17.Esto no puede estar pasando

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Había pasado dos semanas en cama, sin poder salir; me desperté feliz por el hecho de que hoy me quitarian los puntos y podría volver a retomar mi vida. Fui al baño y mire mi espejo, aún seguía hecho pedazos. De todas formas no quería ver mi horrible rostro por las heridas que tenía. Bajé a desayunar como siempre.

(...)

-Lista para que te quiten los puntos?-pregunto mi madre, mientras tomaba mi mano.
Asenti con la cabeza y entre al consultorio del doctor Ross, lo conocía desde hace tiempo.
-Hola Bella, lista para quitarte esas cosas de la cara?-pregunto el doctor Ross mientras organizaba sus herramientas.
-Si-dije en un susurro.
-De acuerdo, empecemos-dijo el doctor Ross.

(...)

Ya era momento de ver como había quedado mi rostro, luego de aquel accidente. Subí la mirada hacia en espejo y vi mi rostro con una pequeña cicatriz, que no se notaba mucho.
-Oh Dios-dije aliviada.
Creía que mi rostro se había destruido, pero no fue así. Sabía que sanaria en un tiempo y volvería a ser como antes. Salí del baño y fui a la sala. Me senté en el sofá a leer un rato. Me encantaba leer, sobre todo romance. Luego de un rato recibí un texto de Zac.

Zac: Bella, estas en tu casa?. Quisiera ir a verte un rato

Bella: Sí Zac. Pero en realidad estoy un poco ocupada, podrías venir mañana.

Zac: De acuerdo, nos vemos.
Guardé el teléfono y salí al jardín. Estaba todo muy callado, no había nadie en la casa, mis padres fueron a visitar a mis abuelos con mis hermanas. Yo estaba cansada y preferí quedarme. Tanto silencio daba escalofrios,en realidad me gustaba estar sola, pero sabía perfectamente que no estaba sola en está casa. Mire hacia la ventana de la cocina y Annie estaba parada allí, tenía los ojos rojos, un vestido blanco y el cabello suelto. No paraba de mover la cabeza, de un lado al otro. Bajé la mirada y respiré profundo, volví a mirar a la ventana pero ya no había nada. Ya no me asustaba tanto ella, sabía que no me podía hacer gran cosa. No quería seguir allí sola con Annie.

(...)

Caminaba por la calle, hasta un centro comercial. Hundida en mis pensamientos, sin darme cuenta de lo que ocurría a mi alrededor. Oí a alguien gritar.
-¡CUIDADO!-grito una mujer de unos 30 años a un auto qur iba conduciendo muy rapido, dirección a la niña .-Oh no... Mi hija!-decía llorando.
No entendía muy bien lo que pasaba, me acerque un poco. Y vi a una niña de unos 8 años tirada en medio de la calle, una mujer se acerco a ella y le tocó el cuello para ver sí tenía pulso.
-Está muerta-dijo la mujer bajando la mirada.
-No! No-dijo otra mujer, que parecía ser su madre-Mi bebe!
La mujer no paraba de llorar, mientras abrazaba a la pequeña niña. El corazón se me partió. Mire al otro lado de la calle y para mi sorpresa estaba Annie,mirándome, no hacia más nada sólo me observaba. Me voltee y seguí caminando, esa pobre niña había muerto y no se porque razón me sentía culpable. Seguía caminando y pensando. Algo me tocó, lo ignore no quería voltear, sentí como mi respiración aumentaba y luego no podía respirar. Algo me estaba agarrando el cuello, segundos después me soltó y caí al suelo. Todos me pasaban por al lado y me miraban como sí les fuera a hacer daño.

(...)

Estaba en mi casa, comiendo helado y viendo películas. Mis padres habían vuelto y todos dormían excepto yo. Pase toda la noche comiendo y viendo películas, cuando me levanté al día siguiente. Recordé que hoy Zac vendría y tenía que prepararme o al menos vestirme con algo decente. 4 horas después estaba esperando a Zac. Estaba en mi habitación esperando algún texto de Zac.
-Jugara conmigo te guste o no- alguien susurraba eso una y otra vez. Sabía quién estaba diciendo eso... Annie.
-Que quieres?-pregunté al vacío- Dime que demonios quieres!?-grite, ya no quería seguir viviendo así.
-Juega conmigo-susurro a mi oído.
-Déjame en paz!-grite- Sólo déjame!
-Haz lo que te digo o alguien sufrirá por ti-susurro.
-Se que no harás nada, no eres capaz de nada! No ne harás daño.

Ella no hablo más, solamente desapareció. Poco después me llegó un texto de Zac.
-Bella casi llego.
-De acuerdo, te espero.
Guardé mi celular y bajé para abrirle a Zac. Que se encontraba tocando el timbre.
-Hola! Pasa-dije abriendo la puerta, para que pasará.- Como has estado?.
-Bien, lo mismo de siempre y tu?
-Genial.
Hablamos de muchas cosas,me encantaba hablar con el, era único que me entendía.
-Bella vamos a salir, nos llevamos a tus hermanas-grito mi madre desde el jardín.
-De acuerdo, me quedaré con Zac.-contesté.
-Nos vemos luego hija.
La puerta se cerro y Zac y yo salimos al jardín. Tenía un par de columpios por mis hermanas, cuando estaba con Zac me gustaba sentarme allí y conversar.
-Adoro estos columpios -dije
-Sí, igual yo-contestó Zac riendo.
Luego de hablar por 1 hora más o menos, Zac pregunto:
-Que ah pasado con Annie y todo ese tema?-pregunto
-Ella ah estado persiguiendome y diciendo...-trague saliva- "Juega conmigo".
-Eso es escalofriante.
-Ya lo sé, no se que voy a hacer.
Eran las 10pm y seguíamos sentados en los columpios.
Una rama sonó. Ambos volteamos de golpe.
-Que fue eso?-pregunto Zac
-No lo sé, de seguro no fue nada-respondi
Volvió a sonar, seguido de un grito. Ambos nos paramos de golpe de los columpios.
-Bella que fue eso?-pregunto muy preocupado.
-No se, intentó pensar que fue el viento.-respondi
-Ese grito no fue el viento-dijo el.- deberíamos ir a ver, tal vez alguien está herido.
-Estas seguro? No estoy muy segura de querer meterme al bosque a está hora.
-vamos bella-dijo jalandome por el brazo.
Nos adentramos en el bosque, no se escuchaba nada. Hasta que alguien volvió a gritar, tal vez era una trampa.
-Es mejor que volvamos Zac.
-No Bella, tenemos que ver que es.
-No te hagas el valiente, volvamos-dije jalando de su brazo.
-No-dijo soltandose de mi agarre.
Seguimos caminando, yo estaba muerta de miedo, estaba segura de que Annie tenía algo que ver con esto hay fue cuando recordé sus palabras "Haz lo que te digo o alguien sufrirá por tí" no quería que Zac sufriera por mi culpa.
-Zac tenemos aue regresar ya, estamos en peligro aquí...
Ya era tarde Annie estaba frente a nosotros, sonriendo maliciosamente, una hacha en la mano y ojos rojos.
-Bella, corre-dijo Zac en susurro.
Ambos comenzamos a correr, sin mirar hacia atrás sólo corriamos. Me detuve un segundo porque estaba muy cansada.
-Bella vamos, Annie nos atrapara-decía Zac, con la respiración entre cortada.
Ambos volvimos a correr. Zac estaba detrás. Constantemente volteaba a ver como estaba, Voltee y el había parado de correr, ya que estaba muy cansado.
-Zac corre!-grite.
Vi a Annie acercándose a el, tenía la hacha en la mano,
-Zac cuidado!-grite.
Ya era tarde Annie le había clavado la hacha a Zac, en la espalda.
-Oh dios mío no-susurre, acercandome a el era inevitable las lágrimas comenzaron a caer de mis ojos.-Zac estarás bien, no me dejes me escuchas!, no me dejes- me agaché y levanté su cabeza para colocarla en mi regazo.
-Bella, juega conmigo-susurro Annie, que se encontraba frente a mi.
-Nunca, nunca jugar clntigo-grite.
-Zac no me dejes-susurre a sí oído.- eres mi mejor amigo, no me dejes de está manera.

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