𝑴𝒊𝒄𝒉𝒊 - 𝑪𝒉𝒂𝒆𝒏𝒏𝒊𝒆

Capítulo 11

Mientras las híbridas se perseguían por todo el departamento, Lisa y yo aprovechamos para charlar.

Hablábamos de cómo había cambiado nuestra vida al llegar Jennie y Jisoo, se nos notaba más felices y energéticas.

—¿Tienes más galletas? —preguntó Lisa mientras se levantaba para ir a la cocina.

—Están detrás de todas las tazas —grité mientras me estiraba.

Habíamos estado una hora sentadas viendo la película y hablando, ahora me dolía todo el cuerpo.

Debería retomar ir al gym, pensé.

Obviamente no creo que lo haga.

Ahora que puedo hablar más tranquilamente con Jennie no quiero desperdiciar el tiempo en cosas así... Prefiero dormir alguna siesta con ella o comer juntas, esas eran las cosas que me entretenían y me divertían últimamente.

Jennie es como mi vitamina, aunque ella aún sea tímida conmigo.

Con su simple presencia me dan ganas de hacer cualquier cosa sólo para llamar su atención o para consentirla.

Hasta mi madre se sorprendía de que le cocine.

En todos los años que llevo viviendo sola nunca me había esforzado en cocinar algo elaborado.

Y a Jennie le cocino cualquier cosa que ella quiera sin rechistar.

Sentía como si debía de cuidarla.

—¿Y Jisoo? —preguntó Lisa mientras veíamos llegar a Jennie.

—Encerrada en el baño —dijo y Lisa se tragó la última galleta para luego ir a buscar a la de pelo violeta.

—¡¿Conseguiste agarrarla?! —pregunté con alegría y ella asintió— ¡¡¡Esa es mi Michi!!! —dije y me levanté para abrazarla y despeinarle el cabello.

Pensé que se molestaría pero en cambio me abrazó por la cintura y me alzó.

—No pesas nada Rosie —habló mientras reía como gatito.

Yo sonreí enternecida al escucharla.

—Yo creo que eres muy fuerte —dije acariciando sus orejas.

Me bajó, pero aun así no se separó del abrazo.

—Tengo sueño... —murmuró en mi pecho.

—Si quieres ve a la habitación... Ahora echo a esas tontas —dije y Jennie rio.

Se separó del abrazo y se fue en dirección a la habitación mientras se frotaba los ojos.

Tan tierna, pensé mientras sonreía inconscientemente.

—Y esa sonrisita —dijo Lisa pícaramente mientras llegaba abrazada a Jisoo.

—Es la única que tengo —me hice la desentendida— Por cierto ya es tarde así que o se van o las sacó a patadas —hablé amablemente.

ㅡ¡Okey okey! Ya nos vamos —dijo Lisa riendo— Duerman bien —gritó ya en la entrada. —Ustedes también —grité y se escuchó como cerraban la puerta.

Aun así me dirigí a esta para cerrarla con llave.

Apague las luces de todo el departamento y me encamine a mi habitación.

Al llegar la ropa que Jennie había usado estaba sobre la cama, y en medio de esas prendas estaba una linda gatita con pelaje azul.

Esa imagen había acelerado mi corazón, ella es tan linda sin darse cuenta.

Me acerqué y la saque de entre toda la ropa, la cual tiré al cesto para ponerla a lavar mañana.

Abrí las sábanas y me metí dentro, automáticamente Jennie se paró y se vino a dormir a mi cuello.

Mi corazón estaba feliz al estar al lado de Jennie.

Pude dormirme con facilidad.