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wolf in sheep's clothing

El lobo se viste con piel de cordero.

Mark era un corderito pequeño pequeño, amaba a su manada, eran muy protectores y dulces con él, lo cuidaban demasiado al ser el menor de una camada de 7 y solo esperaban que cumpliera sus 15 para nombrarlo como un alfa.

Pero todo cambió apenas el pequeño Lee cumplió esa edad.

Mark no era alfa, Mark era Omega.

Una desgracia.

Y los cuidados hacia él cambiaron, ya no lo dejaban sentarse a comer con todos, no lo dejaban salir a jugar, ni siquiera podía probar las bayas nuevas que llegaban a la cocina, pues eran solo para los alfas y los omegas solo comían sobras.

- Si no te gusta trabajar, búscate un alfa que te mantenga - Mencionó aquella señora quien lavaba ropa mientras Mark la colgaba - Búscate un alfa más fuerte que tu padre o ingluso tu abuelo, muestrales que eres un Lee y no alguien cualquiera -

- Tienes razón, señora Park - Mark sonrió con una idea - Buscaré un alfa -

(⁠人⁠*⁠´⁠∀⁠｀⁠)⁠｡⁠*ﾟ⁠+

Esa noche, Mark se escapó sigilosamente hacia la parte más profunda del bosque, de ves en cuando escuchaba a los lobos aullar, no era la mejor idea, pero tenía que encontrar a un alfa que pudiera subirlo en su árbol jerárquico.

Caminó mucho tiempo y decidió descansar en un roca, tomó un poco de agua y cuando iba a comerse algunas bayas que se robó, una sombría voz lo detuvo.

- ¿Perdido corderito? - Mark se tensó en su lugar viendo dos pares de ojos en la oscuridad - ¿Por qué no estás con tu camada? -

- Acabas de meterte en nuestra zona - Los ojos del cordero de abrieron de manera exagerada viendo a esas dos alfas lobo acercándose a él - ¿Quieres morir? - Gruñó la más alta con sus ojos rojos

- Y-yo .. - Su voz tembló más de lo que quería, se notaba la intensión de las alfas, comerlo, y no de la manera que buscaba

- Ow ¿Estás asustado? - Mark solo cerró con fuerza sus ojos cuando las dos alfas se avalanzaron hacia él, pero no llego a sentir nada pues un fuerte gruñido las detuvo

- Taeyeon, Johyun - Llamó esa voz poderosa - Vuelvan a la manada y sigan con su trabajo, yo me encargo del pequeño -

Las dos alfas asistieron con la cabeza baja yéndose de ahí en su forma lobuna, Mark suspiró con alivio, ese señor lo había salvado de esas dos alfas.

- Son bayas de la parte amarilla - Mark miró sus manitas aún con las bayas que iba a comerse minutos antes - Eres de la familia Lee ¿Qué haces por aquí? -

- Soy una desgracia - Respondió con voz baja comiéndose una baya, simplemente deliciosa - Soy un Omega en una familia de alfas corderos -

- Se necesitan de los omegas para tener más camadas ¿Acaso tu familia no piensa eso? - Mark hizo un puchero negando y ese alfa solo sentó a su lado

- No pueden haber omegas chicos, son aborrecidos - Y al parecer, ese alfa lobo entendió el propósito de Mark en aquella zona

- Soy Kun, el alfa jefe - Se presentó poniéndose en pie y haciendo una inclinación, cuando subió la miraba y se topo con la Mark, el menor solo se sonrojo por el fuerte color rojo de Kun - Es un gusto corderito -

- Mark - Respondió bajito tomando la mano que el lobo le extendía y este lo atrajo a él - Un gusto -

- Más que un gusto - Se relamio los labios mirando a Mark con intensidad - Es un placer conocerte -

MalejaR.