"Di que me verás de nuevo, incluso si es en tus sueños más salvajes."
|| the rose • girlfriend multiverse pt. 2 ||
⚡ straight fic
⚡ aparición de otros idols
tinybrose ✨ 2018
📍published: 2021
RANKING
🏅#therose 1
🏅#blackrose: 2
NO SE PERMITE NINGÚ...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
ÍNDIGO
Otra vez maldecía mi sueño ligero. ¿Por qué alguien estaba tocando la puerta lo suficientemente sonoro para que alguien lo escuchara y al mismo tiempo no despertara a los demás?
- ¿Hajoon está despierto?- dijo Dojoon una vez que abrí la puerta; seguía medio dormida, pero aún podía distinguir su silueta en la oscuridad y el sonido de su voz.
- ¿Por qué no pasas y le preguntas tú mismo?- mi notable mal humor por haber interrumpido mi descanso no se había hecho esperar. Mientras tallaba mis ojos para despejarme un poco, Dojoon se asomaba sobre mi cabeza para confirmar que en efecto, Hajoon seguía en el quinto sueño.
-Entonces serás tú quien vendrá conmigo.- comentó.
-¿Ir a dónde, ni siquiera sé qué hora es?- repliqué un poco harta, solo quería volver a ponerme debajo de las sábanas y despertar hasta medio día.
- Son casi las tres de la mañana.- respondió Dojoon, tan quitado de la pena, como si fuesen las tres de la tarde.- Date prisa, vamos antes de que despertemos a alguien.- dijo y se dió la vuelta en dirección a la entrada.
Tomé rápidamente mi pequeño bolso en donde guardaba mis pertenencias, como pude recogí mi cabello en una coleta bastante mal hecha y seguí a Dojoon. No porque quisiera, claro. Pero si con eso me dejaba en paz, entonces valdría la pena.
Tomamos el ascensor hasta el estacionamiento del sótano y caminamos hasta llegar al auto de Hajoon.
-¿The Rose se tiene la suficiente confianza como para que uno tome el vehículo del otro durante la madrugada?- pregunté, aún seguía bastante confundida.
- Hajoon lo entenderá, siempre y cuando deje la gasolina como estaba.- respondió una vez que ambos estábamos dentro del carro.- Abrocha tu cinturón.
El cielo estrellado en Seúl era difícil de percibir muchas veces; pero esta noche fue todo lo contrario. Un manto estelar estaba cubriendo la mayor parte del cielo y hacía juego con las luces de la ciudad. Era una imagen placentera, y más, porque el caos vial que había diario no existía a estas horas.
- ¿No estarás tratando de deshacerte de mi, o sí?- inquirí preocupada, pues ya llevábamos un buen rato conduciendo en silencio. Él simplemente soltó una pequeña risa.
- ¡Por supuesto que no!- respondió.
- ¿Entonces qué demonios estoy haciendo aquí?- volví a preguntar harta de la incertidumbre del asunto.