Encuentros Y Eternas Posibilidades

Reencuentro - Stony

Ninguno esperaba que esa situación fuera su reencuentro después de casi dos años sin verse.

— Hola— saludó tímido Tony cuando se resignó a qué estaría un buen rato atorado en ese elevador.

— Hola— respondió Steve con su típica sonrisa cálida.

Sí en sí los dos se estaban sintiendo incómodos con un simple encuentro en un elevador, imagina los sentimientos que tenían al ver cómo el elevador se había quedado parado a medio camino y sin un posible tiempo para que se resolviera, eso solo tensaba más el ambiente.

— ¿Cómo has estado?— preguntó Tony recargándose en un muro del elevador.

— Bastante bien, mi vida se ha vuelto más tranquila— comenzó a explicar el rubio— deje el ejército, tengo una pequeña escuela de arte.

— Wow, eso es genial— honestamente eso había sorprendido bastante a Tony.

— ¿Qué hay de ti? Supongo que has hecho muchísimas cosas— está vez fue turno de Steve de preguntar.

Tony se sintió avergonzado de todo, en comparación a lo que había dicho su ex pareja ahora se sentía mal pues incluso parecía que su vida se había quedado estancada desde su ruptura.

— Honestamente nada nuevo, sigo en el mismo trabajo, la misma casa y básicamente la misma rutina— dijo Tony intentando disimular su vergüenza.

— Eso igual está muy bien, si te funciona esa rutina yo creo que no hay nada de malo— como siempre Steve dijo lo correcto en el momento, Stark recordó cómo odiaba que el rubio pareciera saber exactamente que pasaba por su mente.

— Bueno supongo que sí— intentó articular algo ingenioso pero nada parecía llegar.

La temperatura también estaba aumentando en el pequeño espacio, era aproximadamente medio día y se notaba en ese espacio.

Al ver qué nada iba a ir a ningún lado, los dos comenzaron a sacar conversación para matar el tiempo.

Tony se quitó su saco y aflojó su corbata ya que sentía que se asfixiaba. Ambos empezaron a hablar tranquilamente, después de todo tenían varias anécdotas para ponerse al día.

En esos momentos recordaban lo bien que se lo habían pasado como pareja, puesto que realmente habían decidido terminar su relación por una tontería.

Una estúpida pelea que pudieron haber resuelto pero por su orgullo decidieron dejar de pelear.

Tampoco había señal de teléfono por lo que estaba completamente desconectados de sus alrededores.

— ¿Has conocido a alguien?— preguntó Tony sin poder evitar hacerlo. La curiosidad lo mataba.

— No, realmente. He conocido a algunas personas pero nadie con quién he conectado— respondió Steve, para después agregar— ¿Y tú?

— No tengo tiempo para las relaciones— habló honesto el castaño— las citas implican demasiado tiempo.

— Es una lástima, estaba pensando invitarte a salir después de que esto terminará— dijo el rubio señalando todo el espacio.

— Yo no me refería a eso— intentó decir algo Tony pero su cerebro lo estaba traicionando, no podía creer que el hombre que tenía enfrente pudiera poner nervioso al empresario Anthony Stark— bueno sí pero si se trata de ti yo siempre estoy libre.

Tony pensaba no sonar desesperado pero al parecer había fallado rotundamente. Una carcajada salió de los labios del rubio pero no hizo otro comentario al respecto.

— Tengo libres casi todas las tardes— mientras decía eso el elevador pareció recuperar energía— supongo que aún tienes mi número, envíame un mensaje y nos ponemos de acuerdo.

Unos pocos segundos después las puertas del elevador se abrieron en un piso. Algunos bomberos estaban esperando en caso de que hubiera alguna necesidad.

— Te llamaré— fue lo último que dijo Tony antes de que se separaran de nuevo.

Y esta vez Anthony cumpliría su promesa, pues aunque él no fuera un gran creyente del destino o las fuerzas místicas. Que él y Steve se hubieran encontrado en esa situación después de tanto tiempo debía tener una razón y no estaba dispuesto a perder la oportunidad de averiguarla.