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mine

Mark abrió sus ojitos lentamente, le dolía todo el cuero y tenía una sed impresionante. Estiró sus brazos lentamente sintiendo el ardor de las heridas más recientes, cerró sus ojos por eso y con mucho esfuerzo, tomo asiento en la cama. Examinó su alrededor y tomó el vaso con agua que estaba en la mesa de noche a su lado, se lo terminó en un solo trago y Suspiró, cansado, estaba muy cansado.

- Buenas noches mi cielito - La voz de su novio resonó en la habitación, Mark lo giró a ver y sonrió - Arriba, hay que limpiarte las heridas y bañarte -

- No me puedo mover - Se quejó con un pequeño puchero, su novio sonrió con ternura y se acercó a Mark - ¿Tengo que levantarme? -

- Te tengo que mantener vivo, corazón - Respondió con una bonita sonrisa en su rostro acercándose al cuello de Mark - No puedo dejarte morir - Mark se estremeció sintiendo la lengua de Ten pasando por una de las heridas más recientes

- ¿Puedes parar? - Cuestionó con los ojitos cerrados y apretando sus manitos - Me duele mucho - Ten soltó una carcajada acariciando la mejilla de Mark

- No te creo - Habló con voz sería quitando las sábanas de encima de Mark - Así que, arriba -

Con mucho esfuerzo, Mark logró entrar al baño en brazos de su novio quien lo dejo sentando en el retrete en frente de un espejo mientras preparaba la tina. La mirada de Mark pasó con mucha pereza por su reflejo, tantas cicatrices, tantas heridas.

Mío.

Mío.

MÍO.

Solo eso estaba tallado en su pálida piel, unos cuantos cortes sin sentidos aquí y allá y bien grande en su pecho, las iniciales de quién sería su dueño. C.L

- Voy a limpiarte, amor - Mark asintió y se dejó hacer por su novio, algunas heridas ardían más que otras, pero era algo de todos los días, no había un dolor nuevo - Quita esa mirada de triteza, te amo mucho -

- Solo estás obsesionado - Contestó apartando su rostro cuando Ten le quería besar - No me amas, Chitta - Y solo recibió una cachetada en su rostro

- ¿Me estás jodiendo? - Gritó con el enojo reflejado en su rostro - ¿No te amo? - Volvió a gritar junto a otro golpe - Mark, te mantengo vivo porque te amo - Mark bajo la mirada con lagrimas en sus ojos - Vivo por ti -

Mark solo dejaba sus lágrimas caer, no tenía fuerza para defenderse, se sentía muy débil y no solo físicamente, sino mentalmente, estaba tan malditamente cansado de todo.

- ¿Tengo que recordarte cuánto te amo? - Mark negó con la cabeza - Al parecer no sabes cuánto te amo - Mark solo negaba con la cabeza asustado - Te amo, Mark - El cuchillo de Ten se acercaba lentamente al rato de Mark - Te amo mucho -

Mark no podía gritar, la mano de Ten en su boca no se lo permitía, solo sentía la sangre ensuciar todo su rostro.

Y para cuando comenzó la madrugada, Mark comía lentamente con una nueva herida en la frente con la frase "You're mine".

MalejaR.