé a besarlo nuevamente, no había forma de frenar esto y se sentía bien.

Quiero quedarme aqui.

NARRA JOSEPH:

Subí al altar luego de colocarme el atuendo adecuado para misa y comencé a dictar sobre la biblia, aquellas personas escuchaban con atención y mi mano tembló al acariciar las delicadas hojas del libro sagrado.

-Señor, tu que quitas el pecado del mundo...- mencioné y la busque con la mirada

"-Ten piedad de nosotros- hablo junto a mí y luego bajo la mirada

-Ten piedad de nosotros- terminé de decirlo y volví la mirada al libro"

Continuaba la lectura sobre los versículos de hoy, luego comencé a preparar la eucaristía sobre el altar. La fila comenzaba a formarse y yo a compartir con ellos el cuerpo y sangre de nuestro señor.

-En el nombre del padre, del hijo y del espíritu Santo- hice el gesto

-Amén- dijo Mark y yo dejé la pequeña oblea en sus manos. Él volvió a su lugar

-En el nombre del padre, del hijo y del espíritu Santo- hablé suave cuando ella se hizo presente

-Amén- conectamos la mirada

Ella despegó delicadamente sus labios y yo dejé la oblea dentro de su boca o casi cerca para que sea más fácil, toqué apenas sus labios y eso la hizo sonreír lasciva