Parte ¹
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No estaba seguro si su atuendo era demasiado formal para solo ir a una feria. Luchaba con su cabello con el objetivo de acomodarlo mínimo aunque sea, el peine se atascaba en varias ocasiones en su rebelde melena, mechones de cabello se quedaban incrustados en el peine cada vez que tironeaba por desenrredarlo.
Odiaba su cabello, siempre parecía estar en su contra si mismo.
Cuando Tweek volvió su mirada al espejo se dio cuenta que su camisa estaba mal abotonada. No pudo evitar recordar a ese niño de 9 años que solía ponerse mal una simple camisa y que era paranoico.
Como siempre la ausencia de Hellen se hallaba en la casa, de alguna forma lo agradecía a cualquiera de las deidades existentes en el universo.
Bajo a la cocina, todavía seguían calientes los roles de canela, empezó a empaquetarlos en su mochila tratando de no estropearlos. La mesada estaba sucia de harina, la batidora con restos de masa. Ya cuando volviera limpiará el desorden que hizo.
Ya eran casi las 6 cuando Tweek se fijo en el reloj de la sala. Se apresuró a salir antes de perder el bus que lo llevaría a la plaza, la parada se encontraba como a tres calles. Todo sería más fácil si todavía tuviera su bici.
Parecía que Tweek estaba corriendo en un maratón, la parada se veía cada vez más cerca, el bus seguía ahí, se tropezaba con sus propios pies cada que se acercaba; siempre había sido el de peor resistencia física al correr largas distancias.
Se estrello contra la puerta cuando el vehículo iba a ponerse en marcha, agradeció que el conductor lo hubiese dejado entrar a pesar de que rallo un poco el vidrio con sus uñas. El conductor lo miró raro al igual que los otros pasajeros cuando tomó asiento . Su cabello en el que tardó horas tratando de acomodarlo estaba hecho un desastre, otra vez.
Con más calma reviso los roles que seguían en su mochila, aún estaban intactos a pesar de que se desplomó en el asiento a causa de la falta de aire.
Su teléfono empezó a vibrar, dejó a un lado su mochila a responder el mensaje de Wendy.
"¿Dónde estás? Ya estamos en la entrada de la feria esperándote, Kyle está empezando a impacientarse"
"Lo siento, no calculé bien el tiempo que tenía. Ya estoy en el bus, llegaré en unos 7 minutos -.-"
Dejo en un costado el celular mientras apoyaba su rostro a la ventana viendo el paisaje de colores cálidos.
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. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..-No creí que en verdad vendría, más parecía ese tipo que deja plantado.- Sus palabras estaban llenas de sarcasmo, eso le dolió un poco.
Tweek hizo que no oyó el comentario del pelirrojo cuando llegó. Si acepto ir era porque quería tener un momento en el cual poder divertirse, era mejor que estar todo el día encerrado en su casa luego de volver del instituto.
La pelinegra le dio un empujon al más grande y lo regañaba por su actitud sin darle mucha importancia a la presencia del rubio.
.-¿Dónde están los demás?-
.-Kenny se fue con Leopold a jugar esos juegos de puntería, también queríamos ir pero teníamos que esperar hasta que te dignaras a llegar.-Kyle se cruzó de brazos está vez sin importarle la mirada de furia en los ojos de la única chica en el grupo.
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|Abandoname Mañana|Creek |
FanfictionOdio, repudio, una venganza, un corazón roto...o quizás el puro deseo de ver como una persona se corrompe y arde en llamas. O solo es que Tweek tiene que aprender a superar sus traumas y tormentas del pasado... Cualquiera que sea la razón, él mismo...