Recuerdos

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Aigri estaba en su habitación con demasiado sueño, quería dormir pero no lo lograba, no estaba de humor de levantarse de la cama, por esa razón buscó algo en los cajones de la mesas de noche, como no lo encontró en uno decidió buscarlo en otro, tampoco lo encontró causando que empezará a enfadarse, golpeó la mesa de noche, una vez que terminó de cerrar en silencio el cajón, se acostó nuevamente mirando el techo con enojó.

Suspiró ruidosamente, cerró los ojos para luego abrirlos, miró debajo de su cama la cuál tenía miles de armas de fuego, las sagradas estaban dentro de unas cajas con sus recargas, buscó quitando las cajas haciendo ruido por el rozar, cuando finalmente encontró lo que buscaba, píldoras.

Cuando las saco sintió claramente un trozo de papel, por la curiosidad lo sacó también para ver qué era con la poca luz que estaba allí, al ver bien vió la imagen de su madre y padre con el de pequeño, la foto estaba arrugada y un poco quemada, se sintió algo tranquilo al verla, miró sus píldoras que estaban en la otra mano para luego guardarlas con brusquedad, hasta ese ruido fue suficiente como para asustar a alguien en casa.

Él mismo se sorprendió por haber hecho tal cosa con esa forma tan brusca, debió ser que el se sentía demasiado tranquilo como para tomar una simple píldora que lo haría perder el conocimiento por largas horas, nuevamente suspiro se acomodó en su cama arropando sus hombros, sacó sus brazos para seguir viendo la foto, la parte quemada era el rostro de su padre, aún que sus ropas se notaban que era una armadura que era iluminada por la luz, la parte arrugada era él, por tanto tiempo que había dejado esa foto doblada, casi se rompe un poco la foto, la parte de su madre estaba más intacta.

Colocó su antebrazo que aún conservaba sus vendas que pronto tendría que cambiar, empezó a recordar la vez en que su padre lo saco de la casa, en ese tiempo era invierno y él solo tenía unos 2 años de edad, aún que recordaba bastante bien ese día, su padre le estaba enseñando cómo atacar con una lanza, en medio de la demostración se resfrío, recuerda con mucha burla el como su madre reaccionó por tal tontería, no volvió a dejar que su padre lo sacará hasta que el invierno terminará.

Recordó pocos segundos después, el día cuando su madre lo saco de paseó, en el camino vió a una arcangel de otro rango vigilando, su madre estaba hablando con una amiga riendo y otras cosas, la señorita tenía a un bebé en brazos, eso significaba que no podía jugar con alguien en todo el rato, durante la espera, giró su cabeza para mirar algo que llamo su atención completamente, rápidamente se soltó de la mano de su madre ya que lo descuido por un momento por estar más concentrada en la conversación, miró las nubes que estaban más alto para ir al sitio que llamo su atención, era un lago muy limpió como un espejo, metió sus manos para empezar a jugar con el agua.

Luego de una hora jugando, empezó a aburrirse, soltó un suspiro para levantarse para ir con su madre, sin embargo, notó que ella ya no estaba en el sitio de antes, ni la mujer con la que estaba hablando, se empezó a asustar al igual que a preocuparse para luego buscarla por todo el sitio, habían muchas personas, tantas que no lo vieron o lo escucharon preguntar por su casa, él por mucho miedo se fue rápidamente a una esquina junto a un farol, se sentó en el suelo para llorar asustado por perder a su madre.

Luego de unos minutos, miró arriba una vez que se calmó, vió a la arcangel de hace rato, la mujer miró alrededor y a las personas, suspiró preocupada para preguntarle dónde estaba su madre, él solo respondió que la había perdido cuando estaba jugando con el lago, la arcangel lo cargó para llevarlo al sitio que él le decía, hubieron veces en la que se quedaba callado tratando de recordar algo, hasta llegaron a perderse. La arcangel preguntó si sabía volar, él solo respondió que aún no lo sabía, ya que todavía era pequeño, ella suspiro para abrir sus alas y tener mejor vista.

Él al principio se asustó, por pedido de la arcangel miró abajo, la vista era muy bonita, inmediatamente reconoció a su madre y la casa, pidió ir con su madre ya que estaba como loca buscándolo por toda la ciudad, la arcangel se lo entrego, sin apenas poder pestañear su madre ya se disculpó con ella y él por el descuido y la molestia, la arcangel volvió a su lugar aceptando la disculpa con la tranquilidad de que el pequeño ángel regreso con su madre.

Pero la realidad, solo eran recuerdos de la vida de Aigri, que había logrado quedarse profundamente dormido, uno de sus brazos estaba en su frente tapando sus ojos, mientras el otro sostenía está foto, sus recuerdos de la infancia eran algo que siempre lo calmaba suficiente como para descansar, ya no estaba durmiendo por una píldora o le pedía a alguien que le hablará hasta dormirse, si no sus recuerdos de la infancia, por primera vez lo ayudaron a dormir sin la necesidad de algo. Pero no todo era color de rosas...

- Señorita, mi madre le mandó estás galletas como agradecimiento por ayudarme - Decía en su recuerdo la voz de un niño.

- No tenían que molestarse, yo solo hice lo correcto - Respondió la voz de una joven.

- Mamá dice que las buenas personas merecen las mejores recompensas - Dijo con inocencia la voz del niño.

- Eres un buen niño - Dijo la chica con una risa muy ligera.

- Señorita Heart... - Su recuerdo se abrió mostrando a la chica arcangel.

La chica arcangel era atravesada por un risco de arma de un demonio, que se reía con mucha fuerza, mientras un pequeño Aigri estaba escondido del lugar asustado de lo que podría pasar si el demonio lo encontraba, esa vez había salido con la arcangel llamada Heart Gold, pero cuando menos lo esperaron un demonio los atacó, ella le gritó que se escondiera inmediatamente, eso hizo hasta que escucho nuevamente la voz del demonio, buscándolo.

- ¿Por qué te escondes? Te tengo un buen regaló - Decía con obvias mentiras el demonio que estaba quitando la tapa de dónde estaba escondido.

Despertó alterado, sudando frío, miró la hora y eran las 7:29am, para luego cambiar e inmediatamente sonar la alarma, la apagó de un golpe que fue suficiente como para tirarla al piso, miró sus manos temblando por tal recuerdo, como era un niño lo había olvidado, además con inocencia preguntaba por ella, Heard Gold, una arcangel de corazón, había sacrificado su vida por la de un niño angel que ahora era un ángel caído que había asesinado a su padre por la irá.

Estuvo apunto de tener pensamientos autodestructivos, aún que fueron interrumpidos por qué alguien tocaba la puerta, Mish entró a la habitación diciendo que el desayuno estaba hecho, Aigri solo le dijo que iría pero en un momento, se levantó para cambiarse a unas ropas más cómodas, ¿Por qué no puede dejar de tener pesadillas? Ni el lo sabe, decidió olvidarlo para disfrutar al menos un poco la primera comida del día, Ghost y Medovyy comían unos huevos con tocino, Mish estaba comiendo cereales mientras leía lo que decía detrás del empaque de este, en cambio Aigri solo comía pancakes de arándanos.

¿Quién era esa tal Heart Gold? Se preguntó.

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Listo, estos son unos recuerdos de Aigri.

Aigri: Me obligó a hacerlo... *Sigue pensando*

Calla, cada personaje tendrá una canción obligatoria en su publicación aparte que si es por decisión de los lectores puedo cambiarla con gusto, específicamente de FNF.

Sin más que decir, bye

My Oc's HistoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora