Mientras Sesshomaru estana en camino para ir por su familia, Rin estaba arreglandose, pues esa noche saldría a cenar con Kohaku; ella no era tonta, se dio cuenta que los sentimientos de él cambiaron y para ser sinceros ella también empezaba a sentir un cariño diferente.
-Que bonita te ves mami-dijo Towa con una sonrisa-.
-Gracias princesa- le respondió con otra sonrisa mientras acariciaba su cabello plateado.
-¿Saldrás con el tío Kohaku, mami? -preguntó Setsuna.
-Si mi vida, iremos a cenar- unos momentos estuvieron en silencio-. ¡Listo! ¿Qué tal me veo, niñas? -le pregunto a sus pequeñas.
-¡Te ves hermosa Mami! -respondieron ambas niñas con una sonrisa
-Cuando papá Kohaku te mire... -Towa guardó silencio cuando se dio cuenta de lo que dijo.
-¿Qué dijiste? -preguntó Rin sorprendida-¿acaso él les ha pedido que le digan papá? -
-No mami-contestó jugando con sus deditos-. Es solo que... como pasa tiempo con nosotras lo vemos como un padre, como papá trabaja en otro país y no lo conocemos ambos decidimos que le pediremos al tío Kohaku que actúe como nuestro padre.
-Cariño- atrajo a ambas a su pecho, sus ojos se humedecieron mientras maldecía a Sesshomaru-. Si Kohaku lo permite pueden llamarlo así, pero recuerden que ustedes tiene un papá propio y pronto lo conocerán.
Las niñas aceptaron emocionadas, por fin dejarían de hacerles burla de que ellas no tenían papá.
Minutos después Kohaku ya estaba en la casa de Rin esperándola.
-Buenas noches princesas - las saludo con una sonrisa, esas niñas se ganaron su corazón desde que las tuvo por primera vez en sus brazos-. Esta noche les robare a mamá, pero les prometo que mañana saldremos los 4 juntos-las niñas se emocionaron, al imaginarse el día que les esperaba.
-Diviértanse papás-Kohaku al escuchar a la mayor decirle "papá" abrió los ojos sorprendidos- Por qué podemos llamarte papá ¿verdad?-preguntó con timidez.
-Claro que sí hijas-dijo mientras se ponía a la misma estatura de las gemelas.
Minutos después las gemelas dejaron que se fueran.
En el camino estaban hablando de su día, hasta que Kohaku le comentó que le alegraba que lo vieran como un papá.
-Ellas te quieren mucho, eres su única figura paterna que tienen-contestó-. Espero que no te moleste que te digan así.
-Claro que no, sabes que las ame desde que las cargue por primera vez en aquella sala de partos, sentí como si fueran una parte de mí también -contestó con una sonrisa.
Minutos después llegaron al restaurante, pidieron su orden, y cuando llegaron los platos procedieron a disfrutarlos, seguían platicando, quienes pasaban cerca de la mesa murmuraban que eran una hermosa pareja, cosa que provocaba que Rin se sonrojara.
Unos minutos estuvieron en silencio, hasta que Kohaku pidió que lo escuchara.
-Rin-la llamó su acompañante-Te conocí hace cuatro años, cuando aún llevabas a las pequeñas en tu vientre, desde ese momento me pareciste la mujer más hermosa y no entendí cómo fueron capaz de apagar tu luz, me dejaste estar contigo en tus últimos meses de embarazo, en todas las etapas de las niñas...-empezó a decir-después de tantas cosas juntos, me doy cuenta que mis sentimientos cambiaron y por eso, esta noche quiero pedirte que me des la oportunidad de formar parte de tu familia, no como amigo, si no como pareja, quiero estar a tu lado todos los días de mi vida- pidió.
