Protegido *JinSu*

08

—¿Taehyung aún no despierta? —preguntó Jimin entrando a la cocina esa mañana.

—No, sabes que no despierta tan temprano.

—Bien, me voy al pueblo, Jin ¿Vienes conmigo?

SeokJin miró a Yoongi quien asintió ligeramente. —Estás libre hoy, te encargarás de que Jimin no olvide nada de la lista.

—¡Sólo fue una vez! —gruñó.

—Y es suficiente, andén, con cuidado.

—Encenderé la camioneta.

Jimin salió, dejándolos solos, Yoongi se acercó a Jin, a medida que pasaba el tiempo se daba cuenta lo fácil que era estar a su lado.

—Jimin me preocupa, la presencia de Taehyung le tiene mal, cuida de él, por favor.

—Claro, pero, te va a costar.

—¿Dinero?

—No.

—Entonces ¿Qué?

—Te diré cuando regresemos, nos vemos más tarde—se levantó, alargando la mano para despeinar los cabellos de Yoongi quien bufó.

SeokJin salió con una enorme sonrisa, la noche anterior había tomado una decisión, era una persona que nunca dejaba pasar las oportunidades que se le presentaban en la vida, por eso, no dejaría pasar el hecho de que estaba sintiendo cosas por Yoongi, quería ver hasta donde podían llegar, porque le gustaba y ese sentimiento le agradaba, además, de que Yoongi era alguien especial. Muy especial para él.

Subió a la camioneta con Jimin, quien la encendió, parecía muy ansioso por irse de ahí, no sabía lo que había pasado en su relación, pero parecía ser que aún le afectaba mucho, puso la radio y ambos la escucharon en silencio.

—¿Es muy lejos?

—A una hora.

—Vaya, si es un poco lejos.

—Ajam.

—¿Estás bien?

Jimin bufó abultando sus labios, negó. —Realmente no, la presencia de Taehyung me pone nervioso.

—¿En el buen o mal sentido? Ya sabes eso que dijiste ¿Tensión sexual?

—Mucha, casi al extremo, estuve a nada de lanzarme a sus brazos en cuanto lo vi—rio—. Nosotros siempre fuimos así, muy afectivos y calientes, pero, bueno, las cosas cambian.

—¿Qué es lo que cambió entre ustedes?

—Ya te dije, queríamos cosas diferentes.

—¿Qué es lo que quería él?

—Su empleo—se encogió de hombros.

—¿Eso te dijo?

—No había caso que lo dijera, siempre lo demostró.

—Espera—detuvo con una mueca—. Eso quiere decir que jamás le preguntaste ¿Es eso?

—Hay cosas que no son necesarias preguntar, se saben.

—Una regla importante es no inferir las cosas, debiste de haber hablado con él.

—¿Cuando? Siempre estaba fuera trabajando, llegaba y teníamos sexo, después se iba de nuevo, no tenía tiempo para esas cosas.

—Mira, realmente nunca he tenido una relación seria, pero la comunicación afectiva es importantes, ya sabes, esas cosas de hablar de lo que uno siente.

—¿Qué se supone que significa eso?

—Que tienes que preguntarle qué es más importante, si tú o su empleo.