Encuentros Y Eternas Posibilidades

Hacer la alacena y cultivar un jardín - Stony

Con la llegada de Steve a su vida y posteriormente Peter, Tony optó por comenzar a cambiar sus hábitos de vida, es decir comenzar a comer sano e incluir a su dieta cosas más orgánicas.

Fue por eso, que en sus rutinas la pareja empezó a incluir visitas al supermercado juntos. Para que los dos seleccionarán los productos correctos, Steve sabía la teoría sobre la alimentación mientras que Tony y Peter seleccionaban los saboreando, ya que aunque estuvieran intentado ser más sanos tampoco se conformarian por cualquier alimento dietético.

— Ya solo queda seleccionar las frituras y postres de la semana— anunció Steve después de revisar su lista de mercado.

— Oíste amor, ¡dulces!— Tony dijo emocionado, tenía cargando a Peter.

El bebé soltó grititos emocionados, aún no hablaba pero parecía entender todo a la perfección.

Llegaron al pasillo de las chatarras. Pues aunque comían mayoritariamente sano, entendían que las golosinas también eran necesarias de cierta manera.

Terminaron llevando un bote de helado mediano y una caja de galletas.

Normalmente después del supermercado irían a otro lado a pasear y pasar la tarde; sin embargo, ahora que tenían un helado prefirieron regresar temprano.

Condujeron hasta la casa y para cuando llegaron Peter aún tenía mucha energía. Así que fueron al jardín de su hogar.

Stark siempre quiso lo mejor para su pequeño, por lo que al jardín no le faltaba absolutamente nada. Tenía de todo, algunos juegos, una piscina y la parte favorita del castaño, el mini huerto de hortalizas que tenían.

Peter tenía una afinidad enorme con la tierra y las plantas.

— Mira, Petey las zanahorias ya están listas— señaló el rubio.

Bajaron al niño hacia el pasto y solito gateo hacia su huerto. Con supervisión de sus padres, los tres sacaron las pequeñas zanahorias.

— Con eso será suficiente para hacer unos pastelitos— dijo Steve, cómo encargado de la cocina gran parte de su día era pensar en cómo alimentar a sus hombres.

— Perfecto para la cena de hoy— respondió Tony levantando a Peter del suelo— tu prepararlos mientras yo baño a este príncipe.

De esa manera se coordinaron y cada quien hizo sus actividades.

Tony amaba tener esa nueva rutina, adaptarse a un estilo de vida más sano lo había ayudado mucho realmente.