→No es la continuación del especial del año pasado, este es para recompensar el no haberme puesto al día con los especiales/capítulos.
LUGAR SIN IMPORTANCIA, TIERRA
Marcus estaba listo para su cita, se miró en el espejo antes de salir de la casa. El cielo estaba despejado pero pronto llegaría la noche y con ella el viento.
Subió a su coche y condujo en dirección a la ciudad. Su casa se encontraba en medio del bosque, el vendedor le había mencionado que el anterior dueño prefería tener privacidad y para él no era ningún problema.
Excepción de los veinte minutos manejando entre árboles y más árboles. Odiaba cuando tenía que manejar de noche, ese bosque siempre estaba demasiado oscuro.
Cómo un infierno dónde ninguna clase de esperanza era bienvenida. Otra de las razones para odiar ese bosque era que no había señal.
Revisó su celular, ya llevaba veinticinco minutos manejando. Para este momento debería haber llegado a la ciudad.
Por desgracia no había ninguna clase de señal, que le diera una idea de cuánto faltaba, puesto que todo se veía igual.
Aceleró, esperaba llegar más rápido si lo hacía. De reojo creyó ver un gnomo gigante entre los árboles. Le causó un escalofrío y a pesar de su curiosidad no regresaría a confirmarlo.
Volvió a revisar su celular, cuarenta y cinco minutos desde que había salido de casa. No era posible, ya había doblado el tiempo máximo que te tardarías en cruzar el bosque, ya debería haber llegado.
Movió las manos nerviosamente sobre el volante, tanto silencio comenzó a desesperarlo.
A ciegas trato de encontrar el botón de la radio, no quería despegar la vista del camino. Su mano se topó con algo, pero no era el botón, era una mano.
Retiró la suya rápidamente y al voltear vio a una abuela sonriendo de una forma perturbadora.
Paró el carro y bajó rápidamente, apoyándose en un árbol para vomitar.
Se limpió la boca con el antebrazo antes de armarse de valor y voltear al carro.
Ya no estaba. La abuela, ya no estaba. Se estaba volviendo loco, rio para relajarse y convencerse de que solo estaba muy cansado.
Volvió a subir al carro negando ante la broma que sus ojos le hacían. Prendió el carro, pero este no encendió. Golpeo el volante, tocando el claxon a su vez.
Se detuvo. Habían globos rojos alrededor de su carro, flotando en círculos, en una especie de acoso grupal. Definitivamente lo estaba imaginando, tal vez estaba soñando y su mente replicaba la película "It".
La había visto recientemente, tenía lógica, por supuesto que sí. Eso debía de ser. Tras un parpadeo entre los globos aparecieron varias abuelas, entre ellas la que antes había estado en su carro.
Todas sonriendo, dando vueltas al carro junto a los globos, sabía que no debía salir esa noche, ¿porque no se quedó en casa a ver alguna película? O ¿Porque había firmado los papeles de la casa? ¿Porque había creído que vivir en medio de un bosque en la casa de un loco que quería estar solo era una buena idea?
A veinte minutos de cualquier humano razonable, solo un imbécil habría firmado. Y él era el mayor.
Puso los seguros del carro, aunque sabía que eso no sería suficiente, tenía miedo, pero aún así volteo a ver al bosque. Cómo sospechaba, lo que vio solo lo perturbó más.
Había un gnomo gigante mirando entre los árboles, no podía despegar la vista, ni siquiera se atrevió a parpadear. Pero tuvo que hacerlo cuando una de las abuelas golpeó el vidrio, asustandolo.
Las lágrimas que intento retener comenzaron a manar rápidamente por sus mejillas.
—Tranquilo —Dijo una voz a su espalda.
No quería voltear, pero sabía que sería peor si no lo hacía. Volteo lentamente, había una abuela en el asiento del copiloto, sonriendo.
Sus ojos se apartaron de ella para ver los asientos traseros, habían más. Era su fin, a su alrededor comenzaron a aparecer globos.
Nego llorando, mientras las abuelas sonrientes acercaban sus caras a él. Lo cual solo empeoraba la situación, los ojos de aquellas mujeres se caían, colgando sobre sus mejillas.
Se tapó la boca, reprimiendo un sollozo. Retrocedo hasta topar con la puerta, está se abrió y una mano gigante lo sacó del carro, dejándolo tirado en el camino.
Los globos y las abuelas comenzaron a dar vueltas a su alrededor, incluso las del carro se bajaron para unirse al acoso grupal.
Siguieron dando vueltas hasta que estuvieron lo más cerca que podían. Después desaparecieron y con ellos también Marcus.
______________________
Actualización del capitulo del universo principal, 15 de noviembre(fecha tentativa, no definitiva)
ESTÁS LEYENDO
GUARDIANES | LA OSCURIDAD: FASE 1, PLUTON
Ciencia Ficción∆ ∆ ∆ Martha vivia pacificamente en Pluton junto a su hermano Marcus, cuando Sara llegó con un alarmante mensaje: Keith, Dios del Sol amenazó con invadir todos y cada uno de los planetas y crear un reino de terror y oscuridad. Estos herman...